Se amplía el plazo para conseguir ayudas para comprar un coche eléctrico más barato

Teniendo en cuenta que la principal causa que tienen los que no quieren comprar un coche eléctrico es su elevado precio, cualquier ayuda e incentivo a su compra son bienvenidos. Hoy podemos saber que Europa ha dado luz verde a la prórroga de los incentivos fiscales que aprobó el Gobierno el pasado mes de julio.
Si estás pensando en comprar un coche eléctrico, ahora tendrás un año más para poder hacerlo ahorrando algo de dinero al rendir cuentas con Hacienda. Habrá que ver si el Plan MOVES también se prorroga próximamente o no.
Ayudas para comprar un coche eléctrico
Comprar un coche eléctrico sigue siendo algo al alcance de no todos los bolsillos, por mucho que la legislación anticontaminación esté tratando de hacernos pasar por el aro en la lucha contra la descarbonización del parque automovilístico.
Por tanto, las ayudas acaban siendo un factor decisivo que puede ayudar a dar el salto a un coche eléctrico. Por suerte, el Gobierno aprovechará la nueva remesa de fondos europeos que ha confirmado la Comisión Europea para extender hasta 2025 la vida útil del incentivo fiscal para la movilidad eléctrica. Según la información proporcionada por la Comisión Europea, esta es la principal novedad del componente del Plan de Recuperación que se refiere al sistema fiscal.
De esta forma, la deducción fiscal del 15% en el Impuesto sobre la Renta sobre las cantidades (hasta un máximo de 20.000 euros) invertidas en la adquisición de un vehículo eléctrico, que hasta la fecha llegaba hasta el 31 de diciembre de 2024, se extiende hasta Nochevieja del 2025.
Esta desgravación, con la que se pretende aumentar el número de unidades de vehículos eléctricos en circulación, a será deducible durante los dos próximos ejercicios, hasta final del año 2024, mientras que era susceptible de ampliarse un año más, como así ha acabado sucediendo.
Segun declaró el Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se trata de “una deducción, una desgravación en el impuesto de la renta de las personas físicas del 15% para la compra de vehículos eléctricos que incentiven el tránsito, esta transición verde que tenemos que hacer para hacer frente a la emergencia climática y hacer posible la movilidad sostenible en nuestro país”.
El precio es el principal factor disuasorio
Si tomamos en cuenta el último estudio que ha realizado Plenoil como parte de su proyecto Transición Posible, tenemos una mejor perspectiva sobre cuál puede ser el futuro de la adopción del eléctrico en España y este dice que el 50,3% de los conductores españoles ni se plantea comprar uno en los próximos años.
Este estudio ha servido para poner voz a las causas de disconformidad de los conductores españoles sobre el salto al eléctrico. Por tanto, no solamente sabemos que más de la mitad de la población no muy por la labor, sino que se intenta trazar un boceto de la situación actual para poder entender y actuar contra las posibles dificultades que se están encontrando en el camino hacia la descarbonización, buscando soluciones conjuntas entre el sector público y el privado.
Para sorpresa de nadie que haya mirado precios en los concesionarios, esta es la primera causa por la que no se plantean la compra de un coche eléctrico (61,3% de los encuestados). Tampoco ayuda el imaginarnos cómo va a ser nuestra experiencia una vez que tengamos uno, ya que la escasez de puntos de recarga (46,6%) o el tiempo de carga (35,7%) son otros de los elementos que disuaden a los conductores. Analizando la principal causa para no querer uno, se entiende que las ayudas juegan un papel clave. Si estas no existieran, podría ser que las cifras fuesen todavía peores y en España no somos precisamente el país con más porcentaje de eléctricos de la Unión Europea.