Enciendes tu ordenador y… ¡otra vez Teams! Si no sabes ni qué es ni por qué te aparece de repente, te contamos cómo evitar que tengas que lidiar con ello cada día. Las actualizaciones de Windows pueden modificar ciertas configuraciones, siendo esta aplicación una de las que más rabia te dé.
Las ralentizaciones de nuestro ordenador son uno de los problemas más frecuentes a los que solemos enfrentarnos. En la mayoría de los casos, no se trata de que nuestro ordenador sea mejor o peor. Sino que tiene que ver con la cantidad de aplicaciones que tenemos en segundo plano. Especialmente si reiniciamos nuestro equipo y, acto seguido, debemos ir cerrando todos los programas que se van abriendo en cuando encendemos el PC. Y uno de los problemas que están afectando a una mayor cantidad de personas durante los últimos mensajes tiene que ver con la aplicación de Microsoft Teams.
Si has instalado recientemente Microsoft 365 en tu ordenador, todas las aplicaciones de Office, incluido Teams, se instalan de forma predeterminada. Este programa está configurado para iniciarse automáticamente cada vez que inicias sesión en tu ordenador, ya que está pensado para equipos de trabajo que necesitan una comunicación constante.
Desactiva el inicio automático
Aunque hay muchas formas de evitar que Teams se arranque nada más iniciar el ordenador, esta es la más sencilla y directa. Se trata de desactivar el inicio automático de la aplicación una vez encendemos el ordenador. Esta es una de las mejores opciones que podemos tener en cuenta si estamos convencidos de que no vamos a usar nuestro Teams próximamente. De este modo, evitaremos el consumo innecesario de recursos. Es el método habitual si queremos evitar que cualquier aplicación se arranque al encender el PC. Lo puedes realizar de dos formas:
Desde el menú Configuración de Windows
- Ve a Configuración de Windows. Puedes buscarlo manualmente desde la barra buscador o desde el Inicio.
- Selecciona en Aplicaciones de inicio y busca Teams para desactivarlo.
Puedes aprovechar para ver qué aplicaciones se están iniciando de forma silenciosa. Esto puede ralentizar el ordenador sin motivo aparente, aunque ahora entenderás el porqué tarda tanto. Haciendo este pequeño truco, tu ordenador tendrá una cosa menos por la que preocuparse de forma automática. Serás tú mismo quien decida cuándo activar la aplicación.
Desde el Administrador de tareas
Si Microsoft Teams es una de las aplicaciones que se inician nada más arrancar el ordenador y te resulta un quebradero de cabeza, puedes solucionarlo de una manera muy sencilla mediante el uso del Administrador de tareas.
Para ello, deberás abrir primero el Administrador de tareas desde el menú de inicio, escribiendo en el espacio de búsqueda «Administrador de tareas» y seleccionar la aplicación, o también puedes abrirlo pulsando botón derecho en cualquier lugar de la barra de tareas y acceder a dicha opción con tan solo un clic.
Una vez allí, deberás posicionarte en la pestaña Inicio, marcar la aplicación Microsoft Teams y pulsar en el botón Deshabilitar. De esta forma, conseguirás que Microsoft Teams no se ejecute cada vez que enciendes el ordenador y no supondrá ningún impedimento. No obstante, no hay ningún riesgo de usar esta función, ya que el programa únicamente quedará desactivado al iniciar Windows, de tal manera que podrás abrir Teams en cualquier momento con un tan solo un doble clic en su icono.
Cambia su configuración
Si antes usabas Teams, pero tu nueva empresa no, puedes cambiar su configuración desde dentro. Para ello, tendrás que introducir tu usuario y clave, y seguir estos pasos:
- Pulsa en el menú de tres puntos que está junto a tu foto de perfil.
- Haz clic en Configuración.
- Desactiva la pestaña de la opción Equipos de inicio automático.
Así podrás evitar que se inicie al encender el pc. Sin embargo, el lado negativo es que cuando quieras entrar en él, vas a tener que iniciar sesión. No se habrán guardado tus credenciales y tendrás que hacerlo manualmente. Así que antes de todo esto, revisa si te saber tus datos de usuario.
Elimina el programa
Otra opción pasa por eliminar el programa. En este caso, tenemos que tener en cuenta que no vamos a necesitar el programa durante las próximas semanas. Por lo que es importante que, antes de tomar la decisión, la reflexionemos bien para evitar posibles problemas en el futuro. Si en realidad crees que no necesitas tener Teams en tu ordenador, puedes aprovechar para eliminarlo. Desinstalar el programa no afectará en otras funciones de Windows, y menos aún si nunca te has registrado en esta aplicación para comunicarte con tu equipo de trabajo. Lógicamente, se recomienda hacerlo en ordenadores personales donde no tengamos el mínimo interés en contactar mediante teletrabajo.
Para hacerlo tendrás que ir a la Configuración de Windows, buscarás «Añadir o quitar programas» y elegirás Teams. Te preguntará si estás seguro de la decisión, ya que la eliminación del programa también eliminará cualquier dato que contenga. Si nunca lo has usado, esto no debería importarte. ¡Elimina!
Recuerda que desinstalar Teams no quiere decir que no vayamos a poder conectarnos a ninguna reunión de trabajo, todo lo contrario. Por suerte, Microsoft nos ofrece la opción de poder unirnos a cualquier reunión utilizando nuestro explorador web. Por lo que podemos llevar a cabo la instalación con tranquilidad y comenzar a unirnos a través de la web. Que, en muchos casos, incluso es posible que sea más estable que la aplicación en sí, especialmente si no la tenemos actualizada a su última versión.
Cierra Teams con Finalizar tarea
Si acabas de arrancar el ordenador y ya te aparece Teams intentando cargar, el Administrador de tareas es una solución rápida para cortar de raíz con su inicio. Por más que lo intentes cerrar manualmente, el programa suele quedarse bloqueado y no consigue cerrarse.
Así que busca en el menú Inicio el Administrador de tareas. Te aparecerá un acceso directo con todas las aplicaciones que se están ejecutando en ese mismo momento. Tan solo tendrás que seleccionar Teams y elegir Finalizar tarea para que pare inmediatamente. Luego puedes seguir los pasos anteriores para evitar que se inicie al encender o desinstalarlo.
Esta solución es la más radical y la «menos» recomendable, ya que estaremos forzando al ordenador a hacer algo que no estaba en sus planes. Si tiene automatizado abrir un programa y le obligamos a cerrarlo, podría ralentizarse aún más y dejar de responder en algún momento.
Vuelve a una versión anterior de Windows
Si te has encontrado ante esta situación y necesitas ponerle freno, pero nada de lo que te hemos explicado te funciona o te convence, todavía hay opciones. Algo que podrías hacer sería volver a una versión previa del sistema operativo de Microsoft.
Sobre todo, si el problema lo estás teniendo desde que se ha llevado a cabo alguna actualización de Windows, no será una mala idea que intentes volver a ella. Será recomendable tener claro, a grandes rasgos, desde cuándo comenzaste a tener el problema. Dicho esto, solo tienes que entrar en Inicio y buscar Windows Update. Esto te llevará al menú que gestiona las actualizaciones del sistema operativo de Microsoft. A continuación, baja hasta la opción “Historial de actualizaciones”.
Cuando hagas clic se desplegará una lista con las últimas actualizaciones instaladas y solo tendrás que elegir la recuperación de aquella que encaje con la fecha en la que no estabas sufriendo ningún problema. No es una solución definitiva, pero posiblemente te ayudará para salir del paso.