El jefe de marketing de Xbox en Reino Unido considera inapreciables las diferencias en cuanto a resolución ofrecida por Xbox One y PS4 en pantallas inferiores a un tamaño de 60 pulgadas. Confía que en un futuro inmediato, los juegos que están por llegar inviertan la percepción que sitúa a Xbox One por debajo.
Un nuevo capítulo más en la eterna guerra que mantienen PS4 y Xbox One, las consolas de nueva generación lanzadas a finales del pasado año. En este caso, es Harvey Eagle, un ejecutivo de Xbox en Reino Unido, quien ha querido salir al paso de las afirmaciones que aseguran que algunos juegos -hablando del caso comparable de los títulos multiplataforma-, ofrecerían una mayor resolución en la consola de Sony que la mostrada por Xbox One.
Para el responsable de marketing de la división británica de Xbox, no son realmente apreciables unas diferencias significativas en la resolución para pantallas de un tamaño inferior a 60 pulgadas, pero no obstante, reconoce que desde Xbox One se debe afrontar el problema que supone para las ventas, que el mercado tenga esta percepción que pondría a la consola de la empresa de Redmond por detrás de su competidor.
Más potencia para Xbox One
La confianza en la potencia de su máquina es total para Eagle, quien ha retado a encontrar las citadas diferencias visuales. No obstante, desde Microsoft no se quieren relajar sabiendo que tienen que recuperar terreno, y ya han decidido mover ficha al respecto con cambios importantes. Entre ellos, se incluyen la supresión de Kinect como elemento obligatorio y una actualización en el kit de desarrollo que van a poner a disposición de los creadores de videojuegos. Con ello se pretende que la potencia de la GPU que iba destinada al uso de Kinect –se estima en un 10%-, sea aprovechada para exprimir al máximo la calidad de los futuros juegos que puedan ir llegando.
Desde Microsoft, se recalca que ellos únicamente van a poner las herramientas y esa potencia adicional a disposición de los desarrolladores, pero que serán estos los que tendrán que decidir de qué forma usarla para optimizar el resultado final de los títulos y no presenten problemas. Lo cierto es que por el momento, algunos multiplataforma del mercado muestran una mejor tasa de frames y resolución en la máquina de Sony, aunque se espera que estos cambios llevados a cabo por Microsoft ayuden a invertir la situación.
Con ambas consolas enfocadas hacia un mismo mercado objetivo y ofreciendo un producto de características similares, los pequeños factores diferenciales son lo que inclinan la balanza para que un comprador se decante por una u otra. Desde Sony y Microsoft han querido poner un especial empeño en cuidar tanto sus juegos propios, como las exclusividades temporales o de contenido que ofrecen las third parties, para tratar de ganarse el favor del público.
Ayer, conocíamos que el CEO de Microsoft, Satya Nadella, comunicaba a sus empleados los planes de futuro de la compañía, y en ellos se destacaba el importante lugar que va a ocupar la división Xbox por la cual van a seguir apostando con firmeza.