Samsung ya tiene casi domados los Z-SSD: los SSD más rápidos del mercado

Samsung ya tiene casi domados los Z-SSD: los SSD más rápidos del mercado

Alberto García

Samsung es líder mundial en la fabricación de unidades SSD, y está liderando la transición a las memorias 3D-NAND. Esta transición está haciendo que el precio de las memorias sea bastante elevado porque no se puede hacer frente a su demanda. A pesar de esto, Samsung ya está trabajando en los Z-SSD.

Z-SSD: el arma de Samsung para luchar contra los SSD 3D Xpoint

Los Z-SSD utilizan un nuevo tipo de memoria NAND llamada Z-NAND, la cual Samsung ha conseguido desarrollar, junto con su correspondiente controlador. La compañía ya ha fabricado las primeras unidades, las cuales están siendo probadas a fondo para iniciar la producción a principios de 2018.

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Las memorias Z-NAND son, básicamente, unas memorias que utilizan celdas de un único nivel (SLC, o single-level cell). Estas celdas se diferencian de las MLC (multinivel) en que no almacenan varios bits por celda, con lo cual tienen menor capacidad en el mismo espacio, pero mayor fiabilidad y velocidad. Así, se consiguen velocidades hasta 7 veces superiores a los SSD SATA tradicionales.

El objetivo principal de estas memorias Z-SSD es competir con las 3D XPoint SSD (que se puede decir que son una mezcla entre memoria RAM y SSD) desarrolladas por Intel en colaboración con Micron el pasado mes de abril. Esta memoria de Intel es más rápida y duradera que la NAND, por lo que Samsung ha trabajado en crear Z-NAND, que tiene menos latencia, consume menos, y es más rápida que la NAND actual. Mientras que los principales SSD para consumidores van a usar en el próximo año memorias 3D NAND de 64 capas, la gama alta requiere velocidades enormes que sólo las mejores memorias pueden aportar.

Los Z-SSD utilizan conectores PCI-e, ya que saturarían con facilidad la velocidad máxima de los conectores SATA. Samsung mostró hace unos meses un modelo de 3,2 GB/s de velocidad de lectura y de escritura, suponiendo un nuevo récord en velocidades de escritura.

Los SSD costarán casi igual que los discos duros de la misma capacidad alrededor de 2020

A pesar de que para consumidores los discos duros siguen siendo atractivos por su fiabilidad y bajo precio, en el futuro las unidades SSD van a ir alcanzando a los discos duros en precio. Tal y como estimamos hace un año, el precio de los SSD debería alcanzar a los discos duros en algún momento de 2019 o 2020 como muy tarde. Otras fuentes sitúan el coste por GB de los 0,61 dólares en 2014 a 0,09 dólares en 2021, lo que supondría que un SSD de 1 TB costaría 90 dólares (75 euros).

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Los SSD son más pequeños y consumen menos energía que los discos duros, y todo con una mayor velocidad de lectura y escritura. Si fiabilidad se suele poner en entredicho, pero la realidad es que la tasa de fallos es la misma que la de los discos duros. Esto genera recelo en los consumidores a la hora de utilizar sólo SSD sin disco duro, sobre todo porque los primeros son finitos, y una vez se agotan no es posible volver a escribir en ellos.

Por ello, la demanda de los SSD por grandes empresas tecnológicas para usarlos en sus servidores va a seguir creciendo, ya que ellos se pueden permitir hacer redundancia de datos y así protegerse ante un posible fallo de un SSD.