Si estás afectado por el ‘dieselgate’, así puedes reclamar una indemnización al fabricante

Europa ha declarado formalmente que los usuarios afectados por el denominado dieselgate tienen derecho a una indemnización conforme a la resolución del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) que obliga a las empresas fabricantes de automóviles a compensar a los clientes que fueron engañados al adquirir un vehículo con el motor trucado para simular menos emisiones contaminantes de las reales.
La Justicia les da la razón a los propietarios engañados
El escándalo del dieselgate por los datos de contaminación falsificados de los vehículos de grupo Volkswagen de Alemania que estalló en el primer semestre de 2015 causó un gran alboroto.
A los propietarios de los vehículos les preocupaba que sus coches pudieran desvalorizados, mientras que otros mostraron su enfado con el fabricante que había declarado unos niveles de contaminación que en la carretera se convertían en otros, los terceros no se quebraron la cabeza. Y ahora la Justicia les ha dado la razón: los afectados podrán solicitar una indemnización.
Esto se hacía así a través de una gran estafa (dicha formalmente) mediante la cual algunos fabricantes trucaron los dispositivos en sus vehículos que se encargaban de emitir los datos de emisiones contaminantes. Es así, por su parte, que el Alto Tribunal Europeo ha apuntado que el comprador estafado tiene derecho a ser indemnizado por el fabricante de automóviles.
Qué tenemos que saber
Igualmente, esto no es nuevo por parte de la Justicia europea. De hecho, ya en 2020 el TJUE ya aseguró que este tipo de dispositivos que falsean las emisiones son ilegales, después de que se conociera que la marca Volkswagen había instalado un software que alteraba las emisiones de algunos coches diésel en las pruebas de laboratorio.
En este caso, la sentencia concluye que, además de los intereses generales, el Derecho comunitario también protege los intereses particulares de los compradores. Asegura que la directiva marco «establece un vínculo directo entre el fabricante y el comprador individual de un vehículo de motor, que tiene por objeto garantizar a este último que dicho vehículo cumple la legislación pertinente de la Unión».
Inicialmente, este escándalo del dieselgate había afectado a la mayoría de los motores diésel 1.6TDI, 2.0TDI, algunos 1.2TDI y 3.0TDI (el último normalmente no se menciona oficialmente) producidos en los años 2008-2015. Es así que la mayoría lecturas de contaminación de gran parte de ellos (específicamente, la concentración de óxidos de nitrógeno (NOx)) se falseaban parcialmente durante las pruebas de contaminación.
Es imprescindible presentar una serie de documentos
Por otra parte, la sentencia considera que la directiva marco sobre la homologación de motores de automóviles establece un vínculo entre el fabricante y el comprador porque el fabricante, en el momento de la transacción, debe proporcionar un certificado de conformidad obligatorio que acredita, entre otras cosas, que el vehículo cumple todas las normas de la UE en el momento de su fabricación.
Como tal, este certificado permite proteger al comprador frente al incumplimiento por parte del fabricante con respecto a esta legislación europea.
En este sentido, lo que se esclarece es que cada uno de los propietarios que hayan podido ser afectados por el dieselgate pueden reclamar una indemnización directamente desde el fabricante. Esto se puede hacer de manera individual, aunque es bastante probable que sea necesario acudir a algún abogado especialista para proceder a la gestión. No obstante, es imprescindible presentar una serie de documentos, sin los cuales no es posible encauzar la demanda. Son los siguientes:
- Factura de compra del vehículo de póliza en caso de ‘leasing’ o ‘renting’.
- Ficha técnica del vehículo en cuestión.
- Permiso de circulación del vehículo.
- DNI.
Por último, lo que se establece también es que el comprador podrá reclamar independientemente de si sigue siendo el titular del vehículo o no.