2018 está siendo el año en el que muchos fabricantes están confirmando una clara tendencia en la industria dando el salto a pantallas OLED. Samsung ya lleva usándola desde siempre en su gama Galaxy S, mientras que LG dio el año pasado con el V30, usando para ello sus propios paneles. Los Pixel también los equipan, y Apple también ha dado el paso con el iPhone X. Sin embargo, las ventas de este último son más bajas de lo que Samsung esperaba.
Apple lanzará tres móviles este año, y dos tendrán pantallas OLED
Ya a principios de 2017 empezaron a sonar con fuerza los rumores de que Samsung había firmado un contrato con Apple para venderles casi 100 millones de pantallas OLED, y para este año se estimaba que la cifra será incluso del doble. Esto se debe a que Apple volvería a lanzar tres móviles en 2018, y el modelo Plus y el sucesor del X equiparían pantallas OLED, mientras que el modelo base seguiría usando LCD. Es posible incluso que reutilicen el exceso de stock de paneles que no han equipado en iPhone X actualmente.
Sin embargo, The Korea Herald afirma que Samsung ha detenido los planes de creación de una planta que tenían pensado construir con el objetivo de hacer frente a la gran demanda que esperaban de estos paneles. Muchos fabricantes se han ido con LG, y al final la demanda no ha sido tanto como se esperaba en un principio. Los paneles LCD siguen siendo más baratos que los OLED, y su precio además ha seguido cayendo en el último año.
Samsung esperaba una mayor demanda de paneles OLED
En concreto, Samsung está teniendo problemas para encontrar compradores para sus paneles en China, ya que muchos de ellos todavía no han decidido hacer la transición a estos paneles. Tampoco ha ayudado que Apple haya reducido los pedidos de pantallas en un 50% debido a las bajas ventas que están teniendo con el iPhone X. Samsung ya había modificado la producción de la planta A4, y había añadido nuevas instalaciones a la planta A2 para la fabricación de estos paneles.
En concreto, Apple esperaba vender 100 millones de iPhone X, y las predicciones bajaron a 90 millones en enero, y finalmente a 75 millones en febrero. Recientemente, Apple compró 55 millones de pantallas para el iPhone X, y prevé que las ventas sigan cayendo aún más en los próximos meses.
Samsung invirtió 3.800 millones de dólares en la nueva planta para fabricar pantallas OLED, debido a la gran demanda que estimaban que iban a recibir de Apple y otros fabricantes. Actualmente la producción de paneles se estima en 60.000 unidades adicionales al mes de la que ya es la sexta generación de paneles OLED de la compañía.