No estás obligado a facilitar tu número de móvil y email a tu empresa

No estás obligado a facilitar tu número de móvil y email a tu empresa

David Valero

A la hora de conseguir un nuevo trabajo muchos trabajadores aceptan todas las condiciones que la empresa plantee por el mero hecho de no perder una oportunidad. Pero algunas de estas condiciones han sido reconocidas por la justicia como abusivas y la última de ellas es la supuesta “obligación” de facilitar a la empresa tu número de teléfono o tu correo electrónico.

En una sentencia del Tribunal Supremo dictada hoy, se ha resuelto que aquellas cláusulas incluidas en los contratos de trabajo donde se obliga al empleado a comunicar a la empresa el número de teléfono móvil y el correo electrónico son abusivas y por tanto han de declararse nulas. Este tipo de condiciones no pueden incluirse en un contrato de trabajo ya que según el mencionado tribunal, no forman parte de los que deben considerarse como imprescindibles para establecer los parámetros de la relación laboral.

Esto no quiere decir que se pueda acordar entre ambas partes el facilitar unas vías de contacto como pueden ser el e-mail o el teléfono móvil de cara a entablar comunicaciones personales o laborales de forma más cómoda y rápida, acorde a su vez a la realidad del mundo tecnológico actual, aunque en todo caso transmitir estas formas de contacto ha de hacerse siempre de forma voluntaria.

El móvil se llegado a convertir en una herramienta imprescindible en el día a día laboral, llegando incluso a ser el medio utilizado para comunicar un despido a un trabajador. Pero de cara a proteger al empleado, la parte más débil de la relación laboral, el Alto Tribunal ha declarado nulas todas aquellas cláusulas que obliguen a facilitar la dirección de correo electrónico o el número de teléfono móvil privado.

El WhatsApp puede ser el mejor aliado de tu jefe

El desarrollo de aplicaciones móviles de mensajería instantánea como WhatsApp, Line o Facebook Messenger ha tenido un doble impacto sobre la vida laboral en la actualidad. Por un lado nos encontramos ante una herramienta muy potente que puede permitir resolver una cuestión laboral urgente en cualquier momento y desde cualquier lado.

Pero en su otra vertiente tenemos el exceso de control que un empresario puede hacer de sus trabajadores, al conocer incluso en qué momento han leído algún mensaje o instrucción recibido a través de WhatsApp e impidiendo al empleado poder desconectar de la rutina laboral durante su tiempo de ocio.