La última batalla en el sector de las videoconsolas comenzó hace unos meses. Microsoft y Sony pusieron a la venta Xbox One y PlayStation 4 respectivamente, siendo hasta ahora la consola nipona la vencedora en ventas. Desde el sector han asegurado que ésta será la gran vencedora de esta generación.
Desde que el pasado año se diesen a conocer las consolas de nueva generación, las especulaciones de los distintos analistas no se hicieron esperar. No obstante, fue en el E3 2013 cuando asistimos al gran pronunciamiento de los analistas sobre el futuro de ambas consolas, cuando las dos compañías publicaron los precios de venta que tendrían ambos equipos.
La diferencia de 100 dólares/euros entre una y otra pronto fue vista como la clave para el éxito en ventas en los meses iniciales y los resultados no tardaron en dar la razón a estos pronósticos posicionados a favor de PS4. No en vano, el panorama actual es bastante claro al respecto. Hasta la fecha se han vendido 4,5 millones de PlayStation 4 por 3,1 millones de Xbox One.
La diferencia parece bastante notable si tenemos en cuenta que ambos lanzamientos se produjeron casi a la par. Basándose en estos resultados y las estrategias anunciadas por las compañías, analistas como Ahsan Rasheed consideran que la nueva consola de Microsoft jamás podrá acabar con la distancia que le separa con su principal competidor, por lo que la consola de Sony será la gran triunfadora de esta generación.
Bajo este punto de vista, ni siquiera una hipotética rebaja en el precio de la consola de los de Redmond o un mejor catálogo de juegos exclusivos podrían servir para igualar la batalla. El hecho de que ninguna de las dos consolas hayan llegado aún a Japón y que este territorio sea tradicionalmente más favorable a PlayStation sirve para reforzar su hipótesis.
¿Creéis que la brecha abierta entre una y otra es insalvable apenas transcurridos dos meses de su lanzamiento? Cabe recordar que en la generación de PS3 y Xbox 360 la batalla fue de lo más disputada y solo en el último año Sony logró superar en ventas a su rival. ¿Qué tendría que suceder para que se diese un vuelco en la tendencia marcada hasta ahora en la nueva generación?