Diseñadores denuncian a Shein porque usa IA y copia su trabajo

Shein es uno de los negocios que más rápidamente ha crecido en cuanto a comercio online. Pero habría que preguntarse si todo lo que han conseguido ha sido de forma noble o si, a la vista de esta acusación, han recurrido a técnicas poco honrosas para alcanzar el éxito que han logrado. La denuncia de estos diseñadores podría sacar a relucir que no todo es oro en el paraíso de la moda.

Combatiendo el sistema

Dicen algunos diseñadores que no vale la pena enfrentarse a grupos comerciales de este calibre porque es poco probable sacar nada limpio al respecto. Pero Larissa Martinez, Krista Perry y Jay Baron han decidido ir a por todas para intentar reestablecer el orden. En su denuncia contra Shein, la cual se puede ver en el archivo .PDF que enlazamos aquí, reúnen todo aquello que han ido descubriendo con el tiempo y los resultados de sus análisis respecto a la copia de trabajo independiente que dicen que hace la plataforma de venta.

Exactamente, aseguran que el algoritmo de una inteligencia artificial está ocupándose de analizar miles de prendas creadas por diseñadores independientes en busca de aquellas que cuenten con un mayor potencial comercial. A partir del momento en el que se detectan esas prendas, la maquinaria de Shein se pondría a trabajar en ellas para comercializarlas a precios muy económicos. Y, en cierto modo, podrían permitirse esos precios porque no tendrían que pagar a los diseñadores por su trabajo, sino que sería la propia IA la que «hace todo el esfuerzo». No obstante, ten en cuenta que todo son suposiciones.

Esta es la acusación que hacen

Aunque no se puede decir que la demanda no tenga algunas lagunas, tampoco se puede negar que hay mucha veracidad en las pruebas gráficas que aporta este grupo de diseñadores enfurecidos con Shein. Uno de los problemas que tiene la denuncia es que no han podido descubrir qué tipo de IA está utilizando exactamente Shein para hacer el trabajo. Por lo tanto, aunque pueden creer que es así, su acusación se podría ver desmontada si finalmente no hubiera una inteligencia artificial de por medio. Ahora mismo, el balón estaría en el campo de Shein y la tienda posiblemente tendrá que defenderse demostrando que los diseñadores están equivocados o buscando una manera de explicarse.

Lo que sí han hecho muy bien en la denuncia ha sido presentar una serie de pruebas documentadas en las que se puede apreciar las supuestas malas prácticas que está realizando la tienda online. Acusan a Shein de saltarse las normas establecidas por la ley RICO (Racketeer Influenced and Corrupt Organizations Act), la cual se estableció en la década de los años 70 en Estados Unidos. Alegan que hay distintas partes, entidades o personas dentro de Shein responsables de lo que está ocurriendo y que, por lo tanto, la ley tiene que mediar en la situación.

Originariamente, la ley se formó con la intención de luchar contras las acciones de la mafia americana, pero con el paso de los años se ha utilizado para todo tipo de situaciones. En este caso, se podría convertir en el recurso con el cual la justicia limite las acciones de Shein y que así todos los diseñadores que supuestamente han visto cómo su trabajo era copiado puedan comenzar a recibir crédito por ello.

De todas formas, la historia no ha terminado precisamente. En TechCrunch, que es donde hemos leído la noticia, se han puesto en contacto con Shein para conocer su opinión al respecto. Lo que ha hecho la tienda ha sido responderles de forma breve y tajante asegurando que la entidad se toma muy en serio ese tipo de afirmaciones y que se van a defender enérgicamente. Pero es posible que la denuncia que han emitido estos diseñadores se vea arropada con la de otros que se pudieran encontrar en una situación similar. O quizá Shein se explique de forma sólida y la justicia se ponga de su lado. Por ello, habrá que esperar para ver cuál es el desenlace de esta batalla legal.