Pronto podremos probar y dar opinión sobre PS5. Los últimos rumores establecen que la consola será presentada en los primeros días de febrero, donde conoceremos detalles como sus características técnicas, su precio, algunos de los juegos disponibles en el lanzamiento, y la propia fecha de llegada que algunos sitúan en el 20 de octubre o 20 de noviembre de este año. Ahora, sabemos que las consolas no van a costar más de lo que se esperaba.
El precio de ambas consolas sigue siendo un misterio, así como cuál de las dos tendrá más potencia. Lo que parece que está claro es que ambas costarán más dinero que lo que costaron las últimas consolas que lanzaron Sony y Microsoft. Así, en lugar de 399 euros, el precio podría subir a 449 o incluso a 499 euros, que será muy probablemente el que tenga al menos una de ellas.
Adiós al arancel del 25% en PS5 y Xbox Series X
Suponiendo el precio esperado de 499 euros, éste podría haber sido aún más alto si Estados Unidos no hubiera llegado a un acuerdo arancelario con China. La falta de acuerdo entre ambas partes habría provocado un aumento de los aranceles para los productos electrónicos fabricados en China, entre los que se encuentran las nuevas consolas de Sony y Microsoft. El precio habría aumentado un 25%, pero finalmente no será así en los videojuegos, aunque sí en los juegos de mesa. Fabricantes de este tipo de juegos ya están buscando llevarse la producción fuera de China a zonas como Europa o México.
Nintendo, Sony y Microsoft publicaron una declaración conjunta en la que afirmaban que el aumento de los precios haría que las consolas no fueran asequibles para un amplio número de ciudadanos, y que además ese dinero iría directamente al estado en forma de impuestos en lugar de ir directamente a las empresas, ya que Trump no parece tener claro cómo funcionan los aranceles, los cuales finalmente acaban pagando los ciudadanos del país donde se aplican.
Los aranceles podrían haber afectado también al precio en la UE
Los aranceles se habrían aplicado a las consolas vendidas en Estados Unidos, pero probablemente para evitar que éstas se comprasen en la Unión Europea en lugar de Estados Unidos, el precio de las que los usuarios europeos comprasen también podría haberse visto afectado. Así, en lugar de por ejemplo haber llegado a costar 600 dólares (545 euros), la traducción podría haber sido perfectamente 549 o 599 euros. El precio en dólares será equivalente probablemente al que veamos en euros, ya que hay que sumarle el IVA que tienen los productos en España y que no se incluye en el precio que anuncian en Estados Unidos porque hay estados donde no se paga.
Sin embargo, lo que sí podría afectar a las consolas o a la llegada de nuestros dispositivos de China es el coronavirus de Wuhan, que está paralizando cada vez más ciudades en el país, y que ya ha obligado a cerrar algunas plantas de manera preventiva, mientras que en otras han implantado restricciones. Así, productos como el iPhone 9 o las consolas podrían retrasarse con respecto a sus fechas esperadas de lanzamiento.