He tenido una idea, y quiero compartirla con vosotros. Los que tengáis hijos, probablemente estaréis ayudando a vuestros hijos a hacer la carta a los Reyes Magos, y los que seáis hijos –espero que todos-, estaréis en una situación parecida. Yo la estoy escribiendo, y podréis imaginar que gran parte de ella son aparatos y chismes tecnológicos, pero mi debilidad son los teléfonos inteligentes. Y me he preguntado, ¿qué le pediríamos a nuestro próximo móvil?
No estoy hablando de móviles en el mercado, sino más bien eso que aún no está, y nos gustaría. Y para animaros a que dejéis en los comentarios -al final del artículo-, voy a repasar qué es exactamente lo que yo, personalmente, le pediría a mi próximo móvil. Y vamos a partir de la base de que durante este año los que más he utilizado han sido un Samsung Galaxy S6 edge+ y un iPhone 6.
Batería, más horas de autonomía
Por mis manos ha pasado, y se ha mantenido durante meses, un Samsung Galaxy Note 3 que más tarde dejaría su hueco al Samsung Galaxy Note 4. Dos terminales con una autonomía excelente y prestaciones, en su momento, realmente punteras. Ahora bien, conforme he ido cambiando de terminal, y quiero incluir los más recientes que mencionaba justo antes, he podido ver cómo era imposible llegar al final del día. Vale, soy un ‘usuario exigente’, pero lo cierto es que cada vez me dura menos la batería del móvil, y es una de las cosas que pido: más autonomía.
Resistencia, un móvil que siga mi ritmo de vida
No soy un aventurero, ni deportista más allá de las mancuernas del gimnasio, pero los móviles son frágiles. Aquí, quizá, la carta se debería hacer llegar a Corning, que es la que fabrica el protector de pantalla más extendido en el mercado, su recubrimiento Gorilla Glass. Aunque cada vez son más resistentes, las pantallas se siguen rompiendo con suma facilidad, y mantener un móvil sin arañazos después de un año es casi imposible. Y sí, miro con cariño a los Xperia Z de Sony por la resistencia al agua, y es algo que echo en falta como una característica generalizada.
Ligereza, la de los ‘micro-móviles’ de comienzos de siglo
En multitud de ocasiones hemos visto ‘esa imagen’ que muestra la evolución del teléfono de un enorme tamaño a diminuto, y en la actualidad de nuevo smartphones gigantes. Sí, los tabletófonos nos están convenciendo a todos poco a poco, pero queremos móviles más ligeros. El tamaño no importa, o sí, pero lo que es evidente es que no queremos que estén diseñados para culturistas, sino para mantenerlo en la mano durante muchas horas sin que eso conlleve cansancio en la mano. Cuanto más ligero, mejor.
¿Qué le pedirías a tu próximo móvil?
Podría pedir mucho más a mi próximo móvil, y en realidad espero grandes evoluciones del próximo año 2016, como la evolución de los smartphone que desarrollé recientemente. Ahora bien, hablo de cambios posibles y relativamente sencillos, no de saltos tecnológicos de ciencia-ficción. Es un interesante debate, y será genial conocer vuestra opinión, que podéis dejar abajo, en la sección de comentarios.