La percepción de las diferentes distribuciones de Linux que Microsoft tenía en el pasado parece que ha cambiado por completo en el último par de años, comenzando incluso a trabajar de manera conjunta en diversas funciones y aplicaciones.
Una de las principales razones de este aumento de «respeto» que al parecer los de Redmond están teniendo con respecto a los desarrolladores de Linux viene, en gran medida, dado por el vertiginoso crecimiento que el mundo del software de código abierto está alcanzando en los últimos tiempos. Es por ello que quizá el gigante de Windows se ha visto casi en la obligación, o al menos está comenzando a verse en la obligación, de adaptarse y buscar la manera más efectiva de ir acercándose paulatinamente a esta comunidad en continua expansión.
Por todo ello estamos viendo que en los últimos meses se han ido anunciando diversas implementaciones que nadie creía que pudiesen ser posibles hace cosa de 10 años. Entre estas podemos destacar la inclusión de Bash (Bourne-again shell ) en Windows 10, que como algunos sabréis, se trata de una consola de comandos Unix para GNU que supuso una de las más importantes shell del proyecto Unix en sus inicios.
Pero Microsoft no quiere parar aquí, ya que uno de sus objetivos estriba en el desarrollo e implementación de nuevas herramientas y ayudas para que ambos sistemas puedan trabajar, con el paso del tiempo, cada vez de manera más conjunta. Por ello está preparando nuevas sorpresas especialmente dirigidas a los usuarios habituales de Linux.
Sirva como ejemplo el reciente anuncio que la firma he hecho pública recientemente donde se afirma en uno de los foros de la comunidad de Skype «una excelente noticia para los usuarios de Linux«. Por el momento no se han dado a conocer demasiados detalles al respecto, aunque lo que sí se sabe es que el anuncio completo se hará en la misma comunidad el próximo día 13 de julio.
Si tenemos en cuenta que la intención de Microsoft es ir, en parte, adaptándose a las necesidades de los usuarios de software de código abierto, no es difícil adivinar que lo más probable es que el gigante de software esté preparando una nueva aplicación de Skype para Linux. Esto es algo que ya se está llevando a cabo con otra aplicaciones, proyectos que se están llevando a cabo gracias a la ayuda de beta testers de todo el mundo.
Además la firma está trabajando en un Skype adaptado plenamente para Windows 10, es decir, en una versión universal para este sistema que se ejecutará en PC y smartphones, por lo que una nueva versión para Linux encajaría perfectamente con el plan de expandir este cliente de VoIP en tantas plataformas como sea posible.
¿Pensáis que Microsoft está realmente intentando adaptarse, al menos en parte, a los usuarios de software de código abierto?