Mañana 9 de abril se cumplirán seis meses desde el lanzamiento oficial del iPhone 6s en nuestro país y con ello serán también seis los meses desde que tengo lo último de Apple en mi poder. En este tiempo he probado el terminal y todas sus funciones hasta la saciedad y estoy en posición de contar mis impresiones.
Aunque ya analizamos el iPhone 6s durante sus primeros días en el mercado, considero que ofrecer una visión con varios meses de usos puede llegar a ser más interesante incluso. Ahora sí, he exprimido al máximo el nuevo procesador A9, la cámara de fotos de 12 megapíxeles con grabación en 4K y la pantalla 3D Touch sensible a la presión. A continuación, os voy a contar mis impresiones en cada uno de los aspectos destacados del terminal y sus novedades, con lo que más y menos me ha gustado.
Diseño
El iPhone 6s sigue la premisa marcada por Apple de respetar el diseño del modelo anterior y mejorar los componentes clave. Esto es algo que a muchos le puede gustar y a otros no, pero siempre dependerá de la opinión personal. En mi caso, el diseño del iPhone 6s no me parece el mejor que ha conseguido la firma californiana, lugar que siempre reservo para el iPhone 5s. Sin embargo, cuenta con un tamaño cómodo para el día a día aunque se ve lastrado por el aumento de peso con respecto al iPhone 6. La diferencia entre 143 gramos y 129 gramos se termina notando y es una de las pegas que le pongo a nivel externo.
Otro tema que me gustaría comentar es el de la protuberancia de la cámara. Lo cierto es que tras seis meses de usos no he tenido ningún problema con ello y ni siquiera lo he notado. En mi defensa debo decir que el terminal siempre ha sido utilizado con funda, lo que iguala la protuberancia y la deja a ras del resto. En relación con el bendgate, el teléfono siempre ha ido en el bolsillo del pantalón y hasta la fecha no ha sufrido nada.
Pantalla
Una de las grandes novedades del iPhone 6s llegaba con la pantalla sensible a la presión 3D Touch. Esto permite realizar acciones adicionales dependiendo de la presión que ejerzamos sobre la pantalla. ¿Mi sincera opinión? Uso nada o casi nada esta función. Creo que la culpa está en el tejado de los desarrolladores que no han sabido sacarle partido (o Apple no les ha dejado) pero no termino de verle la utilidad en estos momentos.
En cuanto a la calidad de la pantalla, echo de menos que Apple no haya apostado definitivamente por dar el salto a Full HD en el modelo más pequeño de la gama e incluso observo con algo de envidia sana las pantalla Super AMOLED de otros terminales de la competencia con sus negros puros. Espero que este sea el siguiente gran cambio en los próximos terminales.
Cámara
Otra de las novedades del iPhone 6s era el salto a los 12 megapíxeles junto a varias mejoras en la tecnología de la cámara de fotos. Por desgracia, el modelo más pequeño de la gama carece de estabilización óptica de imagen, algo que se echa mucho de menos en situaciones de poca luz. La cámara del iPhone 6s me ha decepcionado. No es que sea una mala cámara, que no lo es, pero el terminal de referencia de una firma como Apple tiene que apuntar más alto. Sin ir más lejos, DxOMark coloca 11 modelos por encima del iPhone 6s en relación a la calidad de la cámara de fotos.
Y con la nueva cámara llegaron las Live Photos. Estas imágenes animadas prometían revolucionar la forma de captar el mundo que nos rodea, pero de nuevo, se trata de una funcionalidad con bastante poco interés. Además de ocupar el doble de espacio en el terminal, resulta complicado conseguir una buena Live Photos que se parezca en algo a las que Apple enseña en sus anuncios.
La grabación de vídeo 4K es otra de las novedades que nos propone Apple. Los vídeos grabados con esta resolución tienen una calidad envidiable, pero de nuevo se echa de menos el OIS (estabilización óptica). Además, no tiene ningún sentido lanzar la grabación 4K junto a un terminal de 16GB. Muy mal Apple.
Rendimiento y batería
Otro de los aspectos que he podido comprobar en estos seis meses de uso es el rendimiento del nuevo procesador A9. Los de Cupertino siempre aciertan con sus chips y el hecho de controlar software y hardware termina marcando la diferencia. Además, por primera vez tenemos 2GB de memoria RAM. El terminal funciona fluido en todo momento y no he vivido ninguna situación de ralentizaciones ni parones de ningún problema. Creo que es lo menos que se le puede pedir a la gama más alta.
Por su parte, la batería simplemente cumple sin grandes alardes. Me dura el día al completo con un uso normal pero se echa en falta alguna función adicional como la carga rápida para momentos puntuales. Es sorprendente que una batería de tan poca capacidad ofrezca este rendimiento pero de nuevo volvemos al control total sobre el hardware y software.
Conclusiones
El iPhone 6s me ha dejado muy buen sabor de boca pero como siempre hay puntos negros. Se trata de una compra nada recomendada si venimos de un iPhone 6, ya que las mejoras no nos aportarán demasiado. Tanto el 3D Touch como las Live Photos son novedades prescindibles que podrían desaparecer, en mi caso, de la noche a la mañana sin que me diera cuenta. Apple debe tomar notas de cara el iPhone 7 para pulir algunos aspectos donde la competencia les ha adelantado por la derecha.