El uso de punteros láser va por rachas. Aunque hay quienes lo usan para hacer presentaciones en el trabajo, hay otros que se dedican a molestar en espacios públicos. En España, existen leyes y restricciones que podrían hacerte dudar de si está prohibido o no. ¿Podrían multarte?
Los punteros láser llevan muchos años entre nosotros, poniéndose de moda por temporadas cuando acudimos a ciertos sitios turísticos o pasemos por ciertas zonas de nuestra ciudad. En algún momento, es probable que los hayamos usado o hayamos conocido a alguien que ha tenido en propiedad uno de estos objetos.
Si de pequeño te divertías con este tipo de dispositivos o si le has comprado uno a tu gato para jugar con él, debes saber que podrías estar enfrentándote a penas de multa. Cada vez son menos las personas que utilizan los punteros láser, ya que la tecnología nos ha facilitado otro tipo de técnicas para señalar algún objeto. Sin embargo, usarlo sin ser consciente de los riesgos que supone podría ser una temeridad.
No son ilegales
A pesar de que muchos creen que es ilegal su uso, no es verdad. La confusión proviene de personas que venden lápices o láseres de alta potencia, y los denomina “punteros”. Es decir, se consiguen punteros láser con un nivel de potencia que no es legal.
Para ser calificado como un puntero normal, el láser debe ser inferior a 1 milivatio (mW). Si logra estar por encima, no puede catalogarse como puntero y se considera ilegal llamarlo así. No obstante, no estarás incumpliendo ninguna ley si tienes uno en tu poder. Ya solo estaría en tu conciencia si deberías entregarlo a la policía o no. Pero, en ningún caso, estás obligado.
Además, desde el 5 de febrero de 2014, la Unión Europea decidió prohibir los punteros láser superiores a la clase 2 con una potencia de salida máxima de 1 Mw. Es decir, se incluyen los punteros de clase 3R (1-5 mW), 3B (5-500 mW) y clase 4 (500 mW+), tanto en su venta como en su posesión en la Unión Europea.
Es importante saber que los láseres de luz verde tienen un riesgo elevado para la vista. Apuntar a los ojos de otras personas y provocar heridas es ilegal y muy peligroso y aunque el uso de un puntero láser no es ilegal, ocasionar lesiones a otras personas sí lo es. Por lo que deberás usarlo con cuidado y extremar la precaución si hay personas cerca mientras lo estás usando.
¿Cuándo y dónde no debes usarlo?
Aunque cada país tiene su propia legislación al respecto, en España está prohibido el uso de punteros láser en ciertos lugares y situaciones. No pasa nada si lo utilizas en tu casa o en tu oficina para algo concreto, pero no puedes usarlos donde quieras y debes cumplir la ley si no quieres que te multen con sanciones que van hasta varios miles de euros. ¿Dónde no puedes usarlos nunca en España, las más comunes e importantes son:
- Aeropuertos: Está prohibido usar estos dispositivos cerca de los aeropuertos o dentro de su perímetro de seguridad. Un rayo de luz de este tipo puede crear distracciones que pongan en peligro la seguridad de los pilotos y de los vuelos. Como es lógico, esto puede ser muy peligroso y te multarán con una gran cantidad de dinero por poner en riesgo a pasajeros o pilotos.
- Espectáculos públicos: Tampoco se permite usarlos en eventos públicos, como conciertos, eventos deportivos o cualquier otro tipo de espectáculos al aire libre o en lugares cerrados. Como en el caso anterior, pueden causar distracciones y afectar a la experiencia de cualquier asistente. En el caso de un jugador de fútbol, podría incomodarle para chutar a gol, por ejemplo.
- Sitios públicos: En general, está prohibido utilizar los punteros láser en lugares públicos, como calles, plazas, parques… Esta restricción se fija para evitar situaciones peligrosas y cualquier daño a vecinos. Igualmente, tampoco podemos apuntar a los agentes de la autoridad.
El espacio doméstico: la mejor opción
Una vez hemos mencionado los lugares en los que un puntero láser no puede utilizarse, el sentido común nos invita a utilizarlo únicamente en aquellos espacios en los que estamos solos y tenemos todas las variables del entorno controladas, como es nuestra vivienda.
Si bien es cierto que este tipo de dispositivos pueden llegar a ser muy divertidos si los usamos con nuestros familiares o amigos, la realidad es que nuestra recomendación es que evitemos la tentación de utilizarlos si no es en nuestro espacio doméstico. En nuestra vivienda vamos a poder hacer uso de los mismos sin ninguna limitación, teniendo todas las opciones a nuestro alcance para utilizarlos y divertirnos con ellos sin estar expuestos a ninguna multa o sanción.
Aun así, siempre debemos usar la lógica. En situaciones que puedan poner en peligro nuestra integridad o la de otra persona, no deben usarse. Estaría terminalmente prohibido apuntar a alguien que conduce, aunque lo hagamos desde nuestra terraza de casa o mientras andamos por la calle.
También hay que tener en cuenta que no acatar la ley significará una infracción administrativa que, en función de la gravedad, tendrá un tipo específico de sanción. Un ejemplo es el de las playas de El Prat, cuyas multas están establecidas entre los 1.500 y 3.000 euros.
¿Qué es lo más aconsejable?
Manejar un puntero láser es muy peligroso si no lo utilizamos con precaución. De hecho, sus consecuencias pueden ser muy graves si apuntamos a las personas o a los animales. Parece un juego de niños, pero para nada lo es, ya que los resultados van desde lesiones de retina si se apunta a los ojos, que pueden ser determinantes para la ceguera y la molestia visual, hasta quemazones en la piel que actúan como si te hubieses quedado largas horas bajo el sol abrasador del verano. Sea como fuere, está terminantemente prohibido utilizarlo para las siguientes situaciones:
- No apuntar a ninguna parte del cuerpo con el láser ni a objetos reflectantes.
- Los niños deben quedar exentos del uso de estos productos.
- Un puntero láser no está destinado a las actividades lúdicas, por lo que no es considerado un juguete.
- Al comprar un puntero láser, cerciórate de que viene etiquetado con las instrucciones de uso, para así solventar cualquier duda que surja.
- Es mejor comprar punteros de color rojo. Los láseres azules y violetas son más peligrosos, ya el ojo humano es más propenso a pestañear más lento y tener menos reflejos, de manera que las lesiones pueden llegar a ser mucho mayores.