La celebración de elecciones generales el próximo 28 de abril lo ha cambiado todo. El gobierno tenía previsto aprobar el Plan Nacional Técnico de la TDT en los próximos meses, pero esta convocatoria podría retrasar significativamente su aprobación, y van a trabajar a contrarreloj para aprobarlo y hacer más fácil cumplir con los plazos que exige la Unión Europea.
Si no lo aprueban en dos semanas, tendrá que aprobarlo el próximo Gobierno
El segundo dividendo digital deberá completarse antes del 30 de junio de 2020. Esa es la fecha límite que la UE exige a los países miembros para liberar la banda de los 700 MHz y que pase a ser usada por los operadores de telefonía. Actualmente esa banda la ocupan canales de TDT, lo que a su vez va a obligar a realizar una reantenización en España.
Esta fecha límite hace que España no pueda permitirse retrasos en los plazos que había establecidos para realizar esta liberación, la cual forma parte del Plan Nacional de TDT cuyo plazo para recibir sugerencias acabó ayer 18 de febrero tras haber publicado el borrador del proyecto el 22 de enero. A partir de ahora, la Secretaría de Estado para la Sociedad de la Información y la Agenda Digital tiene dos semanas para incorporar las modificaciones pertinentes que hayan recibido en la consulta y poder llevar el proyecto para que lo apruebe el Consejo de Ministros.
En el caso de que no se cumplan con esos plazos, el plan deberá ser aprobado por el nuevo gobierno en la próxima legislatura. Este gobierno no se formará hasta semanas después de las elecciones, por lo que la aprobación se daría, como pronto, en verano. En el caso de que se consiga aprobar, la idea es que convivan las antiguas y nuevas frecuencias de la TDT durante 12 meses para que los usuarios tengan tiempo de realizar la resintonización de los canales.
El Gobierno está seguro de que van a cumplir los plazos, incluso aunque no aprueben el plan en esta legislatura. La subasta de los 700 MHz se espera para finales de 2019 o principios de 2020 como muy tarde. En marzo de 2020, según está establecido en el plan actual, se apagarán las últimas emisiones en la banda que va de los 694 hasta los 790 MHz. De momento, las ayudas que estaban previstas en los Presupuestos que no se aprobaron eran de 50 millones para ayudar a los hogares a adaptar las antenas.
De esta manera, los canales de la TDT actual estarían emitiendo en la banda que va desde los 470 hasta los 694 MHz, sin que se pierda ningún canal por el camino. Esta banda de frecuencias se seguirá utilizando por lo menos hasta el año 2030, donde seguramente ya habrá otras tecnologías, o incluso se podría plantear usar las redes móviles para la emisión de señal de TV para eliminar los problemas de ancho de banda que ya sufre la televisión actual.
¿Cuándo serán HD todos los canales de la TDT?
La decisión de emitir en HD o no queda en manos de las cadenas de televisión, y ellas obviamente no apuestan por la eliminación de estos canales, donde millones de españoles se quedarían sin poder ver la televisión. Recordamos que con la llegada de la TDT a España se obligó a comprar descodificadores, los cuales durante sus primeros años no tenían ni siquiera salida HDMI ni descodificación de MPEG-4, por lo que no son compatibles con los canales HD. Eliminar los canales SD obligaría a todas estas personas a comprar un nuevo descodificador o un televisor.
En su momento ya analizamos por qué no se habían eliminado los canales SD de la TDT. Por desgracia, el Plan Técnico no cierra la puerta a los canales SD, y permite que cada multiplex acepte hasta 4 canales en HD (o más incluso si hay nuevas tecnologías que mejoren la optimización), o continuar emitiendo en SD. Sin embargo, sí que se prevé una fecha límite en la que todos los canales tendrán que ser HD: el año 2023.
Un canal en SD, que usa el estándar MPEG-2, tiene un bitrate de entre 3 y 4 Mbps, mientras que uno en HD con MPEG-4 va entre 4 y 5 Mbps. Como vemos, el bitrate es casi idéntico, y no habría problema de espacio en que todos los canales que se emitiesen fueran HD; sobre todo porque se ganaría el espacio que ocupan los duplicados en SD actualmente. En España se venden en torno a 3 millones de televisores anuales, con un parque de en torno a 40 millones. De ellos, en torno a 12 millones no son compatibles con la TDT en HD.
Este periodo de margen hasta 2023 se dará para que los ciudadanos vayan adaptándose ante un posible cambio de estándar. Ese es el motivo por el que el Plan Técnico de la TDT obliga a que, a partir de julio de 2019, todos los televisores de más de 24 pulgadas que se vendan en España sean compatibles con DVB-T2 (y también con HbbTV 2.0.1 y posterior), algo que llevan haciendo ya varios años los grandes fabricantes del mercado; incluso en sus televisores más básicos.
Por ello, para 2023 se plantean dos escenarios: que todos los canales sean HD por obligación bajo el estándar actual MPEG-4, o directamente dar el salto a HEVC y DVB-T2. Con HEVC se obligaría a que todos los canales fueran HD con mejor calidad que ahora, e incluso habría espacio para ofrecer algún canal en UHD. No hay nada cerrado sobre esto, pero el hecho de que la obligación de que haya compatibilidad con DVB-T2 ofrece una baza importante de cara a tomar decisiones durante los próximos meses y años.