Los resultados financieros presentados por Nintendo hablan por sí solos: Wii U no vende como la compañía esperaba. Apenas se vendieron 160.000 unidades de su última consola durante el segundo trimestre del año, dato que urge al gigante nipón a tomar medidas para relanzarla en el mercado.
Continúan las noticias negativas para Nintendo respecto a la consola doméstica que lanzó en noviembre del pasado año. Como revelan los resultados hechos públicos por la propia compañía japonesa y recogidos por Gamerzona.com, Wii U apenas alcanza los 3,61 millones de unidades vendidas al cierre del mes de junio. El ritmo de crecimiento se ha desplomado respecto a sus meses iniciales, puesto que en el segundo trimestre de 2013 vendió 160.000 unidades en todo el mundo.
Esto se tradujo en unos ingresos por ventas de 832 millones de dólares y un beneficio neto de 88 millones. La situación podría haber sido mucho peor en caso de no contar con sus otros dos consolas: Wii y Nintendo 3DS. La primera, que recordemos se lanzó seis años antes que Wii U, alcanzó las 210.000 unidades, mientras que la portátil es el gran flujo de ingresos de la firma asiática con más de 1,4 millones de unidades vendidas en este periodo.
De nuevo de vuelta a la última consola lanzada por la Gran N cabe remarcar la nula aceptación del producto en Europa. De las 160.000 unidades vendidas en los principales territorios del planeta apenas 10.000 se lograron entre abril y junio en nuestro continente junto con Australia. No obstante, al menos los poseedores del hardware no dejaron de comprar títulos y se contabilizaron 1,03 millones de juegos distribuidos a nivel mundial.
En cambio, es en su catálogo de títulos donde estriba uno de los grandes problemas de la consola. Sus viejas franquicias no funcionan como antaño y las terceras desarrolladoras no se han volcado con la consola como pretendía Nintendo. En el pasado E3 2013 se vio que la apuesta de la compañía pasa por seguir lanzando juegos protagonizados principalmente por personajes como Mario, Link o Donkey Kong, aunque la fórmula de su éxito parece empezar a ser menos atractiva si nos atenemos a las ventas de la consola.
Por último, que no menos importante, está el aspecto del precio del dispositivo. El gigante nipón, aun reconociendo que la consola no funciona como esperaba, se niega a una rebaja drástica de Wii U, lo que a varios analistas del sector parece un primer paso básico si la compañía quiere relanzar las ventas. Estaremos pendientes de posibles movimientos, puesto que aún tiene fijado el objetivo de llegar a los 9 millones de unidades vendidas en marzo de 2014, para lo cual sí o sí, visto el ritmo de ventas, Nintendo tendrá que tomar medidas urgentes teniendo en cuenta que en los próximos meses llegarán dos mastodontes al sector como serán PlayStation 4 y Xbox One.