Sólo unos meses han tenido que pasar para que Yoigo cambie su pronóstico de «al borde de ser comprada por Vodafone» a una situación favorable en que, si la Comisión Europea da luz verde, Yoigo podrá plantar cara a las tres potencias de las telecomunicaciones en España: Movistar, Vodafone y Orange. La compra de Jazztel por parte de Orange será la guinda en el pastel para la de Telia Sonera, que sacaría fruto de esta operación adquiriendo activos para el lanzamiento de una convergente propia con fibra óptica.
Bruselas ha truncado ya, al menos en una ocasión, el estudio sobre la compra de Jazztel por parte de Orange. Y es que, aunque favorable para la de France Telecom, la operación podría dañar la competencia en el sector de las telecomunicaciones en España con graves perjuicios para los consumidores, algo que la Comisión Europea evitará «caiga quien caiga», habiendo sido la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia el primer desbancado de la operación. Ahora bien, el cuarto operador español, que parecía a la sombra de los gigantes y a la espera de ser comprada, ha sabido ver en este contratiempo su oportunidad de relanzarse.
Yoigo sabe bien lo que hace
A principios de año, en contra de las indicaciones de la directiva de Vodafone y Movistar, que ya alertaban del aumento de precio de sus tarifas, Yoigo lanzaba la mejor tarifa de los últimos meses. Nada más y nada menos que 20 GB con llamadas ilimitadas por 29 euros al mes y con descuento en contrataciones online, una oferta tentadora que, con su cobertura y la posibilidad de conectar con la red de Movistar, se plantea como la solución más inteligente en la relación calidad – precio para los «grandes consumidores» móviles.
Con esta tarifa, el operador de Telia Sonera demostraba que los precios, efectivamente, se pueden mantener bajos, tal y como Europa forzará que ocurra con Orange en la compra de Jazztel. Y aceptando el riesgo de reducir sus márgenes, Yoigo vuelve a situarse en una posición atractiva, sin la cual no habría perdido 24.000 clientes en el último ejercicio. No obstante, no sólo de móvil vive el hombre, y es otra de las claves que Movistar ha demostrado en los últimos años con su tarifa convergente Fusión, que reúne móvil, fijo e Internet en una sola factura.
Las convergentes son el futuro, y Yoigo planea su presencia
Desbancar a los competidores con una única tarifa móvil convincente no es posible. Y es que, si contratamos esta tarifa y buscamos un paquete «fijo + Internet» de otro operador acabaremos pagando lo mismo, o más que con las convergentes, y seremos clientes de dos compañías. Por eso, y por el acceso a contenidos de pago en Televisión, Fusión de Movistar sigue consiguiendo fieles que, por otra parte, se beneficiarán pronto de un acceso a Internet tres veces más rápido. No cabe duda alguna de que las ofertas convergentes son el futuro de las telecomunicaciones en España.
Habiendo cerrado un capítulo en que la única solución viable para Yoigo (parecía) era dejarse comprar por un gigante, el operador de «verdad verdadera» plantará cara aprovechando la debilidad de Orange. Si quieren comprar Jazztel, los de France Telecom necesitan ceder a los intereses de Yoigo. Y no son otros sino determinados activos de fijo y móvil, es decir, la ventana de Yoigo hacia el lanzamiento de una oferta convergente propia.
La fibra de Yoigo sin las trabas de Movistar
«Fusión a lo Yoigo», o cómo calmar a un competidor con un placebo. Y es que, aunque Movistar y Yoigo han acercado sus posiciones tanto en fijo como en móvil, hay quien apunta a que este acercamiento no ha sido sino una forma de controlar el avance del operador de Telia Sonera. Ahora bien, Yoigo ya ha podido comprobar que la cesión de tarifas de Movistar no ha sido sino un placebo para rellenar el catálogo de Yoigo con productos que, hasta ahora, ellos mismos no han podido ofrecer.
Ni beneficios, ni clientes, ni competencia. Fusión a lo Yoigo, en realidad, nunca ha sido a lo Yoigo. Pero la compra de activos fijos y móviles de Orange por parte de Yoigo abre dos nuevos horizontes en el sector de las telecomunicaciones en España. Para Orange, supone una marca positiva que sumar a su lista de deberes impuestos por la Comisión Europea para zanjar la operación con Jazztel. Para Yoigo, sin embargo, es la vía ideal para abrirse a las convergentes y plantar cara, ahora sí, a sus competidores.