Google confirmaba oficialmente la venta de Motorola a Lenovo. Este movimiento puede acarrear cambios importantes en los planes de futuro de ambas compañías. Una de las posibilidades que se ha abierto, es que Lenovo acabe siendo el fabricante del próximo modelo Nexus de Google.
La pasada noche se conocía oficialmente la compra de Motorola por parte de Lenovo. Una adquisición que podría tener importantes consecuencias en los próximos meses. Google ratifica la intención de dejar de fabricar los dispositivos Nexus, centrando sus esfuerzos en desarrollar los terminales Google Play Edition.
En principio, estos planes del gigante americano parecían orientados a un simple cambio de nombre de la gama con el objetivo de reforzar su imagen. Sin embargo, parece que finalmente la estrategia tiende más a convertirse en un proveedor de Android adaptado para diferentes terminales.
De esta manera, tal y como nos cuentan los compañeros de AndroidAyuda, Lenovo pasará a ser el fabricante del próximo Nexus, aunque no especifica qué dispositivo sería el elegido. El anuncio realizado por Eldar Murtazin, conocido informador ruso en Twitter, no sorprende demasiado, ya que anteriormente se había barajado la posibilidad de que Motorola fuese el fabricante elegido en próximas versiones de Nexus, tanto en tabletas (actualmente fabricadas por ASUS) como en el sector de los smartphones (actualmente fabricados por LG).
Finalmente parece que esta idea se había dejado atrás y la línea en 2014 sería continuista. En las últimas semanas se había hablado mucho sobre la posibilidad de que Google lanzara una tableta Nexus 8 con procesador Intel y fabricada por ASUS, otra de las marcas salpicadas por la venta. Además, habrá que ver cómo afecta esto a la relación Google-LG que tantos éxitos ha cosechado con Nexus 4 y Nexus 5.
La situación ha dado un giro de 180 grados y Lenovo y Motorola se repartirían los nombres de los próximos modelos. Veremos cómo maneja esta situación el ahora tercer fabricante de smartphones a nivel mundial y esperamos próximas noticias. Este movimiento puede afectar considerablemente al mercado actual de telefonía móvil y la compañía china tiene ahora mucho más que decir.