El pesimismo parece reinar en Sony ante el progresivo fracaso que ha supuesto PS Vita. Las ventas de su segunda portátil han decepcionado a la compañía japonesa, tal y como ha reconocido recientemente. Sin embargo, su estrategia para que se mejoren parece insuficiente y únicamente se ciñen a PS4 y PS Now como tabla de salvación.
«Honestamente esperábamos mejores ventas. El mercado en el que Vita se estrenó era más complicado que el que se daba cuando la consola fue pensada y diseñada». Con estas palabras reconocía recientemente Fergal Gara, director de la división de entretenimiento de Sony en Reino Unido, el fracaso en ventas de la sustituta de PSP en el mercado de las consolas portátiles.
En su discurso reconocía que «los juegos en tablets y teléfonos móviles han cambiado el mercado y los usuarios no quieren llevar consigo más de un dispositivo». Sus palabras estuvieron en la línea de las declaraciones de Suhei Yoshida, máximo responsable de Sony Worldwide Studios, meses atrás, cuando admitió que la tendencia entre los jugadores ha variado y que es evidente «el daño que han causado los móviles a las consolas portátiles«.
Una vez admitido el problema toca ponerse manos a la obra para solucionarlo. No obstante, la estrategia perfilada por el gigante asiático para relanzar en el mercado su portátil no está del todo clara. Cierto es que durante la pasada Navidad experimentó un crecimiento en sus ventas hasta alcanzar los actuales 7,3 millones de unidades vendidas, pero su catálogo de juegos sigue siendo una asignatura tan crucial como pendiente.
El número de títulos exclusivos, de los denominados «vendeconsolas» no parecen suficientes para despertar interés de los jugadores. A diferencia de Nintendo 3DS, cuyas ventas siguen disparadas (ya ha vendido más de 43 millones de unidades), el público de Vita no está definido ya que no es 100% hardcore ni casual. Con este problema se ha encontrado desde el inicio de su periplo en el mercado y en 2014 podría tener continuidad.
Por el momento, Sony parece volcada en hacer de la portátil un complemento para su PlayStation 4, impulsando las ventajas que tendrían en Vita servicios como PS Plus y el futuro PS Now. El acceso a estas plataformas permitirá a los usuarios poder jugar en su consola a los juegos desarrollados para el resto de dispositivos de Sony, lo que es un punto a su favor. En cambio, está por ver hasta qué punto esto es atractivo para que los usuarios se dispongan a desembolsar los actuales 170 euros por los que está disponible la portátil en su versión más económica.
¿Qué pasos creéis que debería seguir la compañía para que su consola aumente su presencia en el mercado?