Un reciente estudio pretende situar la calidad de las cámaras actuales de los smartphone en relación a la evolución de las cámaras réflex digitales de los últimos años. Para ello ha escogido uno de los terminales más populares, el iPhone 5s y el dispositivo puntero en este sentido, el Nokia Lumia 1020. Las conclusiones son que la cámara del teléfono de Apple está años por detrás de la del móvil finlandés.
Es un hecho que las cámaras se han convertido en un componente esencial de los smartphones. Es difícil imaginarse que un terminal, aunque sea de gama baja, no incorpore este componente. Con el paso de los años, la calidad de estos sensores va en aumento, acorde con el resto del conjunto. Aunque para muchos no supone un factor de peso, cada vez más, los smartphones son utilizados como cámara principal, y los más entendidos, demandan componentes de la más alta calidad. Sin embargo, ¿cómo encajan estos dispositivos en la evolución de las cámaras réflex digitales?
Para dar una idea general, el estudio elige dos equipos significativos. Uno porque es el rey de la fotografía en smartphones, el Nokia Lumia 1020, gracias a sus 41 megapíxeles. Además, de ofrecer un control manual a tiempo completo sobre los diferentes ajustes de la cámara. El otro, porque es uno de los terminales más populares alrededor de todo el mundo, el iPhone 5s, que cuenta con una cámara de 8 megapíxeles, tiempo de disparo increíblemente rápido y sencillez. La evaluación distingue dos condiciones de luz diferentes, con buena y baja iluminación.
Las conclusiones son claras. La cámara del iPhone podría compararse en calidad con las cámaras punteras (alrededor de 2.000 dólares) de hace una década. Podría competir con modelos de hace 8 años en condiciones de buena iluminación pero teniendo en cuenta los resultados con baja luz, la diferencia se podría situar en torno a los 10 años.
Por su parte, la cámara más potente del mercado actual, la del Nokia Lumia 1020 estaría a la altura de cámaras de entre 6 y 8 años. Nuevamente, mejora notablemente en condiciones favorables, pero no alcanza el nivel, de por ejemplo, la Canon EOS 40D de 2.007. No quiere decir que sea una mala cámara, pero es lenta y no dispone de funcionalidades o capacidades que sí tienen las cámaras réflex.
Si comparamos, el componente fotográfico del Nokia respecto del terminal de Apple estaría aproximadamente 3 años por delante, lo que es un tiempo más que considerable. Quizá por el precio de venta los productos de la compañía de Cupertino, sería un aspecto para revisar en próximas versiones. No todos los clientes lo requieren, pero sí es cierto que la mayoría paga un montante de dinero considerable para disponer de lo último en el mercado, y la cámara no debería ser menos. Para finalizar es cierto que las cámaras que equipan los smartphones están avanzando con los años, pero el estudio deja claro que quizá no lo hacen a la velocidad necesaria para desbancar definitivamente a las cámaras réflex, al menos, a corto o medio plazo.