Digi podría aprovecharse de las condiciones de Europa para la fusión MásMóvil-Orange

Hay un refrán que dice «A río revuelto, ganancia de pescadores». Considerando que Bruselas ha impuesto una serie de condiciones a MásMóvil y Orange para que se dé validez a su fusión, otros operadores como Digi podrían sacar tajada de esta situación.

Digi puede beneficiarse de la fusión

Tal y como explica Marcos Sierra en Vozpópuli, Bruselas no va a aceptar sin condiciones la propuesta de fusión liderada por Orange y MásMóvil y, entre las condiciones para que sea validada, podría imponer la venta de la red replicada de ambos operadores. La Comisión Europea tiene hasta el próximo 4 de septiembre para decidir si tumba la operación o la permite con condiciones (remedies). En este segundo caso, son varios los operadores que podrían aprovecharse de las condiciones impuestas por Europa.

Entre las posibilidades de condiciones que se están barajando, ante el temor de que la posición dominante del nuevo grupo por número de clientes se traduzca en un incremento de precios, figura por ejemplo la venta de la red replicada de ambas corporaciones a su competencia. Eso sí, esta solución sería como la pescadilla que se muerde la cola, pues la venta de estos activos crearía un nuevo gigante de las telecomunicaciones en España para quien los comprase.

«Si Bruselas apuesta por la venta de la red de los fusionados, quien compre esos activos se convertirá con toda seguridad en otra gran compañía de telecomunicaciones y se habrá creado otro problema», ha declarado uno de los operadores al medio.

Guste o no, el caso es que Digi es quien tiene más papeletas de hacerse con los remedies (seguidos de Avatel o Finetwork). Estos operadores dependen principalmente de redes de terceros que alquilan a quienes tienen infraestructura propia, pero conseguir las infraestructuras sobrantes de MásMóvil y Orange haría que fueran grandes operadores con red propia y una capacidad mayor de bajar los precios y aumentar la competitividad. Como decíamos, Digi es la mejor posicionada para conseguir esa parte del pastel, ya que hoy en día ya es el quinto operador por volumen de clientes, justo por detrás de Movistar, Orange, Vodafone y MásMóvil.

Vodafone sería el principal damnificado de este nuevo statu quo. No solamente el grupo que nazca de la fusión haría que MásMóvil les adelantase, sino que su posición de tercer operador entonces quedaría en entredicho ante el empuje de quien se pueda hacer con los restos de la red replicada. La entrada de un nuevo competidor reducirá aún más el valor de Vodafone.

La fusión no está asegurada

La Comisión Europea ha enviado un comunicado a las operadoras implicadas en la fusión en el que ya advierte de un problema de competencia. La fusión prevista entre Orange y MásMóvil, por un valor de 18.600 millones de euros, se prevé que suponga un claro riesgo de que haya «grandes subidas de precio», debido a que se recortaría de cuatro a tres el número de grandes operadores en España: Telefónica, Vodafone, y MásMóvil&Orange.

El operador naranja y el amarillo se han mostrado confiados en que salga adelante, tal y como expresan en un comunicado conjunto:

“La publicación de la ‘Declaración de Objeciones’ es un paso previsto como parte del procedimiento estándar en el que no se prejuzga el resultado de la investigación y da a las partes la oportunidad de responder formalmente a las preocupaciones de la Comisión.

Valoramos positivamente que la Comisión Europea haya retirado las consideraciones sobre el mercado mayorista.

Seguimos confiando en el resultado del proceso y vamos a seguir trabajando para transmitir a la Comisión Europea los beneficios de la operación para los consumidores y empresas, tanto en términos de aumento de opciones para los clientes en servicios innovadores, como en el incremento y aceleración de las inversiones en 5G y fibra en España en un contexto de reducción de inversiones en los últimos años y el resultante retraso en el despliegue de 5G respecto a la agenda digital de la Unión Europea”.