Del buen funcionamiento de nuestro router dependerá que tengamos una conexión a Internet rápida y estable. Cuando este dispositivo empieza a fallar puede ser todo un engorro, sobre todo desde que el teletrabajo ha experimentado un auge notable y cada vez son más las personas que trabajan desde su propio domicilio. Que este dispositivo se reinicie solo o se apague cada poco tiempo es algo muy molesto. En este artículo, vamos a hacer un repaso por los motivos más comunes por los que esto puede ocurrir.
No pagamos una tarifa de Internet para que la señal WiFi se esté cayendo cada dos por tres. Si eso ocurre, lo más normal es que nos preocupemos e incluso podamos llegar a enfadarnos con la operadora. Antes de que realices una llamada al servicio técnico, puedes comprobar qué sucede por ti mismo e incluso probar varias formas de arreglarlo tú. De esta manera, puedes ahorrarte las largas esperas para que llegue el profesional de turno a casa para ver qué sucede. En caso de que no tenga una solución sencilla, al menos podrás informar a la operadora del problema y, cuando el experto llegue, vendrá con las herramientas necesarias para solucionarlo al momento ese mismo día.
Los routers son dispositivos que están diseñados para funcionar ininterrumpidamente sin que haya nada que pueda hacer que su funcionamiento se detenga. Pero, como todo aparato electrónico, estos también pueden fallar. No siempre necesitaremos a un experto en el tema para solucionarlo. A veces, bastará con hacer unas simples comprobaciones para que no vuelva a generar problemas.
Posibles motivos del mal funcionamiento de un router
El mal funcionamiento del router se puede deber a múltiples factores de todo tipo. No debería ser común que el router se reiniciase o apagase por sí solo y, si ocurre, puede llegar a ser muy molesto. Hay causas más comunes que otras que pueden provocar esos errores. A continuación, os vamos a enumerar las posibles causas de que tu dispositivo se reinicie solo o se apague cada poco rato.
Cableado defectuoso o suelto
Uno de los principales motivos (si no el principal) de que esto ocurra puede estar en el cable de corriente. Si este se encuentra mal conectado o en mal estado, nuestro router va a recibir corriente eléctrica de manera inestable o discontinua, por lo que esto hará que nuestro router se apague solo o se reinicie cada poco tiempo.
Si te has asegurado de que el cable esté bien conectado al dispositivo, entonces el problema puede estar en el cable en sí. Comprueba si hay algún tipo de rotura o de torcedura en el cable, y en caso de que la haya quizás deberías de cambiar el cable de corriente de tu dispositivo.
Además, no solo puede deberse al cable de corriente, también puede que el cable de fibra esté averiado y esto haga que el router no tenga acceso a Internet. Comprueba las luces del router y el estado del latiguillo de fibra y si detectas que está en mal estado, llama al servicio técnico de la operadora para que te cambien el cable lo antes posible.
Más allá del cable de corriente y el cable de fibra óptica, puede que el problema esté en algún cable de red que tengas conectado en tu router. A veces, vemos un cable colgando del router y decidimos conectarlo en algún puerto sin comprobar que el otro extremo del cable ya está conectado. Hacer esto provocará un cortocircuito en el router y hará que no te dé acceso a Internet. Comprueba todo el cableado y si es necesario, desconecta todos los cables de red para comprobar que el fallo no está ahí.
Sobrecalentamiento
Otra causa muy común de este tipo de sucesos la vamos a encontrar en la temperatura del router. Como hemos dicho anteriormente, los routers son dispositivos pensados para funcionar sin parar durante mucho tiempo seguido, pero eso no quiere decir que puedan soportar temperaturas muy altas. De hecho, si un router se calienta demasiado se bloqueará, haciendo que este se apague de repente.
Esto puede ocurrir si tenemos el router colocado en un sitio muy expuesto al Sol o altas temperaturas, o si lo tenemos colocado en algún lugar donde queden obstruidas sus orificios de ventilación. Si se sigue calentando demasiado el router, procura desconectarlo durante la noche mientras nadie lo utiliza, algo que hará que se enfríe totalmente para cuando lo conectes por la mañana.
El router está obstruido de suciedad
Este motivo está directamente relacionado con el anterior, ya que un router que esté sucio no se podrá refrigerar de manera adecuada, lo que provocará, como es lógico, que se sobrecaliente bastante. Como ocurre con cualquier dispositivo electrónico, es muy importante que lo mantengamos lo más limpio posible siempre.
Para limpiar el dispositivo procura que siempre esté desconectado de la corriente, y lo que no te recomendamos es que abras el dispositivo para limpiarlo por dentro. Bastará con que lo limpiemos con mucho cuidado (especialmente sus orificios) para que este no se sobrecaliente tan frecuentemente.
Intrusos en el router
Puede que no lo sepas, pero puede ocurrir que tengas intrusos utilizando tu red WiFi. Tener intrusos puede generar muchos problemas para nuestra red, desde problemas de rendimiento o velocidad hasta llegar al punto de que nuestro dispositivo se sobresature y se apague frecuentemente.
Para librarte de ellos lo más recomendable que puedes hacer es cambiarle la contraseña a tu red WiFi. Procura poner una que no contenga información personal sobre ti, lo que hará que sea más difícil de adivinar para aquellos que te conozcan.
Firmware desactualizado
Otra razón que podría explicar por qué mi router se apaga o reinicia de manera inesperada, puede estar relacionada con el software. Cuando el firmware del router está desactualizado, puede provocar fallos en el funcionamiento y generar riesgos de seguridad.
Es muy importante mantener el firmware del router siempre actualizado. Esto no solo garantiza un buen rendimiento, sino que también te garantiza una mayor seguridad en la red. Además, al tener la última versión de actualización del router, tendrás una capa adicional de protección contra posibles intrusos que intenten acceder a tu red.
Más allá de las actualizaciones manuales que puedas hacer en tu router cada cierto tiempo, hay una serie de actualizaciones automáticas que lanza la operadora para corregir fallos o vulnerabilidades de seguridad. Cuando esto sucede, el router suele reiniciarse automáticamente, por lo que se reiniciará y se apagará solo.
Mala configuración
Si hemos cambiado algún parámetro avanzado en la configuración de nuestro router es muy posible que este sea el motivo por el cual nuestro dispositivo está fallando. Puede ocurrir que un cambio en la configuración también sea un problema para la seguridad, por lo que es importante que no toquemos aquello que desconocemos.
Lo ideal sería que si has cambiado algo en el router volvieras a cambiarlo para que este estuviera en el mismo estado que estaba antes. Si esto no funciona siempre te queda una solución un poco más «extrema» que veremos justo a continuación.
Cuando nada funciona: reseteo de fábrica
Arriba has podido ver cuáles son los principales motivos de que un router se reinicie o se apague solo cada poco tiempo, así como algunas soluciones sencillas que puedes aplicar si te ocurre este caso tan molesto. Si ninguna de estas soluciones te ha servido y tu router sigue apagándose o reiniciándose solo, siempre te queda la opción más radical de todas, que es devolver este router a los valores que traía de fábrica.
Este proceso es un tanto molesto porque perderemos cualquier tipo de cambio en la configuración que hayamos hecho, pero puede solucionar por si solo muchos problemas. Para ello, podrás elegir hacerlo desde la configuración del router (accediendo a través de 192.168.1.1) o bien desde el mismo dispositivo, pulsando durante algunos segundos en el botón que se encuentra en el orificio que indica «Reset».
En caso de que una vez reiniciado este siga igual, el problema puede venir del hardware del equipo, ya sea por un fallo puntual o porque tiene mucho tiempo. Este tipo de dispositivos, como decíamos, pueden calentarse en exceso, y eso sumado a una falta de mantenimiento, lo cual acumula suciedad, pueden hacer que algo se haya quemado o degradado a una velocidad mayor a la habitual. La solución más simple es llamar a nuestra compañía, nos cambiarán el router por otro de forma gratuita, y si tenemos suerte, posiblemente sea una versión mejor, así que si no eres capaz de conseguir una solución rápida, ya sabes, no pierdas el tiempo, llama a tu operadora de fibra y concertar una cita.