Netflix sigue afianzándose en todo el mundo. La plataforma es la reina del streaming y eso le ha permitido tomar decisiones como la anunciada hace unas horas: dejar de ofrecer el mes gratis en todos los países donde opera, ya que en algunos todavía los ofrecía. Sin embargo, la plataforma también comete errores y hay una cosa que hace muy mal con respecto a sus series.
Atraer usuarios y producir contenido original: el éxito de Netflix
El objetivo de Netflix es muy claro: aumentar y mantener las suscripciones. El objetivo final de todo lo que Netflix hace es aumentar la cantidad de usuarios suscritos a la plataforma, así como aumentar el tiempo que los usuarios pasan viendo contenido en ella para fidelizarlos y que sigan pagando la suscripción.
Para hacer esto, la plataforma añade nuevo contenido cada mes, además de recomendar series, películas y documentales basados en los gustos de cada usuario, usando técnicas incluso como portadas que potencien las partes más llamativas para cada tipo de usuario. Gracias a este sistema, se han convertido en la plataforma de streaming más usada en todo el mundo, lo que les ha llevado a tomar la decisión de eliminar por completo el mes gratis en países donde lo ofrecía todavía, como Estados Unidos.
Con esto no sólo evitan abusos o reventa de cuentas con el mes gratis (uno de los motivos por lo que lo quitaron en España), sino que demuestran la solidez que tienen en el mercado mientras sus competidores todavía están creando una base firme de usuarios. Netflix, en su lugar, ahora ofrece otras ofertas para nuevos suscriptores, como un primer mes más barato, un 50% de descuento en los dos primeros meses, o incluso un segundo mes gratis tras haber pagado el primero. La plataforma seguirá probando estas modalidades a lo largo de 2020 y también en 2021.
Cancelar series demasiado pronto: el gran fallo de Netflix
Sin embargo, la cara oscura de esa moneda es que Netflix tiene demasiado ímpetu en que un contenido funcione lo antes posible, y si no, lo cancela. Este comportamiento es muy lícito, pero deja a cientos de miles e incluso millones de fans con ganas de ver más contenido. La ausencia de paciencia es algo que históricamente ha acabado con series geniales antes de tiempo, como pasó con Firefly, pero que por regla general no se ha dado tantas veces como está ocurriendo actualmente con Netflix.
Y es que es raro el mes en el que no se descubra que Netflix ha cancelado algún contenido en la plataforma por falta de paciencia. Por ejemplo, la cancelación de The OA ha sido una de las más sonadas; sobre todo tras confirmar su creador que iba a haber al menos cinco temporadas. También fue sonada la de Sense8, que finalmente tuvo un capítulo final en forma de película. «Cristal Oscuro: La era de la resistencia«, uno de sus mejores estrenos este año, va a ser cancelada tras sólo una temporada, dejando la historia a medias. Atrás quedaron también Glow, Todo es una mierda, Esta mierda me supera, Santa Clarita Diet o Día a Día.
¿Cuántas veces hemos recomendado una serie a alguien, y le hemos dicho que se vea más de una temporada antes de juzgarla? Las primeras temporadas no suelen ser representativas de toda la evolución de una serie. Hay decenas de ejemplos, pero hay muchas cuya primera temporada no engancha, o simplemente no está a la altura del resto. Entre ellas encontramos a The Office (versión USA), que era mucho más oscura en su primera temporada copiando el estilo de la versión inglesa, hasta que decidieron darle la vuelta y convertirla en, problablemente, la mejor serie de comedia de la historia, con permiso de Friends.
O Juego de Tronos, cuya primera temporada la verdad es que difícilmente engancha. También es el caso de Parks & Recreation, Friends, Agents of S.H.I.E.L.D o Arrow. Un caso curioso se dio también con Mr. Robot, que tuvo una de las mejores primeras temporadas de la historia en cuanto a series, pero luego una segunda temporada muy descafeinada. Si la serie hubiera sido de Netflix, es muy probable que hubiesen decidido cancelarla, privándonos de uno de los mejores finales de serie de la historia con su cuarta temporada.
Netflix ha cancelado ya 18 series en 2020
Imaginad que hubieran cancelado cualesquiera de todas esas series. Pues, en lo que llevamos de 2020, Netflix ha cancelado 18 series originales. 14 de ellas sólo tenían una temporada. Las series tienen la ventaja de que permiten contar una historia en una o varias temporadas, y hay historias que necesitan de varias temporadas para contarse correctamente. Es un fallo renovar las series temporada a temporada, ya que a nivel narrativo las historias necesitan calma.
Esto puede ser contraproducente, ya que los usuarios de la plataforma pueden perder la confianza en ella y dejar de apostar por ver el nuevo contenido que produzcan si éste se va a quedar a medias. ¿De qué sirve verse una temporada de 10 horas si no sabes cómo va a acabar? Las protestas con The OA llevaron a los usuarios a protestar durante días frente a las oficinas de Netflix, y una mujer incluso empezó una huelga de hambre.
Así, Netflix toma muchos riesgos cancelando series y apostando por otras nuevas que puedan ser grandes éxitos, pero de nada sirve si esas futuras series también van a acabar canceladas igualmente. En lo que llevamos de año han lanzado 113 nuevas series, las cuales siguen atrayendo a nuevos usuarios y manteniendo los actuales, pero en el largo plazo puede afectar a la reputación de la empresa. A pesar de que lo intenten, no siempre es fácil crear títulos como Stranger Things, que sigue situada como una de las series más vistas de Netflix.
Si una serie tiene tercera temporada, es que no acabará de manera abrupta
Otro factor del que se suele hablar poco a la hora de renovar series pasadas dos temporadas es que, en Estados Unidos, el pago que reciben los actores y los miembros del equipo detrás de la serie se revisa normalmente al alza si la serie tiene éxito, por lo que el coste de mantener esa serie en producción suele subir.
Por ello, podéis saber de antemano si una serie va a sufrir una cancelación inesperada viendo el número de temporadas que tiene. Si ha pasado de la tercera, entonces podéis ir con relativa tranquilidad. Aún así, la calidad de la serie puede caer porque a lo mejor mantienen el mismo presupuesto, pero pagando más a los actores, dejando menos dinero para la producción o efectos especiales. El problema es que en casi todas las ocasiones ni la propia Netflix sabe si una serie va a seguir tras una segunda temporada, por lo que la consecuencia suele ser que deja muchas series sin final tras esa segunda o incluso primera temporada. Y Netflix no es la única que puede cancelar cosas.