Lomo de asno y dientes de dragón: qué significan estas nuevas señales pintadas en la carretera
La Dirección General de Tráfico tiene en marcha trabajos de modernización y actualización de sus señales de tráfico para adaptarse a los nuevos tiempos y mejorar la seguridad vial. Hemos hablando anteriormente de las nuevas o reformadas señales verticales, pero los cambios también se aplican a las señales horizontales pintadas en la calzada.
Parecen ingredientes para hacer una poción de Harry Potter, pero lomo de asno y dientes de dragón son dos de las marcas viales que te puedes encontrar con mayor frecuencia según pase el tiempo.
Lomo de asno, la señal que puede dañar tu coche
En El Debate vemos cómo se está produciendo la implementación de estas nuevas señales horizontales pintadas en la calzada. En el caso del «lomo de asno» hablamos de una medida de disuasión para forzar a que los conductores reduzcan la velocidad drásticamente.
Suelen estar en entornos urbanos donde hay que hacer que por seguridad se circule entre las velocidades de 30 y 50 kilómetros por hora. Son una variante de los clásicos badenes, elevaciones de la calzada en las que observaremos la presencia de tres triángulos o puntas de flecha paralelas por carril, que apuntarán en dirección por la que llegará el conductor que se las encuentre. Así, se prevé con mayor claridad la elevación de la calzada.
Se diferencia con el badén clásico en que este no tiene rampa de entrada y salida sobre una superficie plana, sino que son de superficie circular, como si se tratara del lomo del burro y de ahí su nombre tan particular. Tampoco hay que confundirlos con los pasos de cebra elevados.
De acuerdo con su pliego de condiciones deben contar con vierteaguas y la separación entre dos consecutivos debe estar entre 50 y 200 metros. Además, deben tener una altura máxima de siete centímetros, aunque normalmente miden seis, y una longitud máxima de cuatro metros. Por supuesto, esta altura debería ser compatible con pasarlos a velocidad reducida sin dañar el vehículo, pero la mayoría de resaltes de nuestras carreteras no cumplen la normativa y ponen en riesgo cuanto menos nuestra carrocería.
Dientes de dragón, señales reducción de velocidad
Los triángulos de los dientes de dragón tienen la misma función que los que vemos en el «lomo de asno»: alertar de la necesidad de reducir drásticamente la velocidad.
Ministerio Transportes, Movilidad y A. Urbana@mitmagobSe trata de actuaciones de mejora de seguridad vial basadas en el calmado del tráfico.
#DGCarreteras https://t.co/BanErPhZdH19 de noviembre, 2021 • 18:12
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En esta ocasión se suelen pintar estos triángulos ubicados a ambos lados de un carril y se sitúan por dentro de las líneas, apuntando hacia dentro de dicho carril. Estos se colocan a una distancia de 1,5 metros y transmiten la sensación al conductor de que la vía es mucho más estrecha de lo que realmente es, buscando como fin que instintivamente reducen la velocidad.
Estos tienen una variante que se ha llamado líneas de borde quebrado, que cumplen una función muy parecida. En este caso, se trata de señales de pintura blanca en forma de zigzag se pintan en los lados exteriores de los carriles y que indican la inmediatez de un paso de cebra, haciendo que el fin sea una vez más el mismo: que se aminore la marcha.
