El mercado actual está plagado de Smart TV. Existen modelos con pantallas de todos los tamaños, diseños diferentes, tipos de paneles, sonido, etc. Muchas diferencias entre sus características y, por supuesto, también muchas diferencias en sus precios. ¿Pero qué diferencia realmente un Smart TV barato de uno caro? ¿Realmente las diferencias de precio tan abismales entre unos modelos y otros están justificadas? En las siguientes líneas daremos un repaso por las principales diferencias que hacen que existan precios tan dispares y también te recomendaremos algunos modelos baratos que pueden cumplir muy bien en el salón de tu casa.
Si estás pensando en comprar un Smart TV y tienes dudas sobre qué modelo elegir, sigue leyendo, ya que aquí encontrarás respuesta a muchas las preguntas que seguramente te estás haciendo después de haber estado echando un vistazo a las opciones disponibles.
Modelos entre 32 y 43 pulgadas
Si buscas modelos de menores dimensiones a precios más económicos, te comentamos los modelos de televisores baratas que puedes encontrar en el mercado desde 32 hasta 43 pulgadas, aunque alguna la puedes encontrar en otras dimensiones. Disfruta de ella en un salón más pequeño, tu habitación o donde quieras.
Xiaomi TV A2
Esta televisión de Xiaomi tiene 32 pulgadas y una resolución HD 1366 × 768 píxeles. Además, una de las características por las que destaca este modelo de la marca china es que viene con Android TV. Por lo que no tendrás inconvenientes para descargar todo tipo de apps, desde HBO a Disney+, entre otras muchas. Además, ya viene de serie con Netflix, Prime Video y YouTube.
Entre otros aspectos, hay que señalar que este televisor inteligente tiene compatibilidad con sonido DTS Audio, DTS-X y DTS Virtual:X. Por lo que ofrece un buen audio a un precio realmente bajo. Todo a través de sus dos altavoces con una potencia de 10 W cada uno. Además, cuenta con el asistente de Google integrado y es compatible con Miracast y Chromecast.
TCL Serie S54
TV con resolución Full HD y HDR de TCL con 40 pulgadas. Entre sus principales características puedes encontrar con que tiene Android TV como sistema operativo, además de que ya viene con Netflix o YouTube de serie.
Además hay que tener en cuenta que con el HDR consigue mejorar más que nunca los contrastes de las imágenes que aparezcan en pantalla. Incluso, consigue ofrecer unos colores más vivos con unos detalles todavía más nítidos. Y a esto hay que sumar la tecnología Micro Dimming con la que consigue analizar la imagen de la TV para ajustar el brillo y dar la mejor calidad de imagen en todo momento.
TOSHIBA 43UV2363DG
Subimos un poco más el nivel, y el precio. Este modelo de 43 pulgadas de Toshiba viene con calidad 4K UHD. Por lo que si estás suscrito a cualquier plataforma de streaming con un plan 4K, entonces podrás ver películas y series a mejor calidad.
Este televisor inteligente, por ejemplo, es compatible con Netflix, Disney+, Prime Video, DAZN o Movistar Plus+, entre otras muchas aplicaciones. Además, podrás hacer uso del asistente de Google y Alexa. Y entre otros detalles, hay que mencionar que ofrece una gran optimización de sonido gracias a la tecnología Dolby Audio.
Televisores baratos con 50 pulgadas
Ahora que ya sabes qué diferencias suele haber entre modelos caros y baratos de Smart TV, es el momento de ver algunas opciones. En las siguientes líneas te mostramos algunos de los mejores modelos de Smart TV que puedes comprar ahora mismo y que se convertirá en el centro de entretenimiento del salón de tu casa. Las puedes encontrar con 50 pulgadas:
Samsung TU50CU7175UXXC
50 pulgadas, calidad 4K y pantalla LED, esto es lo que te ofrece este modelo de Samsung con procesador Crystal 4K. De esta manera podrás disfrutar de una gran calidad de imagen, tanto en plataformas de streaming como en canales de televisión.
Además, la marca también se centra en ofrecer más pantalla y menos marco. De ahí que este modelo apenas tenga marco. Entre otras de sus características hay que señalar que cuenta con tecnologías como Adaptive Sound y Object Tracking Sound Lite, por lo que ofrece sonido envolvente 3D con sonido virtual.
TCL 50C645
Con Google TV como sistema y pantalla QLED 4K de 50 pulgadas. Este modelo de TCL es uno de los favoritos de muchos usuarios por cada una de sus características. No solo por su gran resolución de imagen, sino porque cuenta con tecnologías como 4K HDR PRO, Motion Clarity o Multi HDR Format.
Y no solamente esto, sino que tiene todas las herramientas de Google, desde acceso al asistente de voz hasta Google Meet. Sin contar que puedes disfrutar sin problemas de plataformas de streaming como Netflix, Prime Video y Disney+. Sin mencionar que su soporte es metálico y delgado, además de que no tiene bisel.
Hisense 50A6K
Otro de los televisores que puedes encontrar a buen precio es este modelo de Hisense con 50 pulgadas y calidad 4K UHD. De esta forma podrás cambiar de TV a uno con mejor calidad de imagen y que te ofrece acceso a un sinfín de apps de servicios de streaming. Además de todo esto, cuenta con tecnologías como HDR10+ y Dolby Vision, con las que consigue mejorar el contraste y el brillo de las imágenes que aparecen en pantalla.
Este televisor inteligente viene con el sistema operativo VIDAA, por lo que tendrás acceso a las principales plataformas de streaming como Netflix, Prime Video, Disney+ o YouTube. Por otro lado, cuenta con tres puertos HDMI, dos puertos USB y WiFi de doble banda.
Samsung 50AU7095
Pantalla de 50 pulgadas y con procesador Crystal 4K. Por lo que es una de las opciones más económicas si quieres estrenar una nueva TV de la marca Samsung para tu casa y, sobre todo, para dar el salto a esta calidad de imagen. Su procesador consigue optimizar los colores y ofrecer HDR, por lo que te garantiza una gran calidad en todo momento. Y más con su tecnología HDR10+.
También es compatible a varios asistentes de voz, por lo que podrás controlar el dispositivo directamente con tu voz. Ten en cuenta que viene con el sistema operativo Tizen, desarrollado por el propio fabricante surcoreano. Además, cuenta con Dolby Digital Plus para audio y una salida de sonido de 20 W a través de sus dos altavoces.
Smart TV baratas de 55 pulgadas
Si buscas unas mayores dimensiones para tu salón, te encantarán estos televisores baratos de 55 pulgadas que tienen un precio bastante competitivo para sus dimensiones. Destacan por su buena relación calidad y precio además de prestaciones que las hacen únicas. Algunos modelos puedes encontrarlos en otras dimensiones, aunque destaquemos esta porque es a la que mejor rendimiento les darás.
Samsung TQ55Q64CAUXXC
Con este modelo sube el nivel de la calidad, gracias a su pantalla QLED de 55 pulgadas. Cuenta con compatibilidad con HDR10+ y tiene dos altavoces de 20 W. Además, incluye la tecnología Q-Symphony para que puedas conectar una barra de sonido y uses el audio tanto del equipo externo como del televisor. Así conseguirás una experiencia audiovisual completamente inmersiva.
Por otro lado, hay que destacar de este modelo su diseño, ya que es realmente fino. Además de que la marca se ha centrado en hacer más finos los marcos para que te centres más que nunca en su pantalla. Por lo que es un gran atractivo de este televisor de 55 pulgadas.
Hisense 55A7KQ
No es una Smart TV Samsung, pero también puedes disfrutar de un gran panel QLED de 55 pulgadas. Y por menos dinero. Este modelo viene acompañado de retroiluminación Direct LED, una resolución 4K y compatibilidad con tecnologías como Dolby Vision, HDR10, HDR10+ y HLG. Por lo que la calidad de imagen también está asegurada.
Este televisor de Hisense tiene como sistema VIDAA U6, por lo que podrás descargar todo tipo de apps sin problemas desde su tienda oficial. Además, integra Alexa como asistente de voz y es compatible con Airplay. Por lo que si eres usuario de iPhone podrás compartir la pantalla fácilmente. Por otro lado, también hay que hablar de que ofrece una potencia de 20 W a través de sus dos altavoces y que es compatible con Dolby Atmos.
Sony BRAVIA 55X75WL
Pantalla de 55 pulgadas y con sonido Dolby Atmos, unas características que te van a gustar a primera vista de este televisor inteligente de Sony con calidad 4K. Tiene una pantalla LED con una tasa de 60 Hz de refresco, además de que ofrece compatibilidad con las tecnologías HLG, HDR10 y Dolby Vision.
Y en este caso, esta TV Sony Bravia cuenta con Google TV como sistema operativo. Por lo que cuenta de serie con Chromecast, además de que podrás usar Alexa, Apple Airplay 2 o el asistente de voz de Google. Además de esto, hay que señalar que tiene dos altavoces de 20 W y es compatible con Dolby Atmos.
Samsung TV 55Q64B
En este caso estamos ante otra gran opción de compra de nuevo para un televisor Smart TV de Samsung, en su versión de 55 pulgadas. Y entre las características más importantes que podemos destacar de este producto encontramos el 100% volumen de color con el que vamos a disfrutar de más de 1000 millones de colores para cualquier nivel de brillo gracias a la tecnología Quantum Dot. Relacionado con esta tecnología también hay que comentar el Quantum HDR10+.
Por otro lado tenemos la característica Multi View, que nos va a poder disfrutar de hasta cuatro contenidos al mismo tiempo. La forma de funcionar es que divide la pantalla en el número que nosotros queramos, y podremos establecer tanto el contenido de estas, como el tamaño y el volumen para crear una experiencia personalizada hasta el mínimo detalle.
Uno de los detalles que más nos han llamado la atención, especialmente pensado para los usuarios que disfruten de los videojuegos, es el modo de juego panorámico y barra de juego 2.0. Con estas funciones podremos sacarle el máximo partido a nuestros videojuegos con una visión de pantalla ultra panorámica de 21:9 o 32:9, y con la nueva barra de juego que nos dará acceso a todos los ajustes relacionados con este tema.
Diferencias entre una Smart TV barata y una cara
A la hora establecer el precio de un producto, un fabricante tiene en cuenta los costes de desarrollo e investigación, componentes, fabricación, distribución y margen. Teniendo en cuenta esto, es fácil comprender que, si un producto se vende a un precio muy barato frente a sus competidores, es que el fabricante ha decidido reducir la partida de presupuesto en alguno de estos apartados.
En el caso de las Smart TV, los apartados principales donde un fabricante pueden reducir son los que verás a continuación y estas características marcan la diferencia entre un producto y otro de una forma muy importante.
4K, HDR y tipo de panel
En este apartado es donde se suelen encontrar las diferencias más importantes y donde el precio puede aumentar o reducir de forma bastante importante. En la actualidad la gran mayoría de Smart TV monta paneles LCD u OLED. Ambas tecnologías son correctas, aunque el OLED destaca por ofrecer colores más brillantes, negros mucho más profundos, blancos más blancos, menor consumo energético y también un precio más elevado. Es por ello, que las opciones baratas prácticamente siempre optan por paneles LCD con diferentes tecnologías (IPS, LED, Va…).
En cuanto a la resolución, existen grandes diferencias entre un modelo con resolución FullHD (1920 x 1080 píxeles) que un modelo 4K. La mayor parte de las ventas en la actualidad se la llevan los modelos con resolución 4K o UHD, aunque todavía puede haber algún modelo que pueda servir para cubrir las necesidades de ciertos consumidores. Por ejemplo, si el uso que les darás está básicamente en ver la TDT, no estará para nada justificado un modelo 4K, ya que las cadenas emiten como máximo a resolución 108oi y en muchos casos se quedan únicamente en 720p y para sacar provecho al 4K tendrás que recurrir a servicios en streaming como Netflix, YouTube u otros.
Por supuesto es importante fijarse mucho a la hora de elegir modelo y asegurarse de que la resolución anunciada se corresponde con la realidad. Algunos fabricantes anuncian que sus televisores ofrecen resolución 4K, pero realmente utilizan trucos para poder anunciarlos como tal cuando no lo son. Uno habitual es sustituir uno de los tres subpíxeles RGB que tienen la mayoría de paneles por uno de color blanco. De esta forma consiguen ahorrar costes de fabricación y anunciar que tienen una resolución de 3840 x 2160 píxeles, pero realmente la resolución efectiva en imágenes a color es de 2880 x 2160 píxeles (3K).
El HDR también es un punto diferencial entre unos Smart TV y otros. Gracias a esta tecnología los televisores pueden mostrar imágenes más realistas y con mayor contraste entre los blancos y negros. Gracias a esto la calidad final de la imagen es mejor en equipos que dispongan de esta característica entre sus especificaciones. Básicamente existen tres versiones: HDR10 y HDR10+ que es la tecnología que están adoptando la mayoría de fabricantes por ser estándar y libre, y Dolby Vision, una tecnología propietaria de Dolby y que han apoyado menos fabricantes.
Hercios (Hz)
La tasa de refresco es una característica de las pantallas bastante desconocida por la mayoría de las personas y realmente influye mucho en la percepción de las imágenes que es capaz de mostrar. Esta tasa de refresco está expresada en Hercios (Hz) y el número representa la cantidad de imágenes por segundo que es capaz de mostrar la pantalla. Por ejemplo, un Smart TV de 60 Hz tiene capacidad para mostrar hasta 60 frames por segundo, es decir, imágenes por segundo.
En teoría el ojo humano es capaz de captar hasta 220 imágenes por segundo, por lo que subir la cantidad de Hz que es capaz de mostrar un televisor tiene ciertas ventajas. La principal es que los movimientos se verán mucho más fluidos y naturales, ya que el ojo recibirá más imágenes por segundo con diferencias muy pequeñas entre ellas.
Producir paneles con muchos Hz es bastante caro y por ello existen tantas diferencias de precio entre Smart TV capaces de mostrar muchos fps con otras que muestran una cifra más contenida.
Procesador, RAM y almacenamiento
Esta es otra característica que normalmente no se mira en exceso y puede marcar una gran diferencia entre un Smart TV y que te permitirá sacarle más o menos partido a la parte “Smart” de la televisión.
Los Smart TV ejecutan aplicaciones y éstas consumen cada vez más recursos, y por supuesto más espacio de almacenamiento. Además, los procesadores y la RAM también se utilizan en muchas ocasiones para reproducir directamente contenidos (por ejemplo, si conectas un disco duro o si utilizas servicios como Plex con reproducción directa). La capacidad de almacenamiento de la mayoría de Smart TV suele ser bastante pequeña y el propio sistema operativo y apps nativas ocupan espacio, por lo que es importante que te fijes en cuánto espacio libre queda para que puedas instalar otras apps que necesites.
Otro punto a tener en cuenta es que disponer de un procesador potente y una buena cantidad de RAM, puede garantizar más años de actualizaciones de software. Esto siempre dependerá del fabricante y del soporte que dé a sus dispositivos, pero sin duda tener un hardware potente marcará la diferencia en este sentido.
Conectividad
La conectividad es otro de los apartados más importantes en un dispositivo de este tipo. Como mínimo debes buscar que tenga conexión ethernet y WiFi, aunque tampoco es mala idea que disponga de Bluetooth para poder conectar auriculares o incluso mandos para controlar el dispositivo.
Además, no puedes olvidar las salidas y entradas a través de cable. Hoy en día cualquier Smart TV debería tener varios puertos HDMI, salida de audio óptica, algún puerto USB, etc…
En general todos los equipos cumplen de modo general con estas características, pero es importante que compruebes si utilizan las últimas versiones de los estándares o una que quizá ya esté obsoleta.
Hoy en día debes mirar que disponga, como mínimo, de ethernet gigabit, WiFi 802.11 ac, Bluetooth 5.0, HDMI 2.0. Por supuesto en el mercado de opciones baratas encontrarás equipos con versiones anteriores, aunque deberías optar por las que cumplen al menos con estos mínimos o versiones superiores.
Sonido
El sonido es algo en lo que muchas veces no se piensa al momento de comprar un televisor y es algo muy importante que definirá la experiencia que después proporcionará el equipo en general. El ejemplo más claro de que esto ocurre es que en las tiendas físicas normalmente podemos ver los Smart TV encendidos para observar su calidad de imagen, pero muy rara vez es posible escuchar el sonido.
En este apartado hay varios puntos que pueden influir en el resultado final. Desde la posición física de los altavoces en el equipo, hasta otros como la calidad de los propios altavoces, la cantidad, su potencia y también las tecnologías que incluya para mejorar la calidad del audio.
Por supuesto, el precio es un factor que influye en la calidad de sonido del equipo. Esto no quiere decir que todos los Smart TV de precio alto tengan un buen sonido, pero sin duda es un factor a examinar a la hora de escoger un modelo u otro.
Pese a todo, es importante mencionar que el sonido de la gran mayoría de los televisores es bastante regular. Sí hay modelos con mejor sonido que otros, pero si realmente quieres un buen sonido te verás obligado a recurrir a un equipo de sonido externo (barra de sonido, altavoces 5.1, etc…).
Software
Un buen software es primordial para que la experiencia con el Smart TV sea satisfactoria. Si está bien desarrollado es más probable que todo funcione de forma ágil y que además no haya errores durante la reproducción de contenidos o la ejecución de apps muy usadas en este tipo de equipos como YouTube, Netflix, HBO, Plex, etc.
Además, si el software está bien optimizado podrá sacar mayor rendimiento del hardware y dejar más recursos libres para ejecutar apps.
Hasta ahora lo habitual es que cada fabricante tenga su propio software para las Smart TV, aunque cada vez es más común que utilicen Android TV como sistema operativo, con o sin esa capa extra de personalización para diferenciarlo del resto de marcas que usan el mismo sistema. Esto les permite acceder un montón de apps desde el minuto cero y a facilitar el desarrollo. A cambio, necesitan un hardware un poco más potente para que todo funcione, pero pese a ello es una opción a tener en cuenta. A continuación os facilitamos una relación de los sistemas operativos que utiliza cada marca de televisores, para que os vayáis haciendo una idea de qué esperar:
- Xiaomi: Android TV
- LG: webOS
- Sony: Google TV
- Samsung: Tizen
- Philips SAPHI y Android TV
- Toshiba: Android TV y Smart Portal
- Hisense : VIDAA
- Panasonic: Google TV o Fire TV
- TCL: Android TV
- Sharp: Android TV
- Hitachi: SmarTvue
- Blaupunkt: Android TV
Os recomendamos encarecidamente que cuando estéis buscando un nuevo televisor que adquirir, os fijéis en qué sistema operativo tiene instalado, y que si no lo conocéis previamente, vayáis a vuestra tienda más cercana a probarlo, ver que aplicaciones tiene instaladas, con qué aplicaciones es compatible, pero sobre todo cuáles no están disponibles por falta de compatibilidad.
No es nada raro llevarse sorpresas desagradables en este sentido, tener nuestra nueva tele instalada en el salón de casa, y ya acomodados en el sofá nos damos cuenta de que no es compatible con, qué sé yo, la aplicación de HBO. Actualmente hay soluciones externas a estos casos, claro, y siempre podemos esperar una actualización que añada la compatibilidad. Pero nada como tener todo lo que necesitamos ya integrado en el sistema.
Por otro lado, siempre podéis recurrir a la información online, ya que a día de hoy existen vídeos de prácticamente todo, no sólo en YouTube, si no en las webs oficiales de cada marca. Pero no hay nada como coger el mando a distancia y navegar por los menús para ver si os satisface la suavidad, el diseño, o la simplicidad de algo tan importante como son los sistemas operativos de estas nuevas teles, y sus menús, por supuesto.
Materiales de construcción
Como en cualquier otro producto, los materiales y la calidad de la construcción afectan directamente al precio final del producto. Hay que tener claro que los modelos más económicos suelen sacrificar algo de calidad de construcción para ahorrar costes. Además, suelen tener unos bordes un poco más gruesos alrededor del panel y muchas veces todo el conjunto es más voluminoso que en otras opciones de precios más elevados.
Pese a ello, si tu presupuesto es bajo, quizá prefieras optar por reducir en acabados y conseguir que el panel y todo el hardware que hace funcionar el equipo sea mejor. Por norma general las Smart TV baratas prescinden de los últimos avances tecnológicos. En su defecto suelen recurrir a tecnologías de generaciones pasadas, pero que pueden ser perfectamente válidas para millones de consumidores en todo el mundo.
Por ejemplo, solo los modelos más recientes disponen de HDMI 2.1, la última versión del puerto que ha salido al mercado y que permite transmitir vídeo 8K de hasta 120 Hz. La mayoría recurren al HDMI 2.0 o en algunos casos a HDMI 1.4, que es compatible con vídeo 4K a 24 Hz y soporte para 3D.
Ocurre lo mismo con otro tipo de tecnologías. Los paneles 4K ya están muy extendidos y la mayoría de modelos que se pueden encontrar hoy en día tienen esta resolución, pero como decía antes, no todos los 4K son iguales. Las versiones OLED suelen estar reservadas para modelos de más alto valor. A medio camino se pueden encontrar algunas opciones como el QLED de Samsung, que se podría considerar como una mezcla entre OLED y LCD. Se trata de un tipo de panel que necesita retroiluminación, pero que igual que los OLED tiene la capacidad de encender solo los píxeles que necesita en cada momento para conseguir un mejor contraste.
También en diseño encontramos diferencias bastante notables entre los modelos más económicos y los más caros. Es un aspecto bastante subjetivo, pero normalmente los modelos de precio alto tienen diseños más cuidados, con peanas más bonitas, sin apenas bordes alrededor de la pantalla y diseños extrafinos que, de momento, no pueden estar presentes en los modelos económicos debido a los costes de fabricación.
Qué tener en cuenta a la hora de elegir una Smart TV
Dentro de una misma franja de precios podemos encontrar numerosos modelos, sin embargo, puede que muchos de ellos sean modelos obsoletos o que cuenten con tecnologías más antiguas, paneles de peor calidad, etc. Entre los detalles más importantes, estos son los aspectos en los que debemos fijarnos a la hora de comparar varios modelos:
- Tipo de panel: Los paneles LCD son los que encontraremos en los modelos más económicos, aunque pueden utilizar diferentes tecnologías como IPS, DLED, etc. Sin embargo, a medida que subimos de gama, encontraremos paneles OLED o QLED, dependiendo también del fabricante.
- Resolución: Aunque busquemos un Smart TV barato, es recomendable elegir alguno que cuenta con resolución Full HD, aunque a día de hoy, cada vez más modelos cuentan ya con resolución 4K UHD.
- Procesador, RAM y almacenamiento: Son tres características que hacen referencia al hardware con el que está equipado el Smart TV. Por lo tanto, cuanto más potente sea el procesar, mayor cantidad de RAM y espacio de almacenamiento para guardar pelis o instalar aplicaciones tengamos, mejor será nuestra experiencia.
- Conectividad: A día de hoy, es muy probable que tengamos otros dispositivos conectados a nuestro televisor. Por lo tanto, es importante revisar el apartado Conectividad dentro de las especificaciones de cada modelo. Debemos fijarnos bien el tipo de conexiones con las que cuenta y número de puertos, HDMI, USB o conexión para auriculares, entre otros.
- Tamaño: A la hora de comprar una Smart TV es conveniente tener en cuenta la distancia a la que vamos a ver la tele. Cuanto mayor sea la resolución, menor es la distancia a la que debemos ver la pantalla antes de comenzar a distinguir los píxeles individuales. Por lo tanto, es importante tener muy claro el número de pulgadas que debemos elegir. A continuación, se muestra una gráfica en la que podemos calcular la distancia a la que debemos ver una tele en función del tamaño y la resolución.