Todos los grandes operadores de EE. UU. han filtrado la ubicación en tiempo real de sus clientes

Todos los grandes operadores de EE. UU. han filtrado la ubicación en tiempo real de sus clientes

Claudio Valero

El espionaje masivo, la filtración de datos y, en general, el temor por nuestra privacidad y anonimato en la era de Internet son algunas de las principales preocupaciones de los usuarios. Además, las noticias que salen día tras día no ayudan a apagar los ánimos y ya nos esperamos que pueda suceder cualquier cosa. ¿La última? Pues que todos los grandes operadores de EE. UU. han filtrado la ubicación en tiempo real de sus clientes.

Nuestros datos son realmente valiosos para las empresas y cada vez es más sencillo recopilarlos gracias a Internet o los smartphones. Sin embargo, es complicado pensar que se los vayan a proporcionar a terceros a espaldas de los usuarios. Esto ha ocurrido recientemente en Estados Unidos con los cuatro grandes operadores móviles del país que han estado filtrando información de localización en tiempo real a terceros gracias a un vacío legal de la Electronic Communications Privacy Act.

Filtrando datos de la ubicación en tiempo real de sus clientes

Todo esto ha salido a la luz porque, entre 2014 y 2017, un antiguo sheriff utilizó un servicio llamado Securus para controlar la localización de varias personas de un tribunal hasta en 11 ocasiones. Se trata de un servicio que permite a la policía tener acceso a la localización de terminales móviles en unos pocos segundos.

tiempo real

Este servicio obtiene la información de AT&T, Sprint, T-Mobile y Verizon. El problema es que también hay un tercero llamado LocationSmart que consigue los datos. Una vez que esta empresa ha conseguido los datos, los vende a terceros. Los datos se obtienen en segundo plano de los terminales de los usuarios y pueden determinar la ubicación en sólo 15 segundos.

Básicamente, los operadores no están haciendo nada para que LocationSmart pueda tener acceso real a la ubicación en tiempo real de sus clientes. El problema es que la Electronic Communications Privacy Act prohíbe expresamente a las operadoras hacer esto, pero no habla de otras compañías y no impone restricciones.

Para muchos, es uno de los mayores agujeros legales en la historia de Estados Unidos y que ha permitido que la ubicación en tiempo real de los usuarios de telefonía móvil de las grandes operadoras sea vendida a terceros. Por el momento, se desconoce si la FCC va a tomar cartas en el asunto para investigar lo sucedido.