Minar se ha convertido en uno de los negocios más lucrativos en lo que llevamos de año debido al espectacular aumento de precio de las criptomonedas. La fiebre de las criptomonedas ha dado lugar incluso hasta el surgimiento de los NFT, donde los NFT más caros se venden por millones de dólares. Tarjetas gráficas de incluso hace 7 años se están revalorizando, y hay quienes están pasando su tiempo libre usando hardware antiguo para minar criptomonedas y ver cuánto dinero pueden generar. Después de la Game Boy, ahora lo han conseguido con el Commodore 64.
El Commodore 64 fue, hasta la llegada de la Raspberry Pi, el ordenador más vendido del mundo. Su bajo precio, unido a una gran versatilidad y un buen rendimiento en juegos fueron suficientes para encandilar a millones de compradores. Fue lanzado en 1982, y contaba con un procesador MOS 6510, una variante del 6502 con un puerto integrado de entrada y salida de 6 bits, y que alcanzaba una frecuencia de 1,023 MHz en su versión NTSC, y 0,985 MHz en la versión PAL. Le acompañaban 64 KB de RAM y 20 KB de ROM.
0,3 hashes por segundo en un Commodore 64
La potencia de minado es, por tanto, realmente baja, donde sólo se consigue 0,3 hashes por segundo (h/s). Esta cifra es aún menor que la que se conseguía con la Game Boy de 1989, que conseguía hasta 0,8 h/s, más del doble que con el Commodore. A eso ayuda que la Game Boy contase con un procesador de 4,19 MHz.
En defensa del Commodore 64, su creador afirma que el código que ha usado está programado en C, y que, si lo hiciera con lenguaje de máquina, podría multiplicar el rendimiento por 10. Además, es posible añadir un cartucho de SuperCPU al ordenador para multiplicar la potencia de procesamiento por 20, al contar con un procesador de 20 MHz en su interior.
Su chip estaba basado en el MOS 6502
En comparación, los mejores ASICs para minar bitcoin en la actualidad superan los 90 TH/s, o, dicho de otra forma, son 300 billones de veces más potentes. Esto implicar que minar un bitcoin completo con el Commodore 64 requeriría miles de millones de años. Uno de estos dispositivos cuesta unos 5.000 dólares. En comparación, el Commodore 64 costó 595 dólares en su lanzamiento, que equivalen a unos 1.600 dólares actuales, y nos muestra hasta dónde ha llegado la potencia de procesamiento de los dispositivos actuales.
Con este proyecto, podemos ver hasta dónde eran capaces de llegar los MOS 6502 que tanto tiempo se estuvieron equipando en ordenadores y consolas durante los años 80, donde versiones derivadas de ese chip iban dentro del Apple II, la NES, la Atari 2600, o el propio C64. El modelo usado en el vídeo es un C64C, lanzado en 1986, y que sustituía la carcasa del VIC-20 por una más acorde con la estética de la época, con un teclado más grande y cambios a nivel interno, aunque con la misma memoria y potencia.
Este tipo de proyectos, por tanto, simplemente demuestran hasta dónde se puede llevar la tecnología con el esfuerzo necesario, igual que cuando se ejecuta Doom en una calculadora. Veremos cuál es el siguiente ordenador o dispositivo antiguo en el que intentan minar criptomonedas.