No, Windows 10 no pierde rendimiento con los parches de Meltdown y Spectre
Llevaba tiempo hablándose de ello, rumoreándose un importante problema, pero finalmente hace algunas horas se hicieron públicas dos graves vulnerabilidades que afectan a microprocesadores Intel, AMD y ARM. Uno de estos problemas es exclusivo de Intel; por este y otros motivos hemos oído hablar de ‘Intelgate’ en las últimas horas. En cualquier caso, Microsoft ya ha lanzado parches de seguridad para Windows 10 para proteger a los usuarios. Y se anunció que el rendimiento podría reducirse por los ajustes realizados para evitar las vulnerabilidades.
Estos graves problemas de seguridad afectan a prácticamente cualquier microprocesador actual no sólo en ordenadores de sobremesa, sino también en portátiles e incluso en dispositivos móviles Android. En el caso de equipos de escritorio y portátiles, con Windows 10, ya disponemos de un parche de seguridad desplegado por la compañía de Redmond. El ‘miedo’, con respecto a este parche de seguridad, es que la solución a Meltdown y Spectre supusiera una pérdida de rendimiento para los ordenadores afectados. Y sin embargo, las pruebas de rendimiento llevadas a cabo arrojan algo de luz, porque no hay pérdidas.
Los parches de Windows 10 para Meltdown y Spectre no te harán perder rendimiento
Se han hecho diferentes pruebas de rendimiento sobre distintos equipos, y de las mismas se puede extraer que no hay pérdida de rendimiento en los equipos con sistema operativo Windows 10 tras instalar los parches de seguridad en contra de Spectre y Meltdown. Si bien es cierto que se aprecian algunas ligeras variaciones en los resultdos finales de las pruebas, igual que en algunos casos se pierde de forma apenas notable, en otros se aumenta el resultado de la prueba también de manera insignificante. Por lo tanto, una buena noticia para todos los usuarios del sistema operativo de escritorio de Microsoft.
En el campo específico de los videojuegos, también se han hecho pruebas de rendimiento mejorado. Concretamente tenemos resultados con Assassin’s Creed Origins, con una NVIDIA GeForce GTX 1080 Ti, que antes y después del parche de seguridad contra Meltdown y Spectre devuelve exactamente los mismos resultados. Y en los casos particulares en los que se haya producido una pérdida de rendimiento, la cuestión no es preocupante: Intel ha prometido nuevas actualizaciones sobre estos mismos parches para ajustar el software de forma que se restaure el rendimiento.