¿Cómo solicitar la retirada de un coche aparcado en una plaza de garaje?

Las ciudades tienen bastante espacio reservado al estacionamiento de vehículos, pero este no es suficiente y a veces cuesta encontrar un hueco. Por ese motivo, son muchos los españoles que son propietarios de una plaza de garaje. ¿Qué ocurre si vas a dejar tu coche y te das cuenta de que alguien ha ocupado tu plaza? Hoy te ofrecemos consejos prácticos para lidiar con la presencia de un coche ajeno en tu plaza de aparcamiento. Desde los primeros pasos que debes seguir hasta las medidas legales que puedes tomar para que nadie más ocupe tu sitio.
No es común que nos encontremos a alguien estacionando en nuestra plaza de garaje. Sin embargo, puede ser que te haya pasado. Tal vez sea un nuevo inquilino se haya equivocado. O que simplemente se trate de una persona que ha tenido que dejar su coche unos minutos. No obstante, si se da esta situación debemos tener en cuenta que es un delito.
En España, aparcar en la plaza de garaje de otra persona sin su consentimiento es considerado una invasión de propiedad privada y está tipificado como delito en el Código Penal. Esto se debe a que la plaza de garaje es una parte integral de la propiedad del propietario del inmueble y su uso está limitado exclusivamente a él y a quienes él autorice. Por lo tanto, si alguien aparca en tu plaza de garaje sin tu permiso, está cometiendo una infracción a la normativa…
Consejos antes de denunciar
A nadie le gusta tener que interponer una denuncia en una situación como esta, sobre todo porque normalmente la persona que haya aparcado será un vecino al que veremos a diario. Por eso, antes de valorar llegar a un pleito judicial, te aconsejamos que intentes ponerte en contacto con el propietario del vehículo para intentar ir por las buenas. Así, la solución podría ser mucho más sencilla y cordial y no implicaría malgastar dinero y tiempo en un juicio.
Haz una foto
Si alguien ha aparcado en tu plaza de garaje, es importante que recopiles pruebas para respaldar tus acciones. Una forma de hacerlo es hacer una foto del vehículo que ha ocupado tu plaza y asegurarte de que alguien de la comunidad, como el conserje, el portero o el presidente, sea testigo de lo ocurrido. Estas personas pueden ser de gran ayuda para identificar al propietario del vehículo si tú no lo conoces, ya que suelen tener un listado de los coches de los vecinos que aparcan dentro.
Si la zona es amplia y no se aprecia exactamente la plaza donde está aparcado, puedes realizar un video que verifique que esa era tu propiedad, para que luego no haya problemas, y la otra persona diga que era una similar, pero no la tuya.
Deja una nota al conductor
Una vez que sepas quién es el propietario del vehículo, intenta hablar con él o dejarle una nota en el parabrisas para hacerle ver el malestar que te está causando. En ocasiones pueden darse confusiones, y que no haya sido algo a propósito, por lo que mejor es llegar a un acuerdo amistoso, nunca se sabe como se lo pueden tomar, pese a que son los que lo están haciendo mal.
Plaza alquilada
Si la plaza es alquilada, siempre puedes pedirle al dueño que trate de comunicarse con la persona que está ocupando el sitio antes de pensar en la vía judicial, puesto que él es el encargado de realizar las acciones correspondientes. Puede que tenga más plazas alquiladas, y simplemente le haya dicho a la otra persona una incorrecta, por lo que podría llegar a solucionártelo sin necesidad de otras medidas.
Denunciar si no hay mediación
Es posible que el conductor que aparque en tu plaza de garaje no quiera mediar para llegar a una solución de una manera cívica. En ese caso, tienes la opción de denunciar por cometer infracciones graves que invaden tu espacio privado. Para ello, es importante tomar los datos del vehículo que ha invadido la plaza de garaje. No olvides, sobre todo, anotar el número de matrícula, marca, modelo y color del vehículo. De esta manera, podrás acudir a la oficina de policía más cercana a denunciar este altercado.
No intentes llegar a una solución de maneras menos tranquilas, puesto que al final, la plaza es tuya, y la otra persona sabrá cuál es tu coche por el resto de tiempo, y todos sabemos que no es la mejor idea, pese a que tengas razón.
Llamar a la grúa será caro
En algunos casos, puedes llamar a una grúa para que retire el vehículo que se encuentra estacionado en tu plaza de garaje. Sin embargo, esto depende de las normas del garaje privado. Algunos garajes tienen su propio servicio de grúa para quitar vehículos mal aparcados, mientras que en otros casos, sólo el administrador o propietario del garaje tiene autoridad para llamar a la grúa.
Es importante que antes de llamar a una grúa, tengas en cuenta que serás tú quien pague el servicio. No existen multas por parte de la policía porque estamos hablando de un recinto privado. Además, llamar a una grúa sin autorización previa puede resultar en una multa o sanción.
Una alternativa podría ser llegar a un acuerdo en una reunión de vecinos para establecer un protocolo a seguir en caso de que alguien estacione en una plaza de garaje que no le pertenece. Este protocolo podría incluir el uso de una grúa para retirar el vehículo y dejarlo en la calle, con los gastos de la grúa a cargo del propietario del vehículo.
Si después de verificar las normas, decides que llamar a una grúa es la mejor opción, asegúrate de tener todos los documentos necesarios que acrediten que eres el propietario o inquilino de la plaza en cuestión. Si no tienes un contrato de alquiler, el procedimiento puede ser más lento.
La policía no puede ir
En España, la Policía Nacional y la Policía Local no tienen la autoridad para intervenir en casos de ocupación indebida de una plaza de garaje en un parking comunitario. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la respuesta y las acciones que pueden tomar pueden variar según las circunstancias específicas y las políticas locales.
En primer lugar, si alguien está estacionado en tu plaza de garaje, puedes comunicarte con la Policía Local para informarles sobre la situación. Al ser privado, pueden comentarte la posibilidad de buscar al dueño del coche y pedirle la retirada. Sin embargo, no podrán poner ningún tipo de multa, ni usar la retirada forzosa.
Por lo que no puedes amenazar con llamar a la policía. Otra situación distinta sería que se trate de un vado y que haya un coche que no quiere retirarse. En este caso, al estar en la vía pública, sí podría interceder la Policía Local y pedir la retirada del coche, con su correspondiente multa.
Evita que aparquen en tu plaza
Instalar una barrera de parking o un cepo para garaje en el suelo puede ser una solución efectiva para evitar que otros conductores estacionen en tu plaza. Sin embargo, antes de tomar esta medida, es importante que verifiques si es legal y permitido en el garaje o en la zona donde se encuentra tu plaza de aparcamiento. En Amazon hay algunos modelos por menos de 50 euros.
En algunos lugares, instalar una barrera de parking o un cepo en el suelo puede se considera una acción ilegal o estar sujeto a normativas específicas. Además, es importante considerar que la instalación de estos dispositivos puede afectar a la accesibilidad de otros conductores a sus plazas de aparcamiento y podría provocar tensiones y conflictos innecesarios en el garaje.
Si decides instalar una barrera de parking o un cepo para garaje en el suelo, es importante que avises al administrador o propietario del garaje sobre esta medida, y que te asegures de que no interrumpa el acceso de los demás conductores a sus plazas de aparcamiento. Además, recomendamos que la instalación la realice un profesional para garantizar que la ajustan correctamente y no causa daños a los vehículos.
¿Y si es un coche abandonado?
Una de las situaciones que más se pueden producir es que el coche que encuentres aparcado en tu plaza o en el aparcamiento del edificio de una manera permanente. Esto podría significar que el vehículo está aparcado porque se encuentra abandonado. Por supuesto, se trata de una situación sensible que todos los vecinos, especialmente tú si tu espacio está ocupado, querrán solucionar. Por ello, tendrás que tener en cuenta algunas recomendaciones, como primero de todo, buscar la identidad del propietario. Si nadie lo conoce, habrá que hablar con la DGT para conseguir su identidad a través del número de la matrícula.
Tras descubrir quién es el propietario del vehículo, el paso siguiente consistirá en enviar un burofax en el que se solicite la retirada del coche. Si después de ese tiempo no se produce ninguna respuesta, los miembros de la comunidad de vecinos tendrán capacidad para retirar el vehículo.