La mejor forma de explorar lo que se encuentra fuera de nuestro planeta es mediante la robótica. Desde el Perseverance hasta el Opportunity, son muchos lor robots que han estado o están en La Luna o en Marte y nos hace entender mejor estos ecosistemas e investigar todo aquello que hay fuera de nuestro planeta.
La Agencia Espacial Europea (ESA) ha adjudicado un contrato a la empresa Milrem Robotics para un conjunto de proyectos destinados a proporcionar robots planetarios con un mayor grado de autonomía mediante el uso de las capacidades que la compañía ha desarrollado para su línea de robots militares modulares. Este contrato fue firmado la semana pasada.
La importancia de la autonomía
Aunque a primera vista los robots militares diseñados para el campo de batalla y los diseñados para tareas de exploración tengan poco en común, hay algo que los une y es que estos robots son cada vez más autónomos y necesitan menos del ser humano para funcionar correctamente y realizar sus tareas. Esto significa que los robots no solo deben navegar y realizar tareas sino que también deben tener la capacidad de reevaluar esos objetivos en función de las condiciones cambiantes y volver a planificar la misión.
Según la hoja de ruta que ha desarrollado la Agencia Espacial Europea, Milrem Robotics desarrollará un sistema automático de planificación de misiones para misiones en La Luna. Este sistema aprovechará la observación remota, imágenes locales y datos de sensores, además de recursos móviles para evaluar puntos de interés en función de las prioridades de la misión.
A medida que con el tiempo este sistema vaya cogiendo forma y madurando, se podrá aplicar a otras misiones espaciales como en Marte o a asteroides que estén próximos a La Tierra durante los próximos 20 años.
Otros robots espaciales
Un ejemplo de este sistema es el módulo lunar EL3 de la Agencia Espacial Europea que cuenta con un robot que recolecta muestras para regresar a La Tierra. Cuando acabe esta tarea, el robot realizará labores de exploración de la superficie bajo la supervisión de los equipos terrestres de La Tierra, ya que puede llegar a cubrir distancias de hasta 300 kilómetros.
«Estamos muy orgullosos de cooperar con la ESA en el desarrollo de capacidades espaciales innovadoras», dice el profesor Mart Noorma, director de Ciencia y Desarrollo de Milrem Robotics. «Junto con nuestro socio de investigación, el Observatorio Tartu de la Universidad de Tartu, en Estonia, podemos proporcionar las mejores soluciones de navegación inteligente para misiones lunares y planetarias», finaliza.
El proyecto actual impulsará el desarrollo de los robots lunares en Estonia y ampliará los conocimientos y las instalaciones necesarias para iniciar los desarrollos hacia misiones futuras. El proyecto es el primer paso para que las tecnologías de autonomía de Estonia puedan llegar más allá de la superficie de la Tierra y permitir que los seres humanos se extiendan más dentro de nuestro sistema solar.