El router que instala tu operador no es tuyo. Se trata de un préstamo. Y por eso debes cuidarlo y devolverlo cuando te cambies o te des de baja. Es una cesión, sea cual sea la compañía que tienes contratada. Por eso es probable que te preguntes qué sanción tienes que pagar por romper el router de la compañía. ¿Van a hacerme pagar por sustituirme el router? Estas son las posibles sanciones y multas.
Puede que el router no funcione por un error técnico, que se haya estropeado por una caída de tensión o simplemente que llegase defectuoso. Pero, ¿quién se hace cargo de pagarlo si se ha roto? Todo dependerá de si eres tú el culpable o no. Para comprobar qué sucede, hay que echar mano a las condiciones que fijan los diferentes operadores en España al tratar con un router roto.
Devolver los equipos
Siempre que demos de baja nuestra línea debemos devolver los equipos. Todos los que tengamos y nos hayan instalado. No nos pertenecen ni son nuestros, sino que están en calidad de cesión o alquiler. Una vez que hacemos la baja, los devolvemos al operador en la tienda o a través de mensajería en un plazo máximo de días. En la mayoría de casos son 30 días los que tendremos para hacer la devolución.
Si no devuelves los equipos, tienes que pagar una penalización. Aunque puede variar dependiendo del operador, la multa suele ser de alrededor de 50 euros en el caso del router. Pero puede que no solo tengas router, sino que tengas más aparatos…
Recoge Orange desde su web de ayuda que, si te quedas con un solo equipo, la penalización es de 50 euros o de 60,50 con IVA incluido. En este caso, el pago por no devolver el equipo a la compañía telefónica lo cierto es que dependerá en sí de la operadora a la que tengas que devolver el dispositivo. Básicamente porque no todas fijas el mismo coste de penalización a los clientes. Ya sea el router, el decodificador o la ONT. Si te quedas con dos, lo proporcional: 121 euros con IVA incluido. Y si te quedas con tres tienes que pagar 181,50 euros con IVA incluido. Aunque, nuevamente, el precio varía en función del operador.
Pero no son los únicos. También debes devolver todos los repetidores que te hayan instalado para mejorar la red WiFi. Por ejemplo, el operador Orange lo explica desde su página de ayuda. Si no devuelves el repetidor WiFi tendrás un cargo de 49 euros con IVA incluido. O, en el caso de Movistar, por el amplificador WiFi 6 hay que pagar 60 euros. Es por esto mismo por lo que cada compañía fija un precio diferente a sus equipos.
Si estás pensando en devolver los equipos porque has cambiado de operadora, entrégalos junto con la fuente de alimentación correspondiente en cualquier tienda de la operadora. Es importante solicitar un albarán de entrega en el momento en que los devuelvas para que, si hay algún error administrativo, no vuelvan a solicitártelos ni te hagan pagar por ellos.
¿Y si se rompe?
Sabemos que tenemos que devolver el router, la ONT o el decodificador al darnos de baja. Pero, ¿qué pasa si no funciona?, o ¿qué pasa si lo has roto? Depende. Depende del motivo por el que no funcione y de lo que considere el técnico de la operadora al comprobar la avería por la cual ya no funciona el equipo en cuestión.
Si Internet no funciona, normalmente llamas a atención al cliente para avisar de una avería. Esta avería hará que un técnico vaya a tu casa para ver qué ocurre. Puede que creas que no funciona y simplemente es una mala configuración o un cable suelto en el que no te has fijado. Aunque parece obvio, ocurre en muchos casos. Cuando el técnico vaya a tu casa podrá saber qué ha pasado y por qué no funciona.
¿Qué ocurre en estos casos? Puede que haya una avería en Internet o que un problema técnico haya hecho que tu router haya dejado de funcionar. En ese caso, se sustituirá sin ningún problema para que puedas conectarte bien y sin errores.
Pero puede que el técnico acuda a tu casa y vea que el router se ha roto porque le has dado un martillazo, por ejemplo. O porque tiene un claro mordisco de perro. Estos casos son poco frecuentes, pero pueden darse y se detectará fácilmente que tú eres el culpable de esa rotura. ¿Qué pasa entonces? Depende. Puede que, si lo considera el técnico, se te reclame y tengas que pagar por un aparato que tienes en cesión y que no era tuyo. O que simplemente el técnico haga la sustitución y repare la avería y no marque como que el fallo se debe a que tú lo has roto y no por accidente. Por lo tanto, también dependerá del técnico que vaya hasta tu domicilio. Incluso, a veces, ni lo revisarán.
Pero sería lógico que tuvieses que pagar la multa correspondiente por sustitución y fuese equiparable al pago por no devolverlo. Es un aparato que no te pertenece y que no vas a poder devolver porque está estropeado. Es decir, pagaríamos 50 euros (+ lo correspondiente al IVA) por cada equipo que hayas roto o estropeado.
También estarás sentenciado a pagar una multa en el caso de que intentes manipular el router de alguna manera para intentar romperlo. Con esta mala práctica, lo cierto es que hay usuarios que quieren que la compañía les envíe un router mejor, ya que el que ostentan en la actualidad es peor que los nuevos modelos que la operadora ha sacado al mercado. Por ello, llevan a cabo una serie de artimañas para lograr que el router deje de funcionar sin que se note. Desenchufar el router de la corriente, actualizar el firmware y cortarlo repentinamente o dejarlo intencionadamente en lugares encajonados con altas temperaturas, son algunas de las triquiñuelas más sonadas para conseguir el cambio.
Sin embargo, esta astucia puede salirte bastante cara si finalmente se dan cuenta de que has sido tú el causante de la avería del aparato, por lo que desaconsejamos totalmente este tipo de fechorías.
Compra tu propio router
Tener un router diferente al proporcionado por tu operador puede tener algunas ventajas, como la posibilidad de evitar multas en caso de daños o problemas con el dispositivo. Por ejemplo, si posees tu propio router, eres responsable de su cuidado y mantenimiento. Si llegara a romperse, no estarías sujeto a las multas o cargos que el operador pueda imponer por dañar su equipo.
Al tener el tuyo propio, tienes la libertad de elegir uno que se ajuste a tus necesidades específicas. Puedes seleccionar un modelo con características avanzadas, como mayor velocidad, mejor cobertura Wi-Fi o funciones de seguridad adicionales.
Ten en cuenta que, si decides instalar un router distinto al de la operadora, tendrás que llamar al servicio técnico para que te faciliten la contraseña de Internet o Password ONT para que tu nuevo router sincronice correctamente con su red y funcione sin ningún problema.
Aunque puede implicar una inversión inicial, tener tu propio router puede ayudarte a ahorrar a largo plazo. En vez de pagar una sanción si no lo devuelves o una tarifa de alquiler por el equipo, puedes utilizar tu propio dispositivo sin cargos adicionales.