Si te has comprado un ordenador portátil, o un PC clónico, o hace mucho que montaste tu ordenador, es posible que no recuerdes o no sepas qué componentes de hardware tiene montados. Y hay momentos en los que esta información es necesaria. Cuando tenemos que ‘actualizar’ alguna de sus piezas, por ejemplo, o cuando queremos saber si un determinado software va a poder funcionar correctamente en el dispositivo. Sobre todo, cuando hablamos de videojuegos. Y hay formas sencillas de saber qué procesador, placa base, RAM y tarjeta gráfica están montados en nuestro ordenador.
Podríamos abrir la torre de nuestro ordenador para revisar, de forma visual, cuáles son los componentes de hardware que están montados. Pero además de que esto podría suponer complicaciones, si no hemos montado y desmontado nunca antes un PC, incluso viendo las piezas es muy probable que no las reconozcamos. De hecho, en la mayoría de ellas no pone qué modelo es, ni ninguna información que nos sea relevante. En ese caso, mejor será que lo evites ya que no siempre vas a saber cuál es cuál o vas a saber dónde tocar. Si no has montado tú el ordenador, no toques ni desenchufes nada de lo que luego vayas a arrepentirte. Lo más probable es que tampoco hayas guardado las cajas de los componentes, si lo has comprado por piezas. No necesitamos hacer nada de esto.
Así que lo mejor, si queremos saber el procesador, placa base, memoria RAM y tarjeta gráfica de nuestro ordenador, es recurrir al software. Por un lado, podemos consultarlo a través del propio Microsoft, que nos deja saber qué tenemos instalado en nuestro ordenador. Pero también está la alternativa de usar herramientas específicas, aplicaciones o programas que detectan los componentes de hardware de forma automática, en unos segundos, y nos dan la hoja de características técnicas al completo. Y si tienes Mac o Linux, también podrás obtenerlo de varias maneras.
Ver hardware en Windows
En este espacio revisamos cómo ver el hardware de nuestro ordenador y sus elementos más importantes directamente desde Windows, la plataforma operativa más extendida. No obstante, luego también te explicaremos qué tienes que hacer en el caso de que tengas Mac o Linux. Por lo tanto, sigue leyendo para conocer las diferentes alternativas que tienes dependiendo de las características de tu ordenador y de sus necesidades.
Desde tu propio sistema operativo Windows puedes conseguir los datos que estás buscando sobre lo que tienes en tu equipo sin necesidad de recurrir a herramientas externas que tienes que descargar, instalar y aprender a utilizar, siempre que sepas cuáles son las más indicadas y seguras, algo que te comentaremos posteriormente. El método más rápido es una herramienta que el propio sistema operativo pone a nuestra disposición, directX, aunque tenemos otras formas de llegar hasta estos datos, así que te comentamos cómo llegar hasta ellos.
Con DirectX
Podemos consultarlo desde el propio Windows accediendo a los ajustes del mismo y sin necesidad de descargar nada más en nuestro ordenador. Si tenemos un PC de sobremesa u ordenador portátil con sistema operativo Windows, es importante saber que el propio sistema de Microsoft ofrece una herramienta que nos permite saber qué componentes hardware tenemos instalados en el equipo. Concretamente, vamos a poder ver el fabricante de nuestro equipo, modelo de BIOS, procesador, memoria RAM, gráfica, tarjeta de sonido, etc.
Nos referimos a la herramienta de diagnóstico de DirectX, la cual podemos abrir fácilmente con unos pasos desde Windows y te explicamos cómo:
- Toca las teclas WIN+R en tu ordenador para abrir Ejecutar
- Se abrirá una ventana en la parte inferior izquierda de tu monitor
- Escribe Dxdiag en dicha ventana
- Pulsa Enter o Aceptar para ejecutarlo
Lo primero que hará Windows será preguntarnos si queremos seguir adelante y decirnos que nuestro ordenador es posible que se conecte a Internet. Después, tardará unos segundos en escanear todo lo que hay en él. Pasados esos segundos, se nos mostrará una ventana con la herramienta de diagnóstico en la que encontramos bastante información organizada por pestañas:
- Sistema
- Pantalla
- Sonido 1
- Sonido 2
- Entrada
En la primera encontraremos toda la información del sistema, la fecha y hora actual, el nombre del equipo, el sistema operativo, el idioma la BIOS, el procesador, la memoria…
En cada una de ellas tendremos información acerca del sistema y principales componentes de hardware, así como los controladores de cada uno de ellos o los periféricos que tenemos conectados al equipo. Por ejemplo, en la pantalla verás todos los controladores o el tipo de chip gráfico, la memoria aproximada, etc. En el sonido veremos los detalles de altavoces, controladores.
Por lo tanto, si estamos buscando una información básica sobre los componentes o características de nuestro hardware nos puede ser de gran ayuda y no necesitaremos usar ni instalar aplicaciones de terceros.
Desde Configuración y el Administrador de dispositivos
Otra forma de acceder a esta información, que puede ser más o menos complicada en función de la información que quieras obtener, es en la información Acerca de tu ordenador a la que llegarás desde la opción de Configuración. Esto da unos datos básicos que se pueden complementar navegando entre las opciones del Administrador de dispositivos o incluso buscando el modelo concreto en Internet. Te contamos cómo acceder a estos datos paso a paso desde aquí.
Por otro lado, si vas al menú de inicio y das a Configuración para posteriormente llegar hasta Sistema, en la parte izquierda de la pantalla abajo de todo pone Acerca de. Si le das a esta opción encontrarás información de tu ordenador como su nombre, procesador, RAM instalada y tipo de sistema. Además, si quieres ampliar información si buscas más sobre el modelo concreto en Internet puede que obtengas más información si lo has comprado y no has cambiado nada, aunque es algo que no vale si has sustituido alguna pieza o lo has comprado de segunda mano y no sabes qué le han podido hacer anteriormente.
Una buena forma de obtener información al respecto que complete esta es desde el propio Administrador de dispositivos, al que puedes llegar desde Windows o haciendo una simple búsqueda en el buscador. El propio sistema te dará en esta pantalla información como el procesador, la cantidad de RAM instalada, la velocidad, el modelo de tarjeta gráfica y otra información relacionada. Si tu sistema es más antiguo, puede que tengas que ir a Configuración e información del PC, acceso directo al Panel de Control en Sistema y Seguridad, en la opción Sistema. También puede estar en Mi PC y Propiedades en función de la versión Windows que tengas. Las opciones se verán en modo de árbol, así que, para conocer este dato, como por ejemplo el modelo de gráfica que hay instalado, tendrás que ir a la rama correspondiente y verlo.
Desde el símbolo del sistema
Aunque no te ofrecerá mucha información, puedes comprobar los componentes de tu ordenador para ver si alguno te da problemas o no es compatible con tu hardware, o por lo que quieras. Tendrás que buscar CMD dentro de Windows, aunque también lo puedes hacer desde el arranque si tu ordenador no arranca en las funciones avanzadas de arranque. El código que debes incluir en este caso es systeminfo. Te aparecerá información sobre los elementos de hardware con los que cuenta tu ordenador, sin muchos detalles adicionales ni tanta información como la del sistema, pero puede serte suficiente en algunos casos.
Así que ya sabes, si no te funciona o no puedes acceder a ninguna de las formas anteriores o te parece interesante la información y forma de presentación que encontrarás desde ahí solo tienes que dar al atajo Control + R y escribir cmd.exe o buscarlo en tu ordenador para poder usar este sencillo comando (systeminfo) y obtener los datos que buscas en menos de un minuto.
Desde información del sistema
Otra forma que tenemos para comprobar que hardware tenemos en nuestro equipo desde Windows sin necesidad de acudir a terceros es hacerlo a través de información del sistema. Este método es bastante sencillo de utilizar, y además nos arrojará información bastante completa sobre nuestro equipo. Para acceder a la información del sistema solo tendremos que introducir un simple comando en Ejecutar, y ya con eso nos aparecerá en pantalla toda la información que vamos a necesitar. Los pasos a seguir, por lo tanto, son los siguientes:
- Abre la ventana de Ejecutar con el comando Control + R o escribiendo ejecutar en el buscador de Windows
- Una vez nos aparezca la ventana, solo tendremos que escribir en ella «msinfo32» y pulsar aceptar o enter.
- Hecho esto nos aparecerá en pantalla una nueva ventana con toda la información de nuestro hardware.
En esta nueva ventana tendremos en la parte izquierda un desplegable al lado de la palabra «Componentes» y si pulsamos en él podremos ver uno por uno todos nuestros componentes. Es cierto que optando por este método vamos a obtener información más avanzada que si optamos por un programa de terceros de los que vas a poder ver a continuación, pero aún así se trata de un método muy a tener en cuenta dado lo fácil que es utilizarlo.
Mirando la placa base
Para averiguar qué tipo de placa base tenemos (además de quién la ha fabricado y qué conjunto de chips es), el proceso es un poco diferente al anterior. Podemos hacerlo abriendo la torre del ordenador de mesa y así verificar quién fabrica la placa base y cuál es el nombre del modelo en la placa. Las placas base suelen tener un nombre similar a ASUS Z690-P, MSI B550 o Gigabyte GA-AX370-Gaming5, donde ASUS, MSI y Gigabyte son fabricantes de placas base, y los números con letras son los chipsets de placa base.
Si no estamos familiarizados con los principales fabricantes de placas base y la cadena de letras y números, debemos buscar para designar el conjunto de chips y el nombre de la placa base; así que es posible que prefiramos optar por una opción más fácil.
A través del Administrador de tareas
Otra vía a través de la cuál podemos conocer qué procesador, placa base, RAM y tarjeta gráfica tiene nuestro PC, es por medio del famoso Administrador de tareas de Windows. Ya sabéis cómo abrirlo, con la clásica combinación de teclas Ctrl + Alt + Supr, o tecleando en la barra de inicio “Administrador de tareas” y haciendo clic en el icono que nos aparecerá. Ya dentro del Administrador de tareas podemos ver la siguiente información:
- En CPU tenemos el modelo del procesador. También podemos ver cómo está funcionando este, su porcentaje de uso, la velocidad, procesos y subprocesos, identificadores, etc.
- En Memoria vemos nuestra RAM, su capacidad (GB), tipo de memoria, la memoria disponible, caché, o velocidad.
- En Disco veremos la capacidad total de este, el tipo de disco que tenemos, tiempo de actividad y tiempo medio respuesta, velocidad de lectura y de escritura.
- En Wi-Fi vamos a poder consultar el adaptador de red, el modelo, Kbps de envío y recepción, SSID, y tipo de conexión.
- Por otro lado, en GPU tenemos la información referente a la tarjeta gráfica, el uso que está haciendo de la memoria, versión del controlador y la fecha de esta, versión de DirectX, y hasta la ubicación física de la tarjeta.
Desde la BIOS
Otra manera de conocer los componentes de tu equipo es consultándolo desde la BIOS. Para ello tendrás que reiniciar el equipo y entrar en la configuración de la BIOS, eso sí, debes tener todos los procesos claros y ser prudente porque hacer una configuración errónea en la BIOS puede llevar a un mal funcionamiento de tu dispositivo.
En primer lugar, deberás reiniciar tu ordenador y durante el arranque pulsar la tecla de acceso a la BIOS, aunque suele ser una tecla diferente según el modelo, suelen ser «Supr«, «F2«, «F10» o «Esc«, todo dependerá del modelo de la placa base. Una vez entres en la interfaz, debes saber que sera una interfaz de texto típica de BIOS o una interfaz gráfica UEFI, dependerá del modelo de tu equipo.
En la sección principal tendrás detalles sobre tu placa base, como el modelo y el fabricante. Pero también puedes acceder a otras secciones donde podrás ver información sobre la velocidad del reloj, la arquitectura que usa y el rendimiento, por ejemplo. Además, en el apartado de memoria, podrás ver los detalles sobre la RAM de tu dispositivo.
Como hemos dicho, ten precaución al realizar cambios, ya que los ajustes incorrectos pueden afectar al rendimiento o incluso dañar el hardware de tu ordenador. Sigue las instrucciones del fabricante y realiza copias de seguridad cuando sea necesario.
Ver en otros sistemas operativos
Como te decíamos, no solo te explicamos cómo hacerlo en Windows, dado que es posible que seas usuario de Mac o Linux. En ambos sistemas los procesos llegan a ser un poco más sencillos y no hay tantas opciones, así que te explicaremos con rapidez qué es lo que tienes que hacer.
Ver hardware en Mac
Para ver cierta información y datos de tu ordenador que quieres conocer, tienes que hacer lo siguiente si tienes un Mac. Primero, deberás usar Información del Sistema para ver un resumen de la información acerca del hardware, el software y la red del Mac. La app Información del Sistema proporciona especificaciones detalladas e información de otro tipo sobre el hardware y el software del Mac, incluidos la red y los dispositivos externos. En algunas versiones de OS X, esta app se llama Perfil de Sistema.
Selecciona el menú Apple y después, Acerca de este Mac. De esta manera, se mostrará una descripción general del Mac, como el modelo, el procesador, la memoria, el número de serie y la versión de macOS. Para ver más detalles de la app Información del Sistema, haz clic en el botón Informe del sistema.
Para abrir directamente la app Información del Sistema, mantén pulsada la tecla Opción y selecciona el menú Apple e Información del Sistema, como decimos. También puedes usar Spotlight para buscar Información del Sistema o para abrirlo desde la carpeta Utilidades de la carpeta Aplicaciones.
Dentro de Informe del sistema, puedes seleccionar los ítems de la barra lateral para ver información de cada uno. Por ejemplo, la sección Hardware muestra el número de serie del Mac, la sección Memoria muestra cuánta RAM hay instalada en cada ranura de memoria interna. Por otro lado, la sección Software muestra qué disco de inicio (volumen de arranque) está usando el Mac, y la sección Red muestra, entre otra información, la dirección IP, las conexiones permitidas por el firewall de macOS o la intensidad de la señal de las redes wifi cercanas.
También tienes la posibilidad de que, si quieres que Información del Sistema lea en voz alta el número de serie, lo pueda hacer. Sólo tienes que seleccionar Archivo y después, leer número de serie. Para guardar una copia del informe del sistema, tendrás que seleccionar Archivo y después, Guardar. Y, por último, ara obtener más información sobre Información del sistema, selecciona Ayuda y Ayuda de Información del Sistema.
Ver hardware en Linux
Si tienes Linux y quieres saber las características de tu ordenador, como sucede con Windows y con Mac el sistema operativo proporciona herramientas propias para revisar estos datos.
La manera más fácil de conocer la información sobre tu PC Linux es dirigirte a la terminal de comandos de Ubuntu. Lo único que tendrás que hacer es introducir el comando «sudo Lshw | less» y conseguirás acceso a todos los datos que tengan que ver con la memoria RAM, la GPU, la CPU, la pantalla y otros datos importantes de tu ordenador.
Otra alternativa para ver estos datos en un PC Linux pasa por ir al directorio virtual. Aquí tendrás que escribir el comando «ls / proc» e inmediatamente tendrás acceso a todos los archivos relacionados con las propiedades de tu ordenador.
Las mejores herramientas para conocer el hardware
Además de conocer estos datos en los propios sistemas operativos, también existen herramientas para conocer el hardware. No hay una única herramienta que nos diga qué componentes de hardware tiene instalados nuestro ordenador, sino que son muchas las que tenemos disponibles. En este caso, si no nos vale con lo anterior, tardamos apenas unos segundos en descargar cualquiera de estas opciones y salir de dudas.
Y lo mejor de todo es que la mayoría de ellas son gratis y son herramientas portables; es decir, que ni siquiera las tenemos por qué instalar en el ordenador. Basta con ejecutarlas desde el mismo, como una app, y el análisis del hardware de nuestro ordenador se llevará a cabo para decirnos, al final del proceso, cuál es nuestra placa base, el procesador, la memoria RAM y la tarjeta gráfica. Y también nos puede dar el desglose del resto de componentes de hardware.
CPU-Z
CPU-Z se puede descargar como programa instalable, o en una carpeta ZIP. Si optamos por la segunda opción, podremos abrir directamente la aplicación –en formato .exe- sin tener que instalar nada. Y al abrirla, en un instante habrá analizado nuestros componentes de hardware. En diferentes pestañas podemos encontrar la información sobre la CPU, la placa base, la memoria RAM o la tarjeta gráfica. Nos dice no solo el nombre y el modelo de cada uno de nuestros componentes de hardware, sino también información técnica relevante y detalles sobre su funcionamiento en tiempo real.
Aunque con una interfaz sencilla, CPU-Z nos da toda la información imprescindible sobre los componentes de hardware que tenemos instalados en nuestro ordenador. No es la aplicación que más información ofrece dentro de este tipo de programas, pero va a aclararnos las dudas sobre qué tarjeta gráfica, placa base, CPU y memoria RAM están instalados en nuestro ordenador. Da igual si es de sobremesa o portátil.
CPU-Z es fácil de usar y no requiere instalación. Una vez que se descarga el archivo ejecutable, se puede ejecutar directamente desde el archivo descargado. La aplicación es liviana y no consume muchos recursos del sistema.
GPU-Z
GPU-Z es una herramienta de software gratuito que proporciona información detallada sobre la tarjeta gráfica de tu ordenador. Esta herramienta está diseñada para usuarios avanzados y gamers que necesitan conocer información específica sobre su tarjeta gráfica para optimizar su rendimiento y ajustar la configuración de los juegos.
GPU-Z muestra información detallada sobre el modelo de la tarjeta gráfica, la velocidad del reloj, la temperatura, la memoria y la versión del controlador. La herramienta también proporciona información detallada sobre la BIOS de la tarjeta gráfica, incluyendo el tamaño de la BIOS, el tipo de BIOS y la fecha de lanzamiento.
Por otro lado, puede monitorear la actividad de la tarjeta gráfica en tiempo real, lo que te permite ver la carga de la GPU, el uso de la memoria y la velocidad del ventilador. GPU-Z te permite registrar datos de la tarjeta gráfica en un archivo de registro para su posterior análisis. Incluso puede detectar y mostrar información para múltiples tarjetas gráficas en sistemas con configuraciones de múltiples GPU. La puedes descargar desde su página web.
Speccy
Speccy se tiene que instalar, algo que puedes hacer desde aquí. Y aunque existe una versión gratis, que es la que vamos a utilizar, si queremos todas sus funciones y características, entonces tendremos que pasar por caja. En este caso volvemos a tener la información en pestañas según el apartado correspondiente, y tenemos más información. En el resumen podemos ver ya todo lo que necesitamos, con detalles sobre la temperatura de la CPU, la placa base, el almacenamiento o la tarjeta gráfica. Y en apartados podemos ver más detalles de cada componente de hardware, tanto sobre su funcionamiento en tiempo real como sobre las características técnicas desglosadas.
De hecho, en esta aplicación tenemos también información sobre los periféricos, que es algo que no nos ofrece CPU-Z, y tenemos también disponibles detalles sobre la red. Entre otras muchas cosas, podemos ver la velocidad a la que se están descargando datos utilizando el dispositivo de red. En definitiva, es un programa algo más completo que CPU-Z, aunque si queremos únicamente saber qué componentes de hardware tenemos instalados, va a cumplir exactamente de la misma manera.
AIDA64 Extreme
Esta herramienta, AIDA64, de nuevo nos ofrece la posibilidad de instalación o de uso como aplicación portable. Es de pago, pero tiene una versión de prueba que nos puede servir de forma puntual para saber qué componentes de hardware tiene instalados nuestro ordenador. Al abrir la aplicación nos volveremos a encontrar con diferentes pestañas en las que revisar toda la información, a modo de lista. El apartado visual es mucho más sencillo que el de los programas anteriores.
Podemos ver información sobre la placa base, sobre la CPU, la memoria RAM, la tarjeta gráfica y muchos otros apartados. Y sí, nos da algunos detalles sobre el funcionamiento en tiempo real. Pero tal y como comentábamos, todo se muestra en formato lista con una interfaz menos intuitiva y mucho menos agradable a nivel visual que en las anteriores aplicaciones. No obstante, cumple con la misma función de forma perfecta. Si te animas a utilizar el programa, lo encontrarás para descargar en su web oficial.
HWInfo
HWInfo, está disponible aquí como programa instalable y también como aplicación portable. Así que esta también se lleva un punto a su favor por este motivo. Nada más abrir el programa tendremos que pulsar en ‘Run’ para que inicie el escaneo, que podemos personalizar para que se muestre de forma simplificada, y a continuación nos mostrará una completa ficha con todos los detalles en una única vista, en lugar de organizar pestañas independientes como todos los programas anteriores.
Nos muestra detalles de la CPU y de la tarjeta gráfica en un lado, junto a la información sobre el almacenamiento en disco duro o en SSD, y en el lado derecho tenemos los detalles sobre la GPU –la tarjeta gráfica- y también sobre la memoria RAM, así como información sobre el sistema operativo que tenemos instalado en un último apartado en la esquina inferior derecha. Aunque quizá no sea tan intuitivo y agradable a nivel visual, sin duda nos será más rápido de consultar por tener toda la información disponible en un único apartado.
Otros programas recomendados
Aunque los anteriores son los que consideramos los mejores, hay otras herramientas que puedes descargar e instalar en tu ordenador y que te ayudarán a conocer los distintos componentes que tienes en el equipo. Echa un vistazo a las demás recomendaciones que te proporcionamos en las próximas líneas.
CrystalDiskInfo
Este es un sencillo programa donde podremos ver el estado y como son las unidades de disco duro, los SSD y las unidades USB que haya en nuestro ordenador. Tenemos detalles importantes como la temperatura que tienen en tiempo real, el tiempo de rotación, la actividad, la cantidad de errores que acumulan y además todos los datos de cada unidad como el Firmware, el número de serie, la interfaz, la letra de la unidad, el modo de transferencia de datos e incluso las horas que lleva encendido.
No tienes más que instalarlo desde su página y empezar a utilizarlo con total comodidad, accediendo a los datos que te ofrece y navegando por su menú si lo deseas. Conoce el estado de salud de tu ordenador y descubre cómo mejorarlo.
HW-Monitor
Este es un excelente programa gratuito que nos sirve para saber las temperaturas del procesador, tarjeta gráfica, placa base, discos duros o SDD, además del voltaje que tienen la fuente de alimentación y hasta nos indicará la velocidad de los ventiladores internos del ordenador.
Veremos en tiempo real y en cada uno de los casos, como llama el componente que analiza y la temperatura, la máxima, y la mínima que se han alcanzado. La versión Pro (de pago, por supuesto) ofrece varias mejores, pero no nos parecen realmente significativas para lo que hoy nos ocupa. Este programa, disponible aquí, nos puede servir para ver que tenemos en el PC y al mismo tiempo para controlar que ningún componente se caliente demasiado.
Wise System Monitor
Se trata de una herramienta muy sencilla con la que podrás controlar diferentes funcionalidades de tu ordenador. Por ejemplo, el uso de la CPU, el uso de la memoria así como los distintos procesos que se encuentran en ejecución. Y, lo que es más importante, tendrás acceso a toda la información relacionada al hardware de tu PC. Como este programa analiza tanto el consumo de tu RAM como de tu CPU, podrás averiguar si tu ordenador se encuentra sobrecalentado y actuar en consecuencia para garantizar su funcionalidad.
Además, otro de los puntos fuertes de Wise System Monitor es que proporciona a los usuarios una lista muy detallada de todos los procesos que se encuentran en ejecución dentro del sistema, así como la tasa de consumo de la CPU y la memoria. Por tanto, los usuarios podrán cerrar en cualquier momento un proceso que no sea realmente necesario para el funcionamiento del ordenador. Asimismo, podrás verificar la conectividad de la red en tiempo real y la velocidad de carga y descarga de casa proceso, por lo que es verdaderamente eficiente.
En definitiva, con esta herramienta podrás acceder rápidamente a toda la información de los componentes principales del hardware, como el CPU, la placa base, la tarjeta gráfica, el disco duro, la tarjeta de red o la tarjeta de sonido, entre otros aspectos fundamentales. Para descargarlo entra en su web aquí.
Belarc Advisor
Otra alternativa a tener en cuenta es Belarc Advisor, un programa que tiene la particularidad de no limitarse únicamente a proporcionarte información sobre el hardware de tu equipo. De esta forma, además de revisar el hardware, también hará un análisis del software. Por lo tanto, si tenías la necesidad de ello, puede ser una buena forma de hacer un 2×1.
Eso sí, ten en cuenta que su profundidad en el análisis del hardware es inferior a la de los programas que hemos seleccionado en la categoría de las mejores herramientas. Tiene algunas ventajas adicionales, como informarte de si alguno de los drivers que estás utilizando en tus componentes de hardware se ha quedado anticuado. Eso te ayudará a saber si un problema que se pueda haber producido está relacionado con los drivers, lo que será una forma muy conveniente de ponerle remedio cuanto antes.
El programa también te asegura una revisión del estado de seguridad de tu equipo, lo que incluye el posible descubrimiento de vulnerabilidades que te estén poniendo en peligro. La combinación de todas estas funciones hace del software una herramienta que resulta interesante para tener en cuenta si queremos un servicio más generalizado.
En sus últimas versiones se ha optimizado para la última versión de Windows y funciona directamente desde el navegador. Además, garantiza confidencialidad absoluta al quedar especificado que no se envía ninguno de los datos privados de los usuarios hacia el programa. Por otra parte, es compatible con la mayor parte de los navegadores, tanto con Chrome o Edge como con Firefox, Opera o Safari. En cuanto a su interfaz, se trata de una herramienta que simplifica el uso para que utilizarla no tenga ningún misterio y que no encuentres problemas.
Quizá te parezca que su análisis es un poco lento comparado a otras opciones, pero el principal motivo de ello es que analiza más elementos, por lo que no se trata de un proceso rápido. Lo encontrarás en su web.
Cómo conocer la calidad de nuestro hardware
Más allá de consultar las herramientas que nos permiten saber el hardware que tenemos, existen alternativas para valorar la calidad de nuestro hardware y puntos a tener en cuenta para escoger los componentes más adecuados. Una de ellas es Winaero, una herramienta pensada para puntuar algunos componentes importantes de hardware. Otra alternativa es revisar los núcleos del procesador, cómo vemos en el punto siguiente. Además, también debemos tener en cuenta que existen diferentes tipos de placas base y de tamaños de torre.
Análizando los componentes con Winaero
No solo sabremos lo que hay en nuestro PC, sino que podremos averiguar si merece la pena hacer algún cambio o no, cambiarlo al completo. Si necesitamos implementar muchos cambios y estos son costosos, es posible que tengamos que plantearnos comprar un nuevo equipo, si no es así y además contamos con un buen equipo que nos puede durar años debemos valorar mejorarlo o mantenerlo como está.
Una de estas herramientas para comprobar o saber qué nota sacaría nuestro ordenador es Winaero que analiza y puntúa algunos componentes como el procesador, la RAM, los gráficos, la tarjeta de vídeo o el disco duro. Si no sabes bien si alguno está obsoleto, esto te puede ayudar a comprobar el rendimiento de un ordenador que has heredado, por ejemplo.
Este programa realiza y emula unos test sintéticos como los que llevaba el programa original en las versiones de Windows 8, 7 y XP. En aquellos entonces, el hardware de la época era muy distinto al de ahora. Así que cuanto más moderno sea, mayor puntuación tendrá.
Descarga el programa desde la página web y automáticamente comenzará a funcionar gracias a que es un archivo ejecutable que no requiere instalación. Una vez lo tengas, ve a “Ejecutar” y empezará a analizar del hardware y a puntuar cada una de las partes correspondientes. Hay cinco parámetros que tiene en cuenta y cada uno de ellos recibe una nota.
Al final, consigues una nota media según tu disco duro, gráficos, RAM, procesador… Si la nota es baja, podrás decidir cambiar el hardware que tienes. Si nos fijamos, la puntuación corresponde con el valor más bajo obtenido en cada prueba.
Revisando los núcleos del procesador
Si tienes un teléfono inteligente o una tableta, dentro del mismo hay un procesador. Lo mismo pasa con los televisores o con los ordenadores, entre muchos otros dispositivos electrónicos e informáticos. Y al revisar su hoja de características técnicas, sobre el mismo encontrarás algunos detalles; entre ellos están los núcleos del mismo, así como su frecuencia de reloj, por ejemplo. Pero ¿qué son los núcleos de un procesador? Así es como afecta que tenga más o menos.
Estamos hablando de la CPU, o la unidad central de procesos, y este es uno de los componentes de hardware más importante en dispositivos informáticos. Aunque no depende únicamente de la CPU, el rendimiento está directamente ligado a la misma y sus características técnicas. Así que, aunque no es el único dato importante, ni muchísimo menos, revisar los núcleos del procesador nos da una idea de sus capacidades.
Los procesadores más antiguos eran single core; es decir, de un único núcleo. Los actuales van mucho más allá. Estos núcleos son, cada uno de ellos, y explicado de la forma más sencilla posible, una unidad de procesamiento en sí misma. Los núcleos se dedican a leer instrucciones y a ejecutar acciones específicas. Si llevamos a cabo cualquier tipo de acción en nuestro teléfono inteligente, tableta, televisor y ordenador –entre otros dispositivos-, todo esto pasa por el procesador. Los núcleos del procesador, como decíamos, son capaces de hacer ciclos de procesamiento de forma independiente, en cuatro partes: lectura, decodificación, ejecución y escritura.
Pero ¿depende el rendimiento de los núcleos? Sí, y no. Un núcleo puede llevar a cabo un ciclo de instrucción por sí solo. Es decir, que si tenemos dos núcleos, podríamos paralelizar y llevar a cabo dos ciclos de instrucción independientes, como si tuviéramos dos procesadores. Si tenemos cuatro, entonces podemos llevar a cabo cuatro ciclos de instrucción de forma simultánea, a priori. Básicamente, tenemos mayor capacidad de instrucción simultánea, pero la velocidad con la que se llevan a cabo estos ciclos de instrucciones no depende de los núcleos, luego el rendimiento no necesariamente está vinculado de forma directa a los núcleos por su cantidad.
El diseño de una CPU es realmente complejo, y sería conveniente ahondar en muchos otros detalles sobre sus características técnicas. No obstante, a nivel de usuario y para tener un concepto amplio sobre el rendimiento de un procesador, podemos limitarnos a dos datos clave: núcleos y frecuencia de reloj.
Como decíamos, un procesador, o una CPU, se compone de varios núcleos. A más núcleos, más unidades de procesamiento independientes y, por tanto, mayor cantidad de instrucciones se podrán procesar de forma simultánea. La paralelización en el procesamiento de instrucciones permite un mayor rendimiento, pero la frecuencia de reloj es lo que define la velocidad con que se llevan a cabo estos ciclos de instrucciones. Esta velocidad se mide en GHz; cuanto mayor sea, más rápido será capaz cada uno de estos núcleos en completar esas cuatro partes que componen un ciclo de instrucción completo.
Y esto es precisamente lo que explica que un procesador dualcore pueda ser más rápido que un procesador quadcore. Además de por otros factores como la arquitectura –evidentemente-, la memoria caché de la CPU, el proceso de fabricación y un largo etcétera. Pero es importante conocer qué son los núcleos de una CPU y su funcionamiento, al nivel más básico, y en relación a la frecuencia de reloj, para desmitificar que los procesadores de ocho núcleos en teléfonos inteligentes, por ejemplo, sean siempre la mejor opción.
Por otro lado, también hay que tener en cuenta que la optimización de software juega un papel crucial para aprovechar, o no, el diseño de hardware de muchos componentes y, entre otros, la CPU. No todos los programas, y no todas las aplicaciones, están preparadas para aprovechar determinados diseños de CPU. Aunque con algunos programas y apps se puedan aprovechar las prestaciones de una CPU octacore, por ejemplo, habrá con otros programas con los que esta característica no importe lo más mínimo que contemos con ocho núcleos.
Conociendo las placas base
Otro punto muy importante para valorar los componentes de nuestro ordenador son las placas base. ATX es el estándar, por así decirlo, y básicamente es el tamaño de la torre de un ordenador; un factor de forma que, en realidad, condiciona toda la disposición de componentes de hardware de un ordenador. Así que te explicamos qué son ATX, microATX, miniATX y eATX, las diferencias que hay entre cada uno, y cuáles son sus distintas características.
ATX ha sido durante años el factor forma más extendido entre los ordenadores: son 12 pulgadas de ancho y hasta 9,6″ de alto, es decir, 305 mm por 244 mm. Y por encima del mismo está eATX, de ‘Extended ATX’, que sube hasta las 13 pulgadas de alto. Las otras dos opciones son más reducidas: microATX es cuadrado, con 9,6″ por cada lado, y mini ATX también es cuadrado, con 6,7″.
Medidas y dimensiones ATX:
- E-ATX: 30 cm x 33 cm.
- ATX: 30,5 cm × 24,4 cm.
- Mini-ATX-28 (mATX): 28,4 cm x 20,8 cm.
- Micro-ATX-24 (uATX): 24,4 cm x 24,4 cm.
En una torre eATX puedes instalar cualquier placa base. En el resto, sólo la que le corresponda por coincidencia del factor de forma o una inferior.
Valorando el tamaño de la torre
Estas medidas estándar condicionan toda la disposición de un ordenador, o más bien de sus componentes de hardware del interior. En base al estándar que cumpla la torre o caja, entonces deberemos optar por una u otra placa base. Si optamos por miniATX, o microATX, entonces nos quedaremos con menos opciones entre las que elegir. No obstante, también nos tendremos que quedar con una tarjeta gráfica de un único ventilador, en la mayoría de los casos, por la falta de espacio.
Si no queremos gráfica de un ventilador, por ejemplo, y quedarnos limitados en conexiones PCI, entonces deberíamos olvidarnos de configuraciones que no sean eATX o bien ATX. No sólo por este motivo, sino también porque la refrigeración del interior será más complicada en torres tan compactas, por la reducción del flujo de aire. Además, las posibilidades de expansión se reducen por cuestiones evidentes, y no tendremos tanto espacio para la distribución de discos duros. Eso sí, si necesitamos un ordenador pequeño podemos optar por estos estándares de factor de forma.