Ayer nos preguntábamos si es razonable pagar 5 euros por alquilar una película en un servicio de streaming y hoy vamos un pasó más allá. Ver un único partido de fútbol en nuestro país de forma “legal” tiene un coste de casi 10 euros, una cuota desorbitada, fuera de mercado y poco coherente con el precio mensual que nos permite ver todos los partidos.
Industria audiovisual y Gobierno se mantienen firmes en su idea de reducir la piratería en nuestro país, aunque sus medios no parecen los más adecuados. Yo tengo clarísimo que el principal problema de este país es la falta de una oferta de contenido decente, completa y sin obligaciones a largo plazo. Lo poco que tenemos no se adecua a la realidad de este país, ni a los sueldos ni a las necesidades de los usuarios. En el caso del cine online, nos llevamos las manos a la cabeza al tener que pagar 5 euros (el doble que algunos videoclubs) por alquilar durante 48 horas una película.
Pero la cosa es aún más sorprendente (usemos esa palabra) cuando hablamos del fútbol. Este deporte que mueve miles de millones de euros es un auténtico negocio y nadie parece querer soltar el bocado. Esta noche se juega la ida de semifinales de la Copa del Rey entre Barcelona y Villareal y son muchos los que no querrán perderse lo que será, a buen seguro, un gran partido de fútbol. El partido se emite en exclusiva en televisión por Canal+1, cuyo precio en Movistar Fusión o en ONO es de 20,45 euros al mes.
Otra opción, que es la que nos ocupa en este artículo, es la de “alquilar” el partido a través de YOMVI, la plataforma online de Digital+. Esta alternativa no requiere el pago de ninguna suscripción mensual ni el hecho de mantener ningún compromiso de permanencia. Entrar, pagar y ver el partido. Hasta ahí parece fácil, pero si te decimos que cada partido (uno sólo) cuesta 9,62 euros ¿Cómo se os queda el cuerpo? Pues con estos precios difícil combatir la piratería, al menos es mi opinión.
Para más inri, esta plataforma ofrece la posibilidad de suscribirnos a YOMVI Liga+ por 18,15 euros al mes o YOMVI Liga+ Champions por 26,56 euros al mes. Vale, este partido no entra en ninguno de los paquetes, pero el Granada – Athletic o el Eibar – Elche de este fin de semana si están incluidos y ambos cuestan 9,62 euros “por separado”.
No tiene sentido tener que pagar casi 10 euros por un partido de fútbol cuando los abonos mensuales cuestan poco más del doble y ofrecen ocho partidos por jornada. El fútbol español debe empezar a ser consciente de la realidad de este país y adaptarse. De no hacerlo, seguiremos a la cola de Europa en número de abonados a televisión de pago y también seguiremos siendo el país con la cuota más alta del continente para ver fútbol por la tele.
¿Qué deben hacer los operadores para aumentar el número de abonados? ¿Es la solución poner partidos sueltos a 2 o 3 euros?