Windows 10 vuelve a cargarse las impresoras con su última actualización

Windows 10 vuelve a cargarse las impresoras con su última actualización

Alberto García

El pasado martes, Microsoft lanzó el Patch Tuesday correspondiente al mes de septiembre. Estos parches se lanzan los segundos martes de cada mes, y éste se lanzó el 14 de septiembre por la tarde. En los últimos días, multitud de usuarios han empezado a quejarse de problemas, y uno de ellos es, por desgracia, un viejo conocido.

A lo largo de este año hemos vivido un auténtico desastre en cuanto a los problemas con impresoras en Windows 10. La compañía tuvo que lanzar numerosos parches para solucionar vulnerabilidades, así como también rompió la compatibilidad en algunos momentos. Ahora, las actualizaciones acumulativas KB5005565 y KB5005566 están reviviendo fantasmas del pasado.

Fallo en los últimos parches de Windows 10

Tras instalar las últimas actualizaciones en el sistema, los usuarios de Windows 10 afirman que están teniendo problemas con impresoras conectadas por red, ya sea una impresora conectada por WiFi o por Ethernet. Por culpa de este fallo, no es posible imprimir documentos, y el error se soluciona al volver a la versión anterior. Por ello, el culpable del fallo es claramente el parche.

Curiosamente, el sistema operativo detecta la impresora perfectamente, e incluso inicia la impresión. El problema es que, aunque la impresora inicie los movimientos, no llega a imprimirse nada. Otros usuarios afirman que Explorer.exe se cuelga cuando le dan a imprimir un documento.

La actualización lanzada el martes contiene soluciones a vulnerabilidades relacionadas con PrintNightmare (CVE-2021-36958). Esta vulnerabilidad fue dada a conocer en junio antes de tiempo por error, lo que obligó a Microsoft a parchearla lo más rápido posible, lo que dio lugar a errores como este.

La sombra de PrintNightmare es alargada

PrintNightmare es una vulnerabilidad de que permite ejecutar código remoto, y que reside en la Cola de impresión de Windows 10. La Cola de impresión está presente en todas las versiones de Windows desde hace décadas. Así, cualquier atacante podía obtener permisos de administrador y hacer lo que quisiera en el ordenador si no la teníamos parcheada.

Por eso, da aún más pena tener que desinstalar este último parche que solucionaba por completo todas las vulnerabilidades relacionadas con este fallo en el caso de que queramos volver a poder imprimir.

Algunos usuarios afirman que también están teniendo problemas para instalar la actualización a través de Windows Update, aunque a este respecto no ha habido tantas quejas. Además, viendo los fallos que introduce, es casi mejor que el sistema no nos insista en instalar la actualización. Habrá que esperar como mínimo hasta finales de mes para que Microsoft pueda lanzar algo que solucione este fallo. En el caso de que lo lancen, esa actualización habrá que instalarla manualmente yendo a Windows Update. Si no, habrá que esperar al segundo martes de octubre (que cae el día 12) para que se descargue e instale la actualización mensual.