Pocos, muy pocos usuarios logran ajustar su tarifa móvil a sus necesidades a la hora de hablar y navegar. Tan solo el 2,5% de los usuarios pagan de acuerdo al uso que le dan al móvil. El resto paga una factura por encima de sus necesidades.
Un estudio realizado por Cumberland Solutions vuelve a enfatizar sobre una realidad que afecta al bolsillo de la mayoría de los usuarios españoles pero de la que no se tiene conocimiento habitualmente. Se trata del exceso que se paga en las facturas de telefonía móvil en comparación con lo que realmente se habla y navega por no haber estudiado el mercado y contratar una tarifa acorde con las necesidades que se tienen.
Para realizar su último informe la compañía se ha basado en las más de 36.000 descargas de su aplicación Weplan, un comparador de tarifas entre 26 operadores móviles. Las conclusiones son rotundas: solo un 2,5% de los usuarios consigue adaptar su tarifa a sus necesidades reales. El resto paga de más por múltiples motivos, aunque el principal pasa por el desconocimiento de lo que se ofrece en el mercado o por verse tentado, por ejemplo, a la hora de conseguir un terminal subvencionado y estar obligado a contratar una tarifa con determinado número de minutos y megas que no llega a consumir.
Este dato viene a confirmar el aportado por otros estudios similares como el que conocimos hace algo más de un año de la mano de la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios). En él se señalaba que en total los usuarios podrían haber ahorrado hasta 5.200 millones de euros al año en sus facturas si hubiesen portado sus líneas a otras compañías o cambiado sus tarifas actuales por otras en el catálogo que ofrece su operador.
No obstante, poco a poco estas cifras empiezan a mejorar. El auge de los Operadores Móviles Virtuales (OMV) ha permitido que las facturas de miles de usuarios se hayan visto reducidas. En el último año hemos asistido también al fin de las subvenciones de terminales por parte de grandes operadores como Movistar y Vodafone (recuperadas de forma puntual) que han provocado una reducción en facturas de los usuarios que optan por fórmulas como el pago a plazos o la compra directa de móviles libres.
Por suerte, el catálogo de ofertas de tarifas móviles en nuestro país es muy amplio. Nuestro consejo es estudiarlo al detalle así como nuestras últimas facturas para saber nuestro hábito de consumo aproximado (cuántos minutos solemos hablar al mes, el número de llamadas que realizamos, su duración, si enviamos o no SMS o cuánto solemos navegar, etc.). Con estos datos podremos engordar ese escaso 2,5% de usuarios que sí ajustan sus necesidades a su tarifa y, lo más importante, pagar menos en nuestra factura mensual.