Los operadores insisten en la amenaza a su negocio que suponen los servicios como Skype o WhatsApp. La reducción en sus ingresos es un hecho y por este motivo vuelve a planear una controvertida posibilidad como es el bloqueo de estas aplicaciones a la hora de acceder a través de sus redes.
El último informe presentado por la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) confirma la caída en los ingresos de los operadores durante el último ejercicio. El malestar entre las compañías es evidente y buscan culpables a esta situación más allá de la fuerte crisis económica. La «regulación asimétrica» molesta a los operadores, cuya próxima aspiración pasa por tener un control sobre los llamados «servicios over the top» como las citadas aplicaciones de voz IP y mensajería como WhatsApp que repercuten de forma directa en parte de su negocio.
El organismo encargado de regular las telecomunicaciones en nuestro país ha admitido que se plantea actuar sobre estos servicios al igual que el resto de reguladores europeos del sector. Las medidas que baraja la CMT «están aún en los primeros balbuceos«, según reconoció Bernardo Lorenzo, pero podrían abrir un nuevo panorama en el servicio móvil que contente a los operadores pero probablemente no tanto a los usuarios.
La caída en los beneficios de los operadores gracias a WhatsApp es evidente. La aplicación multiplataforma ha venido a sustituir a los clásicos SMS. En España en concreto son más de 10 millones los usuarios que la utilizan, lo que evidencia el desplome del tradicional negocio de los operadores en mensajería, otrora gran fuente de ingresos. La primera respuesta de los operadores ha sido lanzar su propia aplicación de similares características, denominada Joyn, pero sus pretensiones podrían ir más allá y no es descartable que filtren servicios como WhatsApp siguiendo los pasos de lo que ya hacen con los de voz IP.
Skype es el más claro ejemplo. Poco a poco crecen las llamadas por Internet a pesar de las trabas de los operadores para evitar que crezcan. A día de hoy, mientras algunos operadores no filtran este servicio, otros deciden permitirlos únicamente en las tarifas de datos más caras, una opción que parece poco probable a la hora de aplicarla a servicios de mensajería por el descontento que generaría entre los usuarios.
¿Cómo regulará la CMT estos servicios? ¿Surgirán conexiones más caras que permitan WhatsApp y Skype y otras más baratas que no den acceso a estos servicios?