Con la Navidad acercándose, muchas personas empiezan a hacer la lista de regalos y los más pequeños de la casa siempre la cargan de juguetes de todo tipo. Pero la preocupación por la privacidad y la protección de información personal ha llegado hasta el sector juguetero y los analistas aseguran que los juguetes inteligentes son la próxima herramienta con la que se podrá vigilar a la población de manera más estrecha. Conviene pensarse dos veces que regalo se pondrá debajo del árbol este año.
Están todavía muy recientes los escándalos de espionaje destapados en primera instancia por Edward Snowden, ex-agente de la CIA que ya avisó de estas prácticas llevadas a cabo por el gobierno americano. En aquella ocasión, Internet y los teléfonos móviles servían de herramientas principales a través de las cuales. El principal riesgo de la nueva hornada de juguetes inteligentes capaces de conectarse a Internet por sí mismos, es la posibilidad que tiene de ser hackeados de forma remota, algo que llegado el caso puede ser utilizado para espiar a los niños. con esto podrían grabarse conversaciones o en algunos casos vigilar cualquier actividad mediante cámaras y sensores visuales usados para interactuar con el usuario.
Existen algunos modelos anunciados este año como las muñecas Hello Barbie o My Friend Carla, que ya han sido puestos en entredicho y casos como el del Hacking Team, en el que se destaparon las actuaciones de gobiernos de todo el mundo para comprar software con el que espiar a organizaciones y mandatarios políticos de todo el mundo, no son nada tranquilizadores al respecto.
Mattel y la nube como solución de seguridad para sus juguetes
El auge del Internet de las Cosas permitirá, gracias al auge de tecnologías como el 5G o la conexión Wi-Fi desde cualquier parte, acceder a estos juguetes inteligentes desde Internet, pudiéndose obtener información acerca de datos personales, la ubicación del juguete, o a través de la cámara acceder a cosas más mundanas como ver donde guardamos objetos de valor en casa o los hábitos de vida que realizamos.
Gobiernos como Reino Unido ya han dado los primeros pasos para dotar de fuerza legal en circunstancias de “necesidad”, para espiar a los ciudadanos siempre que pueda ser utilizado en investigaciones para evitar, por ejemplo, actos de terrorismo. Con esto se abre una puerta peligrosa en Internet que ahora puede tener como gran aliado a los juguetes con los que juegan día a día los niños. Ante este peligro, fabricantes como Mattel ya han optado por la tecnología en la nube como mecanismo de control para monitorizar la información a la que pueden acceder los juguetes y evitar filtraciones no deseadas.
¿Creéis que la falta de privacidad puede frenar el desarrollo de juguetes inteligentes?