En la fabricación de dispositivos electrónicos cada vez se requiere más el uso de metales raros para conseguir nuevas aleaciones y materiales que proporcionan más resistencia, ligereza y calidad a un teléfono móvil, ordenador, tablet o Smart TV. Pero el abuso de este tipo de recursos está poniendo en jaque su disponibilidad en próximos años y desde la Universidad de Yale ya han alertado acerca de la escasez de algunos metales en el futuro.
Las películas de ciencia ficción en las que unos astronautas se embarcan en un viaje de exploración espacial en busca de nuevos recursos naturales esconden una verdad a medias. En nuestro planeta, los recursos son limitados y en el caso de algunos metales la complejidad de su extracción, cómo ya nos comentaron recientemente los compañeros de Móvil Zona, y la poca disponibilidad de los mismos los convierten en un bien muy preciado. Con el boom tecnológico experimentado a finales del siglo XX, las reservas de muchos de estos materiales están descendiendo drásticamente, como se observa en los datos publicados en un estudio de Proceedings of the National Academy of Sciences, donde se han consultado a expertos y diversas fuentes de la industria tecnológica al respecto.
No es un problema únicamente de escasez, sino también de la baja presencia de materiales sustitutos, ya que por ejemplo, el indio, material usado en la fabricación de las pantallas de ordenadores no tiene un material sustituto. Además, hay que tener en cuenta el siempre delicado estado global de la industria de la minería. Prácticamente toda la extracción de metales raros del mundo proviene de China (en torno a un 90 o 95%).
Reciclar los dispositivos es una opción
Según Thomas Graedel, uno de los responsables del estudio, echar mano de materiales tradicionales como el cobre, el aluminio o el zinc seguirá siendo una opción pero existen otros metales como el selenio o el galio, que no corren la misma suerte y han resultado francamente valiosos para el desarrollo de nuevas tecnologías como la óptica infrarroja o la fabricación de smartphones. En algunos casos, el reciclaje de dispositivos electrónicos permite recuperar gran parte de estos materiales para reutilizarlos, aunque la presencia de algunos metales raros en móviles o tabletas es casi testimonial lo que también complica mucho su reciclaje y aprovechamiento posterior. Por tanto el sector tecnológico tendrá que adaptarse a un nuevo escenario en el futuro y deberá comenzar a decantarse por el uso de nuevos materiales.