Esta arma nuclear de Rusia destruirá satélites y hará que la órbita quede bloqueada

Rusia se está tomando muy en serio la búsqueda de nuevas armas nucleares que puedan darles la ventaja en una situación crítica o en un conflicto armado a gran escala. Lo último que se ha descubierto es que la nación ha construido una poderosa arma que será capaz de destruir satélites y que, además, dejará la órbita inutilizada para que los países aliados no puedan seguir sacándole partido.
Varias fuentes internas de Estados Unidos están alertando al país para que los altos cargos estén al tanto de lo que podría estar haciendo Rusia a espaldas del resto de la humanidad. Según dicen, la misteriosa y poderosa arma rusa ya se encontraría en órbita en una localización donde los demás países no tienen ninguna presencia, lo que habría ayudado a que pase desapercibida. Se cree que en cualquier momento podría llevar a cabo su activación con unas consecuencias terribles.
Es un plan que viene de lejos
Las personas que ya han oído internamente acerca de este proyecto, aseguran que no se trata de algo nuevo, sino que es una idea que Rusia lleva valorando durante los últimos años. No obstante, parece que no habrían tenido la capacidad de materializarla de una manera real hasta este momento. Aunque no tienen confirmación de qué es exactamente lo que tiene Rusia en la órbita, reconocen que tienen “algo”. E insisten en que ese “algo” forma parte del programa ruso de armas nucleares contra satélites.
Eso ha generado una gran preocupación en el entorno estadounidense porque saben que un problema en la red satelital y una situación en la que la órbita quedase inutilizada, podría generar todo tipo de problemas y ser un punto de inflexión de riesgo. También se dice que hay personas que han intentado convencer a Rusia de que abandone estos planes, pero parece que se trata de un proyecto en el que están especialmente interesados y en el que han trabajado durante años hasta poder hacerlo realidad.
Podrían estar haciendo pruebas
Si bien es posible que el arma no esté terminada todavía, no sería raro que Rusia estuviera haciendo algunas pruebas y comprobando la viabilidad de su proyecto. A los norteamericanos les escama que hayan enviado algo a una parte donde tienen privacidad y, además, también les preocupa que se encuentre en una posición donde hay una cantidad de radiación superior a la habitual. Pero, en general, hay desconocimiento y preocupación a partes iguales sobre lo que pueda estar preparando o probando Rusia en la órbita baja de la Tierra.
Tal y como mencionan los expertos, un arma nuclear de estas características sería destructiva, pero solo para los satélites y para la propia órbita baja. No causaría daños mortales entre las personas, ni tampoco haría que el planeta pudiera sufrir consecuencias en su estructura. No obstante, es lógico imaginar que la destrucción de los satélites sí provocaría daños colaterales. A corto plazo, sería un problema para todas las empresas que disponen de satélites en un espacio que, por otro lado, ya se encuentra suficientemente congestionado. Por otra parte, que la órbita quedase inutilizada durante un largo periodo de tiempo implicaría no poder lanzar más satélites ni sacar partido a los servicios de los que hipotéticamente pudiesen haber sobrevivido.
Para Rusia podría ser una carta que usar en un momento dado a las puertas de un conflicto. Tampoco sería extraño si, llegado cierto punto crítico de la actual situación con Ucrania, se utiliza ese arma nuclear espacial como demostración de fuerza.
El alcance que tendría un ataque como este se puede encontrar reflejado, aunque a menor escala, en las pruebas que se llevaron a cabo en el año 1962 de la mano de la operación Starfish de Estados Unidos. En ese momento se activó una prueba nuclear en una zona de la órbita que la dejó afectada durante un buen periodo de tiempo y que acabó con distintos satélites. Lo que pasaría, si se vuelve real el proyecto de arma nuclear de Rusia, sería todavía más contundente, ya que posiblemente tengan intención de acabar con todo lo que se encuentre el arma a su paso.
Tal y como argumentan desde Estados Unidos, este tipo de arma no entendería de naciones ni países, puesto que no podría hacer ninguna limitación: acabaría con todos los satélites de la misma forma. Por lo tanto, es una medida drástica a la vista de que Rusia también dañaría satélites de los países que considera sus aliados. Además, Rusia se negó recientemente a renovar el tratado que impide que los países que firman puedan llevar armas nucleares a la órbita. Todo ello hace pensar que quizá Rusia esté preparando algo para lo cual las demás naciones deberían prepararse.