El precio de los SSD debería desplomarse, pero la alta demanda de chips NAND lo impedirá
El precio de algunos componentes de PC está subiendo como la espuma, mientras que otros están bajando. Entre los que suben encontramos la memoria RAM, y próximamente también va a volver a ocurrir con las tarjetas gráficas. Sin embargo, los SSD han ido bajando, lo cual empezará a frenarse dentro de poco debido a su alta demanda.
Los SSD van a bajar de precio, pero no tanto como se esperaba
Y es que los chips NAND que utilizan nuestros dispositivos para almacenamiento han bajado de precio gracias a que la mayoría de fabricantes de la industria se han puesto al día con el uso de 3D NAND de 64 y 72 capas. Estas memorias son más baratas de fabricar, y permiten aumentar la densidad por chip, reduciendo todavía más los costes.
Esta puesta al día de todos los fabricantes ha provocado que haya sobreoferta de estos chips en el mercado, lo cual ha generado que su precio haya caído. A pesar de que el precio debería seguir bajando, e incluso llegar a desplomarse, esto no va a ocurrir.
El precio de la memoria NAND lleva cayendo desde finales de 2017 (ha bajado un 50% desde noviembre hasta abril), pero la bajada se ha frenado en torno a un 10% en el según trimestre del año según afirma Digitimes. Conforme los fabricantes vayan aumentando la demanda en los próximos meses, los efectos de la sobreoferta van a empezar a diluirse.
En la segunda mitad del año aumentará la demanda
Así, en el tercer trimestre del año los precios de la memoria NAND van a seguir bajando, pero a un ritmo mucho más lento. De hecho, las fuentes consultadas afirman que el precio podría dejar de bajar en su totalidad, y estabilizarse en los que tenemos actualmente.
Esta bajada de precio ha generado que los SSD sigan ganando cuota de mercado y se estén utilizando cada vez en más ordenadores. De hecho, cada vez más portátiles los incluyen de serie, y se espera que este año se empiece a hacer la transición de SSD SATA a PCIe NVME, los cuales son más pequeños, más ligeros, más baratos de fabricar, más sencillos de instalar, y sobre todo, más rápidos ya que no están limitados a 6 Gbps como ocurre con la interfaz SATA.
Sin embargo, al final parece que el mercado va a tender a equilibrarse, y a partir de la Computex, cuando los fabricantes empiecen a demandar más chips para crear los dispositivos que presenten, la oferta volverá a reducirse, apoyada por el creciente aumento de móviles vendidos en todo el mundo que también hacen uso de estos chips. En el largo plazo, sin embargo, lo que se espera es que el precio siga bajando ligeramente, mientras que el la DRAM seguirá subiendo.