Desde hace tiempo, nuestro teléfono móvil se ha convertido en el dispositivo desde el que más tiempo pasamos conectados a Internet. Las nuevas tecnologías han hecho que el móvil se haya convertido en un ordenador de bolsillo, desde él navegamos por Internet, instalamos y hacemos uso de un montón de aplicaciones, consultamos el correo, realizamos compras online o consultamos nuestras redes sociales casi a diario. Esto hace que en el móvil guardemos también mucha información y un gran porcentaje puede contener datos personales o confidenciales.
Esto provoca que nuestros móviles sean el objetivo de todo tipo de ataques cuyo objetivo no es otro que el de obtener información personal o confidencial del propietario. Sin embargo, la mayoría de usuarios, aunque puedan ser conscientes de algunos riesgos, no le da la importancia que esto tiene y de ahí que nuestro país sea uno de los más afectados por el creciente número de ataques, que además, cada vez son más sofisticados y peligrosos.
Tanto es así, que desde el centro criptológico perteneciente al centro nacional de inteligencia o CNI, han elaborado y publicado un informe de buenas prácticas para usar el móvil de forma segura y evitar cualquier tipo de ataque. Se trata de un documento destinado al público en general y que busca concienciar a los usuarios de los riesgos que corremos y ayudar para que se realice un uso lo más seguro posible.
Dentro de este decálogo de seguridad para el uso de nuestros móviles, el CNI realiza una serie de recomendaciones o buenas prácticas que vamos a mostrar a continuación. La primera de ellas hace referencia a que nuestros dispositivos deben estar siempre protegidos por un código de acceso seguro, es decir, debemos bloquear el móvil siempre con un PIN, contraseña o a través de nuestra huella dactilar para que cualquiera no pueda desbloquearlo. Este PIN o método de seguridad de acceso a nuestro móvil debe activarse lo antes posible en el momento que no estemos usándolo y por supuesto, debemos evitar dejar el móvil desatendido si no está bloqueado de esta manera.
Se recomienda también utilizar las capacidades nativas que ofrecen para cifrar todos los datos e información almacenada en el dispositivo para que en el caso de perder o que nos roben el terminal no tengan acceso a ellos. Algo básico pero que muchos usuarios no cumplen, es que siempre debemos tener el sistema operativo del móvil y todas las aplicaciones instaladas actualizadas.
Se debe estimar mucha precaución a la hora de conectar el móvil a otros dispositivos, como ordenadores, a través del puerto USB y no aceptar ninguna relación de confianza si no se está conectando el móvil a un ordenador de completa confianza. Aunque en ocasiones sea de gran utilidad, desde el centro de criptografía del CNI, recomiendan deshabilitar todas las conexiones inalámbricas que no estemos usando en el momento, como el NFC, bluetooth, WiFi, servicios de localización, etc. Por lo tanto, debemos conectarlos en el momento que vayamos a hacer uso de ellos y una vez finalicemos, es recomendable volverlos a apagar.
Evitar conectarnos a redes WiFi públicas abiertas que no implementen ningún tipo de seguridad, la instalación de aplicaciones móviles que no provengan de una fuente de confianza, como las tiendas oficiales, o dar permisos innecesarios o excesivos a las aplicaciones que instalamos aunque sean de confianza.
Para terminar, siempre que sea posible debemos hacer uso del protocolo HTTPS, sobre todo cuando vamos a acceder a sitios de bancos o compras online, y por supuesto, no aceptar ningún mensaje de error de certificado digital no válido. Recuerdan también lo importante de hacer copias de seguridad de nuestros datos de manera periódica y automática para poder conservarlos y protegerlos.