Todo apunta a que en los próximos años, el Internet de las Cosas va a adquirir una relevancia vital en nuestras vidas. La posibilidad de conectar a la red cualquier dispositivo u objeto de nuestra casa plantea posibilidades infinitas a la par que algunas cuestiones sobre la viabilidad de las mismas. Una de ellas llega por el lado de la autonomía de todos estos dispositivos conectados y su recarga, y una solución para evitar rodearnos de cargadores y cables podría llegar de la mano de los propios router Wi-Fi.
La idea no es nueva ya que desde hace meses desde diversos frentes se viene trabajando para tratar de considerar a los router Wi-Fi como una herramienta para cargar a distancia cualquier dispositivo gracias a la señal inalámbrica que pueden emitir estos aparatos. Uno de ellos era el estudio llevado a cabo en la Universidad de Washington en Seattle, que ya contemplaba esta opción, pero las primeras pruebas con éxito de esta tecnología han tardado más en producirse. De hecho, en seis hogares se han realizado experimentos para suministrar energía durante 24 horas mediante el router Wi-Fi a los dispositivos conectados.
La energía de las ondas de radio del router es convertida en voltaje a través del rectificador de forma similar a como ya se ha planteado para dispositivos que no incluyen batería como puedan ser los sensores de temperatura de calentadores de agua o pequeños dispositivos. Pero la idea es conseguir que en un futuro, cualquier dispositivo que esté al alcance del router Wi-Fi pueda beneficiarse de esta fuente de energía sin cables y sobretodo en el caso del Internet de las Cosas, esto provocaría un mayor desarrollo de este tipo de productos.
Suministrar energía vía Wi-Fi, permitido pero con restricciones
En muchos países, la transmisión de energía a través de la señal Wi-Fi está estrictamente regulada, como ocurre en el caso de Estados Unidos donde un mayor número de compañías se han interesado en este tipo de proyectos. Allí la FCC solo permite suministrar una potencia de 1 vatio través de estas señales, aunque es algo suficiente para dotar de energía para funcionar a pequeños dispositivos si tienen un acceso continuo a la fuente de la emisión de dicha señal.
El problema es que una señal Wi-Fi no siempre es continúa o estable pero por ello algunos proyectos como el del sistema Cota, trabajan en ofrecer una señal ininterrumpida, pensando en una forma de cargar o dar energía “sin cables” a los dispositivos electrónicos. Desde luego la carga inalámbrica empieza a adquirir protagonismo en teléfonos móviles y otros gadgets, por lo que no es raro pensar en un futuro cercano en el que los cables hayan pasado a la historia.
¿Creéis que en el futuro cargaremos nuestros dispositivos solo con la señal Wi-Fi de los router inalámbricos?