El momento en el que nos instalan la fibra óptica por primera vez en casa es bastante importante. En ese instante, el instalador nos preguntará donde queremos que ubique el router, y debemos pensarlo muy bien antes de dar una respuesta. El router quedará instalado en una posición de nuestra casa, y ya será muy difícil cambiarlo de sitio. Por lo general, si pedimos ubicar la fibra en otra parte a un profesional, nos dará un presupuesto, pero no nos saldrá gratis. Pero, ¿es posible que cambiemos nosotros mismos el router de sitio en nuestro hogar? Vamos a darle respuesta a esta pregunta.
Hay muchas razones para querer cambiar el router de sitio es nuestro hogar. Como decimos, la instalación se produce en un momento y bajo unas circunstancias que pueden variar con el paso del tiempo. Puede que quieras cambiar la ubicación de los muebles, que te des cuenta de que la señal WiFi no llega a todos los rincones de casa, o que vayas a colocar la Smart TV en otra estancia y te interese conectarla por cable Ethernet.
Sea cual sea el motivo por el que te interesa modificar el lugar del router en tu vivienda, lo cierto es que es posible. Aunque hay que señalar que no podrás hacerlo en cualquier sitio, ya que muchas veces dependerás del ONT. Por lo general, será recomendable que recurras a la ayuda de un profesional. Puedes hacerlo por tu cuenta, pero el cable de la fibra es muy frágil y podrías arriesgarte a romper la señal.
Es posible cambiar el router… aunque no a todas partes
La instalación de fibra óptica de tu casa cuenta de dos dispositivos que, según tu operador, puede que estén unidos en el mismo. La ONT siempre está en una instalación de fibra, pero puede que esté dentro del router o fuera de ella, dependiendo de si nuestra fibra es directa o no. Será en la ONT donde vaya conectado el cable o latiguillo de la roseta óptica. Es muy importante señalar que según si tenemos uno o dos dispositivos podremos hacer más movimientos o menos movimientos. Pero vamos por pasos. Las siglas de ONT vienen de Optical Node Terminal o Terminal de nodo óptico. Se trata del dispositivo encargado de conectar la red de tu casa con la centralita de tu operadora.
En el caso de que tengamos los dos equipos por separado, vamos a tener bastantes más opciones para mover el router en nuestro hogar. Eso se debe a que el cable que va desde el ONT al router es un cable Ethernet completamente normal, y para instalarlo solamente tendremos que conectarlo a ambos dispositivos. Con ello podremos colocar nuestro router en la zona de la habitación que queramos, o incluso en otra habitación si compramos un cable Ethernet lo suficientemente largo y nos encargamos de conectarlo.
Por otro lado, si lo que tenemos en casa es un router con el ONT incorporado, entonces vamos a tener más problemas. En este caso lo único que podremos hacer es mover el dispositivo hasta donde nos permita el latiguillo de la fibra óptica, que no suele ser demasiado, ya que estos cables suelen ser muy cortos. Además, debemos tener en cuenta que manipular este cable está totalmente desaconsejado porque es muy frágil y al doblarlo, estirarlo o enrollarlo puede estropearse y eso solo conseguirá que nos quedemos sin Internet.
Si no sabes hacerlo, mejor llama a un técnico. Tienes la opción de comprar por tu cuenta un latiguillo de mayor longitud para instalarlo tú, pero es una operación que no te recomendamos. Como decimos, la opción más recomendada es avisar a nuestra operadora para que nos mande un técnico, aunque esto nos costará dinero, ya que no es una reparación, sino una modificación.
Modificar una instalación de red de fibra óptica puede llegar a ser posible, aunque el operador descarte esa opción. El problema es que es un proceso complejo y acaba siendo bastante caro para el usuario, puesto que se necesita una máquina especial para unir de nuevo la fibra, la fusionadora de fibra óptica, que permitirá cambiar la roseta de fibra óptica de sitio.
Otra posible opción es instalar un latiguillo desde la roseta de fibra óptica hacia una nueva ubicación. Este latiguillo es un cable óptico con dos conectores o cabezales que permiten realizar una extensión desde el punto inicial hasta el próximo. Sin embargo, como decimos, estas son técnicas que debería realizar un profesional y probablemente tengas otras alternativas a cambiar de posición el router.
Si tienes en casa contratada un servicio de ADSL, entonces lo vas a tener también muy fácil para cambiar el router de sitio. Lo único que deberás tener en el sitio donde lo vayas a instalar es una roseta telefónica para conectar el cable que va directamente hasta el router. Bastará con que te lleves el router a la nueva habitación y lo conectes a la roseta de teléfono con un cable RJ11 para cambiar de sitio el dispositivo.
Alternativas a cambiar el router de sitio
Si cambiar el router de sitio es imposible y no quieres pagar a un técnico para que haga el cambio, todavía tenemos alguna que otra alternativa disponible. Habrá que hacer algunas compras, eso sí, pero seguramente sea un gasto menor al de la visita del técnico: se trata de repetidores de WiFi o PLC. Y como tercera opción, lo cierto es que está la alternativa de comprar un nuevo router con el que la cobertura WiFi sea mejor que antes. Pero, vamos por partes.
Repetidores WiFi
Como os hemos explicado más arriba, puede haber varias razones por las cuales pretendas mover el router de tu casa de una ubicación a otra. Si la razón principal de mover el dispositivo es que no te llega la señal bien del WiFi al resto de tu domicilio, hay algunas alternativas que puedes utilizar para poder llevar la señal de manera correcta a estas estancias. Para ello, basta con que nos hagamos con algún repetidor de señal WiFi, que hay de varios tipos, modelos y características en el mercado.

La ventaja de los repetidores es que no necesitas ningún tipo de instalación ni configuración: basta enchufarlos y se encargan ellos mismos de recibir la señal y ampliarla hacia otras habitaciones. Obviamente tienes que instalarlos allí donde quieras que llegue la señal y debes asumir que perderás algo de latencia. La desventaja es que si se trata de una casa muy grande no son muy útiles.
Ten claro que para que la conexión inalámbrica sea buena, debes comprar un modelo que cumpla con creces tus expectativas. Es decir, que la velocidad que ofrezca sea realmente buena y, por otra parte, ya es hasta crucial que sea compatible con WiFi 6. De esta forma, no solo hará posible que la cobertura llegue más lejos, sino que la velocidad será superior.
PLC
También tenemos disponibles dispositivos como los PLC, que nos ayudarán a llevar la señal de Internet a través de la corriente eléctrica. PLC son las siglas de Power Line Communications o Comunicaciones a través de la línea eléctrica. Tienen la ventaja de que solo hay que conectar dos dispositivos (los PLC de marras) a los enchufes y estos envían los datos de nuestra conexión a Internet usando el mismo cable por el que circula la red eléctrica.
Estos dispositivos están recomendados sobre todo para edificios cuyas instalaciones eléctricas son más modernas, ya que de lo contrario pueden dar fallos. Si no, siempre puedes hacerte con una red de malla o mesh que te permitirá extender la señal de tu WiFi sin necesidad de depender de la instalación eléctrica.
Al igual que la opción anterior, tienen la ventaja de una instalación sencilla, pero para ser efectivos hay que conectarlos a un enchufe independiente (las regletas, por ejemplo, afectan la calidad de la señal) y si tenemos una instalación eléctrica algo antigua, la potencia se perderá. Por lo que hay que tener en cuenta más de un detalle a la hora de apostar por este tipo de dispositivos.
Adquirir un router XGS-PON
Hoy en día la velocidad de conexión a Internet está alcanzando unos niveles vertiginosos y ya los vemos reflejado en varias compañías de telefonía que operan en España. Es el caso de Orange y Digi, que ya ofrecen una red de conexión de 10 Gbps con la instalación de un router de nueva generación XGS-PON. Pero no solo el cliente se beneficia de esta inimaginable velocidad de red, si no también de otros aspectos como la conexión inalámbrica.
Y es que, antes de pensar en cambiar de sitio tu router, tienes la posibilidad de contratar este servicio para solucionar los problemas de cobertura, ya que ofrece la tecnología WiFi 6, que añade un amplio volumen de conexión a cualquier rincón del hogar. Pero, para disfrutar de ello, es necesario tener dispositivos que cuenten con la misma versión WiFi que el router. De esta manera, conseguirás mayor rango de cobertura y menor latencia a la hora de navegar por Internet. Incluso, ya hay modelos que ofrecen WiFi 7, por lo que se convierten en otra alternativa que tienes disponible.
La mejor ubicación para instalar el router
Si analizamos bien la ubicación para instalar nuestro router, y a posteriori no realizamos ningún cambio en nuestro hogar, es posible que no tengamos que enfrentarnos a la situación de tener que cambiar de sitio nuestro router. Pero, para ello, debemos realizar previamente un trabajo de análisis hasta encontrar el mejor lugar posible.
Es recomendable colocar el router en un lugar central de nuestra vivienda para que distribuya bien la señal por todas las habitaciones. Teniendo una gran importancia tanto el salón como los lugares desde los que trabajamos, como puede ser el despacho de la vivienda. Además, también es recomendable evitar que quede cerca de electrodomésticos que pueden provocar interferencias y disminuir la intensidad y estabilidad de la señal.
En el momento de la colocación, debemos asegurar que se encuentra en un área abierta y lejos de cualquier elemento que pueda obstaculizar el paso de la señal. Tienes que ser cuidadoso, puesto que hay muchos elementos que pueden llegar a afectar a la eficacia de tu router. Por ello, es fácil ver que la elección de la posición no es algo tan simple como ponerlo donde quede mejor estéticamente o en el primer lugar en el que pensemos.
Algunos de los elementos que afectan al router y a la velocidad que vas a conseguir del mismo en la conexión son los pequeños electrodomésticos. La lavadora, por ejemplo, es un elemento grande y que, por otro lado, genera el inconveniente del agua, que no se trata de algo beneficioso para la señal que transmite el dispositivo. Lo mismo ocurre con el microondas, siendo elementos que deberían estar lejos de la señal que emite el router. Por otra parte, el tipo de estructura de la pared también puede influir, siendo los más gruesos los que peor se llevan con la colocación del terminal.
Si hemos seguido todas estas recomendaciones, y pese a ello seguimos con problemas de señal, tendremos que recurrir a elementos como el PLC o los repetidores Wifi que hemos mencionado anteriormente y que pueden ofrecernos el mejor resultado posible en función de nuestras necesidades.