Pese a ser el claro líder en cuota de mercado, Google sigue encontrando problemas a la hora de atraer a los desarrolladores a Android, ya que los bajos guarismos de piratería y los mayores ingresos que ofrece la plataforma de Apple, acaban por decantar la balanza a su favor.
Las últimas cifras confirman como muchos de los desarrolladores acaban por decantarse por iOS en lugar de Android, ¿cuáles son los motivos reales que les llevan a tomar esta decisión?, ¿tiene Google alguna manera de revertir la situación?, ¿cómo de grave puede llegar a ser el problema si esta tendencia se mantiene?
Los resultados del último trimestre relacionados con los ingresos de iTune dejan en evidencia la respuesta a una o varias de las cuestiones que planteábamos anteriormente. iTunes Store, (incluyendo App Store, Mac App Store y iBooks Store, eso sí) generó durante los últimos tres meses un total de 2.400 millones de dólares en ventas de aplicaciones, una cifra que certifica la tendencia creciente y que supone el equivalente a la mitad de todo el negocio central de Google.
Estas cifras a menudo dan pie a reflexiones que intentan arrojar un poco de luz a la diferencia existente en ganancias de ventas directas de aplicaciones entre Google y Apple, Android e iOS. Diferentes perfiles de usuario, diferentes hábitos, aplicaciones más seguras… un poco de todo sería la opción más acertada.
Pero lo que es cierto, es que estas cifras reflejan como los responsables de las aplicaciones de iOS obtienen mayores beneficios económicos. Un factor decisivo que hace que muchos desarrolladores rechacen crear nuevas herramientas para Android y se centren en el sistema operativo de Apple.
Otra de las razones que empuja a estas personas a elegir este camino es la piratería y la fragmentación existentes en Android. Son dos puntos negativos e incómodos para aquel que desarrolla una aplicación pensada para llegar al mayor número de usuarios posibles. Las copias fraudulentas alejan el interés de los usuarios y por consiguiente el de los creadores. Todo ello, teniendo en cuenta que Android cuenta con la gran ventaja de ser el número uno en cuota de mercado, muy por encima de todos sus rivales.
¿La situación puede ocasionar problemas serios a los de Mountain View? De momento parece que no, no es algo que les preocupe demasiado pero si no hay un cambio, puede que este copo de nieve comience a rodar. Además, parece que Google está decidida a luchar contra algunos de los factores negativos comentados antes, con medidas que reduzcan la fragmentación y mejoren la seguridad, aumentando la confianza de los usuarios en las aplicaciones, fundamental para que los desarrolladores cambien de parecer.