¿Tienes tarjeta Contacless? Cuidado, podrías pagar sin darte cuenta

¿Tienes tarjeta Contacless? Cuidado, podrías pagar sin darte cuenta

Roberto Adeva

Sin duda, el teléfono móvil se está convirtiendo cada vez más en el dispositivo más utilizado por los usuarios para realizar todo tipo de cosas. Desde hace tiempo se ha convertido en el principal terminal desde el que nos conectamos a Internet para navegar, leer noticias, consultar el correo o las redes sociales y aunque ya se está utilizando, en un futuro podría ser parte del método de pago más utilizado sustituyendo a nuestras tarjetas de crédito.

Hasta entonces, las tarjetas contactless tanto de débito como de crédito son las que tratan de asentarse en el mercado de los métodos de pago aprovechándose de las nuevas tecnologías, ya que en este caso se apoyan en la comunicación inalámbrica y el uso de NFC, la tecnología en la que se basan también los pagos móviles.

Tarjetas de crédito

De hecho, cada vez es más frecuente ver cómo en el momento que vamos a pagar con nuestra tarjeta, la persona del establecimiento ya no introduce la tarjeta en la ranura del datáfono y con sólo acercarla a unos centímetros al dispositivo de pago, de manera inalámbrica recoge los datos y realiza la transacción bancaria. La gran mayoría de tarjetas bancarias que tenemos en la cartera ya son contactless y puede que incluso no lo sepamos, además, el objetivo es que a finales de este mismo año el 100% de las tarjetas ya sean contactless.

Pero como toda tecnología, varios expertos en seguridad ya han realizado diversos estudios para comprobar la seguridad y parece que mucho debe mejorar para que los usuarios se sientan seguros a la hora de utilizar esta forma de pago. El año pasado ya se demostró como una aplicación instalada en nuestro móvil podría hacerse con los datos de nuestra tarjeta con sólo llevar el móvil y la tarjeta en el mismo bolsillo y ahora se ha conseguido realizar pagos con una tarjeta de crédito contactless que estaba ubicada a más de 8.000 kilómetros de distancia.

Algo que realmente sorprende cuando lo lógico es que la tendencia sea utilizar métodos más seguros, que ofrezcan ventajas a los clientes y reduzcan la posibilidad de fraude. En cualquier caso, una aplicación que aparentemente puede no ser maliciosa, podría aprovecharse de su proximidad con una tarjeta contactless para leer los datos de nuestra tarjeta, mandarlos a otro smartphone y desde éste realizar compras por cantidades inferiores que no requieren de validar con un PIN, que se establece en menos de 20 euros.

De esta misma manera, dado que el campo de acción de una tarjeta NFC se limita entre los 10 y 20 centímetros, los delincuentes podrían usar diferentes artimañas para robar los datos de nuestras tarjetas en sitios de masificación o aglomeración de gente donde la distancia se podría reducir considerablemente sin que nadie sospeche. Una vez nos han robado los datos, el delincuente podría pagar algo realizando el cargo a una tarjeta que puede estar a miles de kilómetros de distancia.

Hechos que por supuesto preocupan a los usuarios, pero los bancos están tratando de quitar hierro al asunto asegurando que se está trabajando para solucionar estos problemas y ofrecer a los clientes una forma de pago cómoda y segura. Por el momento, debemos tener cuidado con nuestras tarjetas y evitar este tipo de situaciones.