Estos son los extras que hacen más caro un coche y no siempre necesitas
Los coches han evolucionado con el paso de los años, añadiendo cada vez más tecnologías y extras. Sin embargo, algunos de esos equipamientos no sirven de mucho, solo para que suba el precio más todavía. La realidad hoy en día es que comprar un vehículo es más caro que antes. Por eso, hay soluciones que pueden ser prescindibles y por las que puedes conseguir que salga más barato, aunque en otros casos, son de gran ayuda.
Con el paso del tiempo, el diseño de los coches se ha mejorado, pero también se han ido incluyendo nuevos extras en los vehículos, además de la evolución que se ha dado en los sistemas electrónicos. Cualquier coche moderno necesita unos mínimos para cumplir con lo que un usuario actual busca al comprar un nuevo modelo, en cambio, hay otra serie de prestaciones que pueden encarecer el vehículo y no siempre van a hacer falta.
Equipamiento más prescindible
En la evolución tecnológica de los coches ha influido diferentes puntos, entre ellos, los gustos y las necesidades de los usuarios. En su día, por ejemplo, el sistema ABS se instaló por motivos de seguridad, y luego se extendió entre las marcas. Pero hay otra serie de equipamiento que suponen un gasto adicional y pueden ser completamente prescindibles:
- Techo solar: puede que quede muy bien en un vehículo, pero este extra sale caro. Además, al igual que todo elemento de los coches, también se rompe y la reparación puede que no sea tan barata. Por otro lado, también afectará en si ofrece un buen aislamiento. Y también influye en cierta medida en el consumo, ya que aumenta el peso del coche.
- Asistente de cambio de carril: este es otro de esos equipamientos que pueden ser más prescindibles a la hora de estrenar coche. Aunque para algunos sea un elemento de apoyo y seguridad para el conductor, este sistema puede que no te llegue a convencer de primeras, especialmente cuando pite al tocar una línea de la carretera o, incluso, cuando gire el volante solo.
- Head-up Display: la proyección en el parabrisas no merece tanto la pena, y más con los cuadros de mandos digitales que tienen la mayoría de vehículos hoy en día. Y más cuando te pone la velocidad a la que vas o las órdenes del navegador. Sobre todo, cuando los vehículos tienen ya pantallas.
- Volante calefactado: si vives en un país muy frío, está claro que te merecerá la pena pagar de más, pero si no es así, es un gasto innecesario. Y todo para que no esté frío al conducir.
Y esto son algunos ejemplos, ya que también hay otras alternativas como los asientos calefactables, volantes de madera, packs para fumadores, indicadores de fuerzas G… Por lo que es muy importante que, antes de comprar un coche, se revisen bien si esos extras son necesario o no. Así te podrás evitar pagar de más.
Los extras que no pueden faltar
Por otro lado, hay extras que son imprescindibles para un coche a día de hoy. Por ejemplo, ahora mismo no puede faltar compatibilidad con Apple CarPlay o Android Auto, o que incluso cuente con el sistema ya integrado (Android Automotive OS).
En este caso, este tipo de equipamiento resulta útil y también puede mejorar no solo la estética del coche, también el confort y la seguridad de los pasajeros y el conductor. Por esto mismo, estos son los extras que sí merecen la pena:
- Cámaras y sensores de aparcamiento: ya no solo las cámaras, también los sensores de aparcamiento son de gran ayuda a la hora de estacionar el vehículo. Especialmente para espacios más complicados o aquellos conductores que tengan más dificultad al aparcar.
- Luces LED: por encima de las luces xenón, puesto que iluminan y son de bajo consumo.
- Conexión con cargado inalámbrico para el móvil. Poner a cargar el móvil y que se conecte al Bluetooth es una ventaja que sí merece la pena. De esta forma te puedes olvidar del cable.
- Control de velocidad de crucero: ideal para cuando se realizan largos viajes por carretera. Básicamente, permite poner una velocidad fija constante.
- Alerta de ángulo muerto: no siempre es fácil saber si hay un coche a tu lado al mirar por los retrovisores, sobre todo en autopistas o autovías en las que te puede pillar el ángulo muerto. Por eso, este asistente se vuelve de gran ayuda en esos momentos.
- Conducir sin llaves. De esta manera te puedes olvidar de la llave tradicional, ya no solo al arrancar el coche, también para abrir y cerrar el vehículo.