¿Qué ocurre si se nos estropea el coche y debemos repararlo? ¿Es posible hacerlo en la vía pública? Esta es una duda bastante frecuente entre los conductores de nuestro país. Sin embargo, conviene conocer que existe un marco legal que regula esta actividad y que es bastante claro al respecto. Te lo contamos.
¿Puedo recibir una sanción si reparo una avería que tiene mi vehículo en la vía pública? Esta es una situación mucho más habitual de lo que en un principio puede parecer, puesto que es frecuente caer en el error de tratar de solucionar el problema que está afectando al correcto funcionamiento de nuestro vehículo directamente en la calle. Sin embargo, desde el 1 de julio de 2021, está prohibida cualquier tipo de reparación en vehículos que se encuentren parados o accidentados en la vía pública.
Aunque, eso sí, existen algunas excepciones que debemos conocer y que nos pueden evitar recibir una sanción. Es importante conocerlas para saber cómo deberíamos actuar en el caso de que nos encontremos ante una situación similar.
Reparaciones prohibidas en la vía pública
La DGT hace uso de su página web para confirmar que, efectivamente, cualquier tipo de reparación de nuestro vehículo está completamente prohibida en la vía pública. Tal y como hemos anticipado previamente, desde el 1 de julio de 2021, únicamente existen dos escenarios en los que podemos estar exentos de recibir cualquier tipo de sanción:
- En el caso de que la operación lleve menos tiempo que la retirada del vehículo: Es decir, se da prioridad a que el vehículo pueda volver a circular, en vez de que tenga que estar bastante tiempo estacionado en la vía pública hasta que una grúa pueda remolcarlo hasta un taller o centro autorizado. Se trata de una norma que está pensada principalmente para las reparaciones más rápidas.
- En segundo caso, cuando sea imprescindible realizar la reparación para poder retirarlo. En este caso, se deberían hacer las reparaciones mínimas que puedan volver a poner al vehículo en un estado que permita poder llevarlo a un taller para terminar de realizar las reparaciones pertinentes.
En cualquier otro caso que no se contemple en ninguna de estas dos situaciones, deberemos dejar nuestro coche en la calle y contactar con un taller que nos pueda ayudar a resolver el problema haciendo uso de los medios adecuados para ello.
Acudir a un taller
En caso de que nuestro vehículo sufra cualquier tipo de avería que nos obligue a tener que detener la marcha y dejarlo estacionado en la vía pública porque no podemos seguir circulando garantizando nuestra seguridad, lo mejor que podemos hacer es ponernos en contacto con nuestro taller de confianza. Sus profesionales se encargarán de organizar la recogida pertinente del vehículo y que este pueda ser arreglado en el espacio adecuado para ello.
Conviene tener en cuenta que ciertas reparaciones requieren del vertido de una serie de líquidos que, en último término, podrían llegar a ser peligrosos. Por lo que es recomendable evitar la manipulación de los mismos en cualquier lugar que no sea un taller, puesto que cuentan tanto con los conocimientos adecuados como con las medidas de seguridad que son necesarias para llevar a cabo cualquier tipo de operación al respecto.