Los reguladores antimonopolio de la Unión Europea tienen planeado solicitar a Google que detenga el pago de incentivos a los fabricantes de teléfonos inteligentes por incluir su buscador en exclusiva antes que poner sus productos a la venta.
Esto se ha podido saber gracias a un documento de más de 150 páginas cuya copia fue enviada a la propia Google el pasado mes de abril y en el que la Comisión Europea acusa al gigante tecnológico de usar su sistema operativo móvil Android para «excluir» a los rivales. Por todo ello este organismo de la UE planea pedirle a Google que finalice con los pagos o descuentos a fabricantes de smartphones a cambio de preinstalar la Google Play Store y el buscador de la compañía. Además estos reguladores también quieren evitar que la firma obligue a los fabricantes de estos dispositivos móviles a preinstalar aplicaciones propias si estas restringen la capacidad para utilizar sistemas operativos alternativos.
Según el mencionado documento al que tenido acceso recientemente Reuters, Google no puede castigar ni amenazar a las empresas por no cumplir con sus condiciones. Por todo ello la compañía podría enfrentarse a una gran multa debido fundamentalmente a que podrían estar llevando a cabo prácticas contrarias a la competencia a partir de enero de 2011 y aún en curso, según este documento. Por lo tanto esta Comisión tiene la intención de fijar una multa lo suficientemente importante para garantizar una disuasión por parte de la compañía infractora. De hecho la pena podría basarse en los ingresos generados por los clics de AdWords de los usuarios europeos, las consultas y búsquedas por medio de los productos de Google, aplicaciones de Play Store, etc. De momento el portavoz de la Comisión, Ricardo Cardoso, se ha negado a hacer comentarios al respecto.
Por otro lado se está investigando si Google favorece sus propios servicios de compras sobre los de sus rivales, por lo que también podría imponer una multa en caso de ser así. Debido a ello cabe la posibilidad de que la empresa norteamericana tenga que ofrecer servicios comparativos de compras de los rivales de la misma manera que los propios. Asimismo la Comisión de investigación dice que aún tiene que decidir en una fase posterior, si desea que el buscador se vea en la obligación de mostrar los servicios de los competidores en lugares destacados, con el pago del importe correspondiente al precio más bajo para AdWords, que actualmente es de 0,01 euros por cada clic.
Con todo y con ello hay que tener el cuenta que el mencionado documento tiene varias secciones de información confidencial a las que no se ha tenido acceso.