Movistar continúa con sus planes de expansión de su red de fibra óptica previsto para este año 2011. La compañía ha intensificado su campaña en las últimas semanas y se encuentra en pleno proceso de solicitud de permiso a las comunidades de vecinos para la instalación de la infraestructura FTTH en sus edificios.
La expansión de la red de última generación en todo el país es uno de los grandes retos a los que se enfrenta Movistar. El operador ya ofrece conexiones de 50 megas allí donde llega una cobertura que por el momento es muy reducida pero que espera alcanzar el millón de hogares a finales del presente año. Recientemente también anunció el lanzamiento de su conexión de 100 Mbps / 10 Mbps pero por ahora sólo las empresas pueden acceder a este servicio ultrarrápido.
En esta última semana nos hemos hecho eco de campaña de migración de los clientes de ADSL a las conexiones de fibra hasta el hogar (FTTH en sus siglas en inglés) de forma gratuita con el fin de rentabilizar desde el primer momento las inversiones que está haciendo en la expansión de sus nuevas redes. La compañía contacta con los usuarios por vía telefónica para ofrecerle estas conexiones si tiene cobertura, ya que el precio de la conexión 50 Mbps / 5 Mps es similar al de los 10 megas.
Como prueba de esta intensificación en la campaña de expansión de fibra óptica, ADSLzone ha tenido acceso a un documento en el que confirmamos cómo Movistar se está dirigiendo a las comunidades de vecinos para solicitar el permiso necesario para instalar toda la infraestructura necesaria en el edificio.
Junto a la solicitud de permiso de instalación de cables y equipos de distribución de fibra óptica se adjunta una carta en la que se intenta convencer a los presidentes de las comunidades de las bondades de estas conexiones ultrarrápidas de última generación. «Sin duda, esta es una oportunidad que no puede dejar pasar si quiere disfrutar de la última tecnología en su comunidad de vecinos», concluye un escrito en el que se insiste en la gratuidad de este proceso de instalación.
Una vez la comunidad da el permiso Movistar procede a desplegar sus infraestructuras, pero precisamente en este sentido la compañía está encontrando obstáculos. Como ya vimos a finales del pasado 2010, el 80% de las comunidades de vecinos consultadas por el operador rechazaban estas instalaciones a pesar de no suponer coste alguno para los vecinos. Esperemos que esta tendencia vaya cambiando y la nueva iniciativa de Movistar tenga el máximo éxito para beneficio de los vecinos que quieran acceder a Internet a alta velocidad.