Apple, tradicionalmente, ha sido una empresa que ha implementado cambios innovadores en sus móviles y que otras empresas han seguido. Sin embargo, muchos de ellos no tienen buena aceptación, o directamente suponen más problemas que soluciones. Uno de ellos es Face ID, que sería un buen complemento del lector de huellas si Apple hubiera decidido no eliminarlo. Y ahora se ha demostrado uno de sus principales inconvenientes: puede inculparte en delitos.
Face ID no requiere permiso judicial
Con la huella es más difícil que alguien consiga desbloquear nuestro móvil, ya que podemos resistirnos a colocar la huella en el lector. Sin embargo, con Face ID es suficiente con que nos retengan contra nuestra voluntad y coloque en móvil delante de nuestra cara. Eso es lo que ha hecho el FBI con un detenido acusado de delitos de abusos de menores.
Este es el primer caso conocido en todo el mundo de manera pública en el que se ha usado Face ID para acceder al terminal de un sospechoso en contra de su voluntad. Cuando Apple presentó la función ya surgieron dudas sobre qué harían las fuerzas del estado en el caso de tener que enfrentarse al desbloqueo del móvil por parte de un sospechoso que se negase a hacerlo.
Finalmente, parece ser que pueden hacerlo, como ha ocurrido en el caso de Grant Michalski, residente en Ohio y de 28 años. El FBI le acusa de haber descargado y almacenado material relacionado con pornografía infantil. En primera instancia consiguieron obtener el ordenador, pero una búsqueda más en profundidad les llevó a encontrar su iPhone X que tenía escondido en casa.
No se pueden dar contraseñas, pero no se dice nada de huellas o cara
Una vez lo tuvieron, le pidieron que pusiera la cara, y le colocaron delante el teléfono para desbloquearlo. Con ello, pudieron acceder al historial de llamadas, chats, fotos y otros datos del terminal para inculparle. Después de ello, el FBI obtuvo una orden judicial para poder obtener el número PIN con el fin de poder usar herramientas forenses porque el móvil requiere introducir el PIN tras llevar más de una hora bloqueado, y Michalski tuvo que dárselo. Todo esto ocurrió el pasado mes de agosto, y el FBI encontró pornografía infantil en su móvil y PC.
Actualmente hay dos empresas que afirman poder desbloquear los iPhone sin PIN: Grayshift y Cellebrite, quienes ya han conseguido contratos valorados en varios millones de dólares con las autoridades norteamericanas, como el Servicio Secreto o las fuerzas de Inmigración del país. Con esas herramientas afirman poder desbloquear incluso los iPhone X.
Este tipo de usos podrían ir en contra de la Quinta Enmienda de la Constitución de Estados Unidos, donde un acusado tiene todo el derecho a no autoincriminarse en una acusación contra él. Dejar que desbloqueen su móvil va en contra de ello. Está prohibido tener que ceder contraseñas, pero no hay leyes que hablen de protecciones biométricas como la huella o la cara.